Hoy será el lanzamiento del nuevo satélite mexicano

CIUDAD DE MÉXICO, 20 de diciembre.- México lanza hoy al espacio el satélite Bicentenario, el primero de los tres que conformarán su nueva constelación en el Sistema Mexsat, y que partirá hacia su órbita a bordo del cohete Ariannespace, en la Guyana Francesa.

Será la empresa paraestatal Telecomunicaciones de México, dependiente de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) la encargada de operar el nuevo sistema, y entre las dependencias que utilizarán los servicios del Mexsat se encuentran la Secretaría de Marina, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Seguridad Pública, la Procuraduría General de la República (PGR) y el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN)

El costo total del proyecto se ha estimado en casi 18 mil millones de pesos y está conformado por los satélites: Bicentenario (o Mexsat 3, para servicios fijos), Centenario (Mexsat 1, para servicios móviles en la banda L) y Morelos 3 (ó Mexsat 2, para servicios móviles en la banda L), así como por dos centros de control terrestres en Iztapalapa, Ciudad de México y en Hermosillo, Sonora.

En pareja

Los satélites Centenario y Morelos 3 operarán en la banda L y su objetivo es garantizar las comunicaciones del sistema mexicano de seguridad nacional.

En un principio se había diseñado un solo artefacto, pero las instituciones de seguridad consideraron conveniente que se tratara de dos para servicios móviles con el propósito de que se contara con uno de respaldo.

El lanzamiento del satélite Centenario ha sido contratado con la empresa ILS International Launch Services Inc. y se prevé que ocurra a finales de 2013, desde el Cosmódromo de Baikonour en la República de Kazajistán.

El costo estimado de los tres artefactos es de mil 31 millones de dólares; colocar en el espacio al Bicentenario y al Centenario costará 191 millones de dólares.

A principios del 2012, la SCT otorgó, mediante asignación directa, a la empresa Boeing Satellite Systems, la adquisición de los tres arfectatos.

Las posiciones orbitales que ocuparán los nuevos artefactos (Mexsat 1, Mexsat 2 y Mexsat 3) serán exactamente las mismas en las que actualmente se encuentra la constelación de  Satélites Mexicanos (Satmex): la 113° Oeste, en la que está colocado el Satmex 6, que fue lanzado al espacio el 27 de mayo de 2006); la 114.9° en la que reposa el Solidaridad 2 (que en breve deberá ser sacado de operación tras presentan fallas desde hace varios años) y que será suplido por el Satmex 7; y la 114.9° Oeste en la que opera el Satmex 5, lanzado el 5 de mayo de 2008, cuya vida útil vence el 5 de octubre de 2013.

Nueva etapa

Para el ex comisionado de la Comisión Federal de Telecomunicaciones, Gerardo González Abarca, aún existen dudas respecto si el Mexsat tendrá capacidad excedente para ser comercializada y, de ser así, podría ser un importante contrapeso para que se reduzcan los precios por el uso de los transpondedores, que en México son muy altos.

México se incorporó a la tendencia mundial en el aprovechamiento de la tecnología satelital en la década de 1960 con la renta del satélite PS3, de la Nasa, para difundir los juegos olímpicos de 1968, aunque fue hasta 1982 que el gobierno mexicano adquirió su primer paquete de satélites propios, el Sistema Morelos (que dio origen a Satélites Mexicanos, Satmex, como empresa paraestatal) que fue renovado por los artefactos del sistema Solidaridad, del que todavía permanece en órbita el Solidaridad 2 y, posteriormente, con la privatización, por el sistema Satmex.

La privatización de Satmex nació con problemas. Las estimaciones indican que en 1997, año en que inició el proceso, la firma Principia y sus socios apostaron por Satmex con 60 por ciento de sobreprecio sobre la base de referencia y 40 por ciento por arriba del precio de mercado. Es decir pagaron 917 millones de dólares, 417 millones por los activos y 500 millones por las concesiones.

En junio del 2005, Satmex solicitó formalmente y por voluntad propia acogerse a un proceso de Concurso Mercantil, luego de un primer largo y fallido periodo de negociación con sus acreedores para reestructurar un pasivo de 800 millones de dólares.

Luego de tal Concurso Mercantil Satmex logró que su deuda se redujera en alrededor de la mitad, casi 400 millones de dólares. Lo cierto es que desde 2002, Satmex ya había entrado en una fase clave de reestructura financiera, e incluso fue cuando comenzó a solicitar nuevos créditos por 260 millones de dólares a Cofase, de Francia y a Bancomext.

Impulso

Tales circunstancias propiciaron que desde 2007 el gobierno mexicano planteara la necesidad de contar, nuevamente, con un sistema satelital propio ante la necesidad de proteger las tres órbitas satelitales y, sobre todo, garantizar las comunicaciones de seguridad nacional del país, ya  que en todo momento, como organismo público y como empresa privada, han estado en manos Satmex.

De esta forma, en noviembre pasado se inauguró el centro de control de Iztapalapa, el cual, junto con la central de Hermosillo, se ha estimado que tendrán un costo total de 22 millones de dólares.

Con tales satélites se espera poder llevar servicios de telecomunicaciones a 70 mil puntos de difícil acceso por sus condiciones orográficas y geográficas, en beneficio de poblaciones de menos de 500 habitantes.