José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

11 Ene, 2013

Rescate a estados: injusto, que paguen responsables

La política del actual gobierno es la de no rescatar a los estados y municipios sobreendeudados o en quiebra. Vale decirlo: en los rescates, unos ganan y otros pierden.

Ganadores y perdedores

Aquí ganarían los gobernadores o presidentes municipales que endeudaron sus localidades. Ganarían quienes fueron irresponsables y endeudaron el futuro de su población: Desde Coahuila hasta Jalisco, desde municipios de Chiapas hasta Acapulco, pues aunque hubieran gastado de más con buena intención, alguien debe pagar la deuda. Y siempre la paga la población.

Los perdedores serían quienes se portaron bien. En un rescate quienes fueron prudentes tendrían que pagar los platos rotos. Sería una pésima señal que los costos los cargaran quienes tuvieron finanzas equilibradas y cuidaron sus niveles de deuda. Desde luego, no es justo.

Hacienda: No habrá rescate

De igual manera han salido los presidentes municipales de Chiapas, el alcalde de Acapulco, así como autoridades de Cuernavaca o del estado de Jalisco. Todos bajo la misma consigna: rescate. El secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dejó en claro que no habrá tal rescate, más bien una iniciativa que transparente los gastos de las presidencias municipales.

Imco: Transparentar nómina de municipios

Al respecto vale la pena escuchar la opinión del Imco, el Instituto Mexicano para la Competitividad, que dirige Juan Pardinas, pues ha estudiado el tema y sin problema lanza una propuesta: transparentar el gasto en los municipios, sobre todo el de nómina y el nivel salarial.

¿Cuántas sospechas hay de que los municipios o gobiernos estatales tienen en nómina hasta al perico?

Reelección de presidentes municipales

Puede ir más allá: pensar en la necesaria reelección de los presidentes municipales, quienes hoy en día no tienen aliciente alguno para cobrar el predial, que podría ser parte de la solución en la carencia de ingresos. Los presidentes municipales duran en su cargo sólo tres años, pero si hubiera la posibilidad de reelección se deberán más a sus electores que a sus partidos políticos.

CEESP: Hipotecan participaciones

Y claro que los deudores hipotecan el futuro de la población local.

Luis Foncerrada, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado, comentaba que algunos gobernadores llevan su deuda al extremo de garantizarla con participaciones futuras que le lleguen al Estado y desde luego la población va a sufrir las menores participaciones. O también está el tema de las tenencias vehiculares, que las ponen de garantía futura.

Deudas estatales no son riesgo sistémico

Hay que decirlo: con toda la tragedia vivida por algunos estados o municipios, la deuda no representa un riesgo sistémico.

Adolfo Albo, economista en jefe de Bancomer, comentaba que la deuda estatal cerró 2012 en alrededor de 3% del PIB, lo cual no pinta para las finanzas públicas del país.

No hay un problema macroeconómico o de finanzas federales por las deudas estatales, pero si se iniciara el camino de salvamentos estatales y municipales, la deuda sí crecería y el mensaje sería fatal: pórtate con dispendio, gasta más de lo que tienes, hipoteca participaciones futuras y tenencias, al fin el gobierno federal te salvará. Esto es lo que debe evitarse.

Telefónica, firme en México, no se liquida

Algo sucedió en el debate entre la diputada Purificación Carpinteyro y el presidente de la Cofetel, Mony de Swaan. Su debate dio un giro inesperado: la diputada, de repente, habló de un rumor sobre la liquidación de Telefónica en México.

El rumor no sabemos de dónde salió, pero es totalmente falso.

Telefónica Movistar está en México desde 2004. Ha invertido 13 mil millones de dólares, según relata Juan Abellán, su director general.

En México es presidida por Francisco Gil Díaz y ahora van por la Cuarta Generación y servicios de valor agregado.

Es cierto: A Telefónica le molestó la baja de las tarifas de interconexión e incluso desde España interpuso un arbitraje por más de mil millones de dólares en contra de las autoridades mexicanas. Pero de que se queda, se queda. Y de que mantienen sus planes de inversión en México, ni lo dude.

Abellán ha recordado que están invirtiendo a ritmos de mil millones de dólares anuales en México, precisamente para mejorar su red y buscar ganar mercado. Telefónica, lejos de irse de México, se queda y quiere ganar mercado en nuestro país.