México no se debe confiar: José Ángel Gurría

CIUDAD DE MÉXICO, 28 de agosto.- México no debe caer en la autocomplacencia por el hecho de que este año crecerá a una tasa superior al 3.5 por ciento, muy por encima de las economías de Europa y Estados Unidos, ya que aún con este avance del PIB, al país le falta mucho para alcanzar el ingreso per cápita de estas naciones industrializadas.

Además de que debe superar la pobreza moderada o extrema que afecta a 50 millones de mexicanos, afirmó José Ángel Gurría, secretario general de la OCDE.

Advirtió que al tener México una de las economías más abiertas del mundo y dada su estrecha integración comercial con  Estados Unidos, el país enfrenta una mayor vulnerabilidad ante las desaceleraciones globales y ante los probables descalabros financieros de Europa.

Por ello, México debe emprender reformas urgentes, como lograr un sistema fiscal robusto, ágil y redistributivo; un mayor y mejor dirigido gasto social; una nueva ley laboral, más moderna, así como una educación de calidad, la cual continúe en el trabajo.

También recomendó una reforma energética con una visión intergeneracional.   

OCDE pide poner fin a la crisis financiera mundial

La perspectiva económica global se deterioró y continúa siendo pesimista, ya que en Estados Unidos, el crecimiento disminuyó a 1.5 por ciento en el segundo trimestre, mientras que en Europa, el nulo crecimiento, combinado con el aumento de la desigualdad en el ingreso y el desempleo, sobre todo entre los jóvenes, están creando “un coctel explosivo”, advirtió José Ángel Gurría.

El secretario general de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) destacó que el epicentro de la crisis es la eurozona, por lo que resolver la emergencia de la moneda común, continúa siendo una prioridad, ya que “la posibilidad de un nuevo descalabro de los sistemas financieros europeos, no ha desaparecido”.

“De producirse, nos afectaría a todos, incluyendo a México a través de su intercambio comercial con Europa y de manera indirecta a través de Estados Unidos”, enfatizó.

De paso por México, Gurría subrayó en el Club de Industriales, que el escenario de riesgo “es evitable en la medida en que Europa movilice sus recursos financieros, institucionales y políticos y logre apagar los incendios inmediatos asociados con la crisis bancaria y de deuda soberana”.

Precisó que la prioridad de corto plazo es fortalecer los sistemas financieros de las economías más vulnerables.

Acciones

El funcionario destacó que el Banco Central Europeo necesitaría utilizar su capacidad de maniobra para estabilizar los rendimientos de la deuda soberana de países que “hacen su tarea” pero que siguen bajo presión de los mercados, como España e Italia.

Además consideró que de utilizar plenamente el amplio espacio disponible en el balance del BCE, los gobiernos de la zona del euro deben hacer su parte, utilizando su llamado cortafuegos para poner fin a la crisis de corto plazo.

Pero eso tampoco es suficiente, recalcó, al señalar que los países europeos también necesitan convencer a los mercados de que pueden construir juntos una visión estable de largo plazo.