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CIUDAD DE MÉXICO.- A dos meses de que la factura electrónica sea obligatoria para las empresas con ingresos superiores a los cuatro millones de pesos anuales, alrededor de 200,000 de un estimado de 800,000 que deben hacerlo, aún no han migrado al nuevo esquema.
Así lo dio a conocer el gerente de Estándares de GS1, Marco Bolaños, al precisar que también se prevén multas y hasta cárcel para el representante legal de las empresas que emitan facturas en papel a partir del 1 de enero de 2013.
Indicó que si bien son alrededor de 800,000 empresas las obligadas a facturar electrónicamente, serán más de 2 millones las que finalmente lo hagan una vez que sus proveedores o clientes se lo soliciten aunque estén exentas.
En conferencia de prensa, Bolaños aseguró que pocos empresarios conocen este plazo que está por llegar a su fin, debido a la falta de difusión por parte de la autoridad.
En este contexto, expuso que la factura electrónica limitará la evasión fiscal, aumentará la certeza jurídica en las operaciones de las empresas y coadyuvará a aumentar la recaudación fiscal.
Para que una empresa pueda migrar al documento electrónico debe primero obtener la firma electrónica avanzada en el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Posteriormente obtener folios y código de barras proporcionados por el SAT; para luego integrarlos a las facturas y finalmente entregarlas a sus clientes.
La elaboración de la factura electrónica se puede hacer por medio propio (software comprado, desarrollado o rentado), o a través de la certificación denominada XML a través de un Proveedor Autorizado de Certificación (PAC).
Este proveedor cobrará de tres a ocho pesos por comprobante y esto dependerá del volumen.
Cabe recordar que el folio de estas facturas electrónicas no caduca y es asignado al momento de la certificación, que es un proceso en línea.
Marco Bolaños señaló que la tendencia es que con el tiempo la factura electrónica sea obligatoria para todo el sector empresarial del país, independientemente del monto que facture.
