David Páramo

Análisis superior

David Páramo

14 Dic, 2012

Políticos financieros

Si bien los miembros del sector financiero no son dados a manifestar sus preocupaciones en público, es un hecho que se sienten incómodos con algunos temas que tienen que ver con la visión del crédito que tiene la administración de Enrique Peña Nieto.

Desde la transición comenzaron a sentirse incómodos por los reiterados mensajes sobre la necesidad de un mayor crédito y de la reordenación de la banca de desarrollo. Entre los banqueros queda muy claro que soltar los controles del crédito puede resultar en una crisis financiera muy grave.

Más allá, hasta el momento Banco de México no se ha pronunciado en ningún sentido. Parecería que están esperando hechos y no dichos del nuevo gobierno, pero no debe olvidarse que Agustín Carstens ha sido particularmente claro que durante su mandato no habrá una crisis financiera y no permitirá que se suelten los controles sobre este sector que, claramente, han sido muy duros durante su gestión.

Hay quienes dicen que, en una de esas, el silencio tiene que ver con el hecho de que hay una vacante en la Junta de Gobierno y que en este momento es prioridad hacer un cambio terso y después establecer temas que aún no se han convertido en acciones.

Hechos

Para quienes dicen que no está pasando nada todavía, la realidad es que el nuevo gobierno, a través de Luis Videgaray, sí ha mandado un mensaje mucho más que claro sobre el perfil de los funcionarios.

Salvo casos como los de Jacques Rogozinski, Carlos Treviño y Enrique de la Madrid, el resto de los funcionarios en la banca de desarrollo, considerada como prioridad por el nuevo gobierno, y las áreas afines son mucho más conocidos por su carrera política que por ser técnicos financieros.

Hay quienes dicen que esta característica les daría una condición más sensible (cualquier cosa que eso signifique) sobre las necesidades de crédito de personas y microempresas. Otros dicen que esa misma característica les hace menos sensibles a los problemas derivados del riesgo de crédito.

Hay principios que no deben perderse, entre los que destacan que el crédito, incluso el otorgado por la banca de desarrollo debe ser cobrado.

No puede usarse, nuevamente, a este sector como un canal para la entrega de subsidios. Este esquema ha funcionado mal en el pasado no tan lejano y sería inaceptable que la historia se repitiera.

Perfiles

Hay otros que son mucho más famosos por sus carreras políticas.

Ahí están por ejemplo Alfredo del Mazo, director de Banobras, quien es mucho más conocido por haber sido presidente municipal de Huixquilucan que por su paso como secretario de Turismo del Estado de México. Por ahí tuvo alguna experiencia trabajando como empleado de Banco Azteca.

Jesús Alberto Cano, director de Sociedad Hipotecaria Federal, es mucho más conocido por haber presidido la Liga de Economistas Revolucionarios que por algunos cargos que ha desempeñado en el gobierno.

De Jorge Estefan Chidiac, director de Bansefi, sólo puede hablarse de su carrera política y de haber participado en la prehistoria como funcionario del hace mucho extinto Banco Mexicano Somex.

Ayer comentábamos sobre el perfil de Alejandro Murat, director del Infonavit, quien tiene como su principal característica haberse encargado de los temas de vivienda en el Infonavit.

Es importante establecer que este hombre ya comenzó a realizar una muy fuerte crítica y revisión de lo hecho en el periodo anterior, lo cual podría implicar un cambio de rumbo en este instituto tripartita. Quizá se trata de una pésima idea.

Murat, en sus dichos, deja claro que su visión del Infonavit debe ser un organismo de reordenación territorial y otorgamiento de vivienda, y no un organismo financiero en el que hay representación del gobierno, empresarios y trabajadores.

El reordenamiento territorial no puede o no debe corresponder a una empresa de carácter financiero integrada por los trabajadores, sino a los tres órdenes de gobierno.

Algo similar sucede con Canek Vázquez, director del Infonacot, a quien muchos señalan que no cumple con el perfil de contar con cinco años de experiencia en un cargo relevante del sector financiero.

Es claro que la visión del Fovissste, dirigido por José Reyes Baeza, será política. El ex gobernador de Chihuahua simplemente no tiene experiencia en la administración de una entidad destinada a dar vivienda a trabajadores.

Familia

Y que no se dan los rompimientos. Ayer se realizó la reunión del Consejo de Administración de Grupo Industrial Maseca, en la cual no únicamente se confirmó el adelanto de esta columna en el sentido de que todos los herederos de don Roberto González Barrera se unieron no sólo para ejercer su derecho al tanto y comprar las acciones de la empresa que estaban en propiedad de AMD sino, además, lograr un equilibrio en el consejo, pues todos los herederos tienen un lugar en el máximo órgano de la sociedad. No es casual que Juan González Moreno haya sido nombrado presidente del Consejo de Administración y se haya creado la vicepresidencia del consejo, en manos de Carlos Hank González.

Sobre este nuevo cargo es muy relevante destacar que Interacciones ha sido un factor de unidad y coordinación financiera durante este lapso, lo que permite prever estabilidad financiera en el futuro.

Equivocación

Resulta una equivocación creer que subiendo el precio de los refrescos mediante la aplicación de un IEPS disminuirán la obesidad y diabetes en el país. Los impuestos sirven para recaudar.

Lo recaudado se puede utilizar para hacer programas de prevención y atención a las personas.

Difícilmente disminuirá el consumo de refrescos considerando que, desgraciadamente, se trata de una de las principales fuentes de calorías para los que menos tienen; una bebida que en muchas zonas del país garantiza potabilidad, no así el agua que se consume en las redes públicas.

Suena muy atractivo creer que por la vía de los impuestos se corregirá un problema; tristemente se trata de una ilusión.