Maricarmen Cortés

Desde el piso de remates

Maricarmen Cortés

21 Ene, 2013

Fibra UNO confía en éxito de tercera colocación

Sin lugar a dudas Fibra UNO es un caso de éxito. Fue la primera Fibra que se colocó en México después de un muy complejo proceso que —básicamente por cuestiones fiscales— retrasó durante varios años la emisión de Fibras, que son un instrumento para todos aquellos que desean invertir en bienes raíces, pero sin enfrascarse en los problemas que implica tratar con inquilinos directamente.

La primera colocación de Fibra UNO se realizó en marzo de 2010 por 300 millones de dólares, que fue realmente para probar la respuesta del mercado; después, en marzo de 2011 se realizó la segunda emisión, ya por un monto de 700 millones de dólares y el 29 de enero se realizará la tercera por mil 500 millones de dólares.

Gonzalo Robina, director general de adjunto de Fibra UNO, se muestra muy confiado del éxito de esta nueva oferta por la respuesta que han tenido en el road show que ya inició, porque los rendimientos en 2012 fueron de 63% anualizado y porque ya hay un mayor conocimiento de las ventajas que representan las Fibras.

En sólo dos años, Fibra UNO pasó de 16 a 310 inmuebles, incluida la Torre Mayor en la Ciudad de México, porque en octubre pasado se convirtieron en el principal accionista. Tienen presencia en 29 estados de la República, principalmente en el DF, Quintana Roo y Jalisco, y su portafolio está dividido: 30% en bienes industriales, 40% comerciales y 20% de oficinas.

En cuanto a las Fibras, además de la Fibra UNO, el año pasado se colocaron la de Macquarie y Fibra Hotel, pero la expectativa es que en este 2013 se realicen por lo menos otras cuatro o cinco nuevas ofertas. Uno de los atractivos es, desde luego, el rendimiento, considerando que la expectativa ya confirmada por el Banco de México es hacia una baja en las tasas de interés de los Cetes.

Casa Saba sale de Brasil

Manuel Saba, presidente de Casa Saba, no se sentía cómodo con su inversión en Brasil, un mercado con un gran potencial, pero de muy difícil acceso para empresarios mexicanos.

No extraña por lo tanto que decidiera finalmente salir de Brasil. El viernes, Casa Saba anunció que su subsidiaria Farmacias Ahumada llegó a un acuerdo con Profarma Distribuidora de Productos Farmacéuticos para la venta de todas sus operaciones de farmacias en Brasil, la empresa CSB Drogarias y las marcas Drogasmil y Farmalife.

La operación se realizará por 87 millones de reales brasileños o 42 millones de dólares aproximadamente.

La emisora se concentrará ahora en sus operaciones en México y en Chile, que se mantiene como un mercado estratégico.

Balance: Juan José Guerra, Ruiz Esparza, David López

En el balance semanal, la Naranja Dulce es para Juan José Guerra, titular de la Semarnat, porque aceptó modificar la NOM 163 y homologarla —como pedía el sector privado— a las normas de Estados Unidos.

Desde su nombramiento, Guerra inició el diálogo con las empresas que pedían que las normas mexicanas no fueran más estrictas que las de Estados Unidos.

Lo que se garantizará es que México no se convierta en receptor de autos chatarra porque no se importará ningún vehículo que, por razones ambientales, no se pueda comercializar en Estados Unidos y Canadá.

El primer Limón Agrio es para el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, por su tardía y pésima respuesta ante los problemas que presentan los aviones Dreamliner de Boeing, que siguen sin reanudar vuelos en Estados Unidos, Japón y Europa.

El nuevo avión de la Presidencia de la República, que estará disponible en 2014, es un Dreamliner contratado el año pasado vía arrendamiento bajo las mismas condiciones que el pedido de 19 aviones de Aeroméxico.

La SCT informó el viernes —cuatro días después de los problemas del 787— que esperará a conocer el dictamen de Boeing y su validación por parte de la FAA y que la prioridad del gobierno mexicano es garantizar la seguridad del titular del Ejecutivo.

La prioridad del gobierno debe ser garantizar la seguridad no sólo del Presidente, sino de todos los mexicanos y la SCT debería informar si, bajo los términos del contrato con Boeing, hay o no sanciones al cancelar un pedido y para la empresa si, como en este caso, se registran problemas con las aeronaves.

El segundo limón agrio es para David López, coordinador de Comunicación Social de la Presidencia, por la pifia de la semana: los errores en la divulgación de los salarios de los secretarios de Estado, en la que unos presentaron salarios netos y otros los brutos, generando una gran confusión.

El problema de origen es que la aún no extinta Función Pública es un caos, pero alguien en Comunicación Social debió haber revisado la información antes de que se hiciera pública.