Darío Celis

Tiempo de negocios

Darío Celis

14 Nov, 2012

La sociedad Mexichem-Pemex en riesgo y cuestionan Etileno XXI por subsidio a Braskem

Al gobierno de Felipe Calderón le resultaron insuficientes los seis años que tuvo para empujar los megaproyectos de infraestructura en materia energética y petrolera. Y es que en el ocaso de su administración, intentó sacarlos al vapor, con el saldo por muchos ya conocido.

Ahí están los casos del sistema de ductos Los Ramones y el famoso contrato para abastecer de gas natural a la industria que tanto cacarea el secretario de Energía, Jordy Herrera, y que nada más no sale… ni saldrá porque ya lo vetó el nuevo gobierno de Enrique Peña Nieto.

Los Ramones, que costaría tres mil 100 millones de dólares, se replanteará totalmente. Andrés Antonius, director de Planeación del equipo de transición, fue el que comunicó al propio Herrera la decisión del nuevo gobierno de cancelar la red de mil 100 kilómetros de ductos.

La nueva administración no tiene la menor intención de abandonar el desarrollo, pues está consciente de que México requiere infraestructura para transportar gas.

Diseñará un esquema menos oneroso, que no implique un sobreendeudamiento, pero sobre todo más transparente.

De entrada se le quitaría a Pemex, que dirige Juan José Suárez Coppel, el proyecto. Éste lo lideraba Pemex Gas y Petroquímica Básica, de Alejandro Martínez Sibaja, que diseñó todo un complejo y opaco entramado administrativo y financiero que generó muchas suspicacias.

Por ello los consejeros profesionales Fluvio Ruiz, Fortunato Álvarez, Héctor Moreira y Rogelio Gasca Neri nunca lo aprobaron. Bajo el nuevo gobierno es muy factible que la encomienda de construir Los Ramones se le asigne a la Comisión Federal de Electricidad.

El tan llevado y traído contrato con la Concamin, que preside Francisco Funtanet, para importar gas natural de Perú vía Manzanillo, pagando un promedio de tres dólares más un ligero sobreprecio el millón de BTUs, a fin de amortiguar las alertas, es otro asunto que ya se vetó.

El nuevo equipo que tomará posesión consideró que Pemex, la CFE y los industriales no tenían por qué pagar un gas natural caro, cuando se tienen otras fuentes de generación de energía. La estrategia es echar mano de más combustóleo en las plantas de la propia Comisión.

La modernización de la flota de Pemex es otro tema pendiente no sólo de Calderón, que como titular de Energía conocía el rezago, al igual que la infraestructura  de ductos. La sustitución de los buques se viene intentando realizar desde la administración de Vicente Fox.

Suárez Coppel, como director corporativo de Finanzas, implantó la práctica de lanzar convocatorias internacionales y de terminar utilizando a la filial PMI para sacar a los grupos mexicanos y adjudicar al broker internacional que mejor le acomodara.

En el caso de los dos floteles, si bien operará el mismo principio para permitir la entrada de los astilleros de Galicia, los empresarios de esa localidad no tienen asegurado el contrato porque deberán competir con otros interesados. Lo que tampoco se les asignará son 21 remolcadores.

Pero el nuevo expediente que le adelanto ya está bajo revisión y que representará un nuevo revés para Calderón y sus pupilos, es Etileno XXI.

Se trata de un megaproyecto de tres mil millones de dólares que Pemex asignó en 2009 a la brasileña Braskem y a la mexicana Idesa.

Consiste en la construcción de un cracker de etileno que impulsa Pemex Petroquímica, que aún dirige Rafael Beverido.

Su talón de Aquiles y que propició diferencias con el equipo de transición es el excesivo subsidio que Pemex dará a los brasileños para acceder a la materia prima.

Estamos hablando de gas etano, por el que la paraestatal que lleva Suárez Coppel otorgaría precios de transferencia a dos compañías privadas que se beneficiarían por encima de otras, lo que de suyo abre la posibilidad para que después se acuse al joint venture
de dumpear el etileno.

Etileno XXI, al igual que Los Ramones, los contratos de suministro de gas natural y la modernización de la flota de Pemex Exploración y Producción y Pemex Refinación, que dirigen Carlos Morales y Miguel Tame, respectivamente, también entró a revisión y podría vetarse.

A ese paso no se descarta que corra una suerte similar la sociedad entre la misma Pemex Petroquímica y Mexichem, la de Antonio del Valle Ruiz, para administrar la planta de Pajaritos, con vistas a elevar la producción de cloruro de vinilo en esa instalación de Veracruz.

El caso ya fue votado durante el pasado consejo extraordinario del 29 de octubre. Estuvo reñido porque fueron tres votos en contra y tres a favor. El voto de calidad lo dio Jordy Herrera. Técnicamente ya fue aprobada, pero la última palabra se dirá el 28 de noviembre.

Del SAT a SCJN

Felipe Calderón está por enviar las dos nuevas ternas de candidatos a magistrados, luego de que la semana pasada el Senado le rechazara su propuesta.

El PAN impugnó a Manuel Baráibar, que era la carta del PRI, y este partido tiró a Alberto Pérez Dayán, que era el ungido por Presidencia y el partido albiazul. Trascendió que una terna va estar integrada por magistrados y que de nueva cuenta Calderón propondría a Pérez Dayán.

Se dice que lo acompañaría Rosa María Temblador, Emma Meza o Andrea Zambrana, quienes fueron rechazadas en una primera vuelta. La sorpresa es que en la segunda terna, que serían candidatos externos, la lista la encabeza Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, actual titular del SAT.

También se habla de que iría Felipe Borrego, responsable de implementar la reforma de justicia penal con juicios orales. Asimismo César Jáuregui, consejero de la Judicatura Federal, y por ahí hay quien dice que otro pudiera ser Javier Laynez, procurador fiscal del que le reseñábamos la semana pasada acciones irregulares. A él dicen que lo está cabildeando fuerte el secretario de Hacienda, José Antonio Meade.

Ghosn en México

La noticia es que Carlos Ghosn está en México. El CEO de Nissan-Renault se encuentra aquí supervisando las operaciones locales de las armadoras.  Hoy estará en Sony Insurgentes, la nueva distribuidora insignia de Nissan en la Ciudad de México.

Apenas el 5 de noviembre dijo en Japón que Nissan necesitará construir otra planta de ensamble en América del Norte en los próximos cinco años, después de que alcance su meta de tomar 10% del mercado de Estados Unidos.

La capacidad adicional podría servir para desarrollar la plataforma de producción del modelo Infiniti, del segmento de lujo. El tema es de vital importancia para México, pues desde hace varias semanas corre la versión de que el Infiniti se podría producir aquí.

Si nuestro país gana esa planta estaríamos hablando de una cuarta fábrica: están una en Morelos, la de Aguascalientes y otra en ese estado que abrirá el próximo año.

Interjet descarta

La operación bursátil que Interjet trabaja con JP Morgan, de Eduardo Cepeda, y Banorte-Ixe, que dirige Alejandro Valenzuela, nada tiene que ver con la colocación de Certificados Bursátiles que está efectuando por estos días.

En el primer caso es una colocación de acciones, hasta 20% de su capital, para levantar entre 300 y 400 millones de dólares. El segundo es deuda por 121 millones de dólares. La intención del equipo de Miguel Alemán es concretar su salida a Bolsa hacia marzo o abril del siguiente año.

Por cierto que si bien American Airlines se acercó a Interjet con miras a un acuerdo comercial, se ve difícil que cuaje. Una condición sería homologar la flota a Boeing, lo que por supuesto no está en los planes de los mexicanos.

Además Interjet buscaría un aliado más del tipo de JetBlue, que es una aerolínea nueva y de bajo costo.