México ve a Petrobras para reforma

El presidente Enrique Peña Nieto aprovechó la reunión cumbre CELAC-Unión Europea para confirmar que ve a Petrobras como una empresa modelo y, desde luego, una compañía con la cual Pemex puede formar una alianza internacional. Sin duda la reforma energética de México va a lanzarse para el siguiente periodo ordinario del Congreso en febrero y, de que se tomará en cuenta el modelo de Petrobras, ni lo dude.

Modelo de Brasil: IP y alianza con Pemex

Peña acaba de reunirse con Dilma Rousseff, presidenta de Brasil, y allí mantuvo una constante: el interés de México por seguir los pasos de Petrobras de ser una empresa perteneciente al Estado, pero que también le permite a la iniciativa privada participar más activamente (el sector privado puede quedarse con 30% de la explotación de petróleo si encuentra petróleo).

No sólo se queda con el modelo de Petrobras, sino también fue directo: crear una alianza con la petrolera de Brasil, que hoy tiene el récord de haber logrado la colocación en bolsa más grande del planeta, tras haber levantado 70 mil millones  de dólares.

Adiós ideología

También fue Luis Videgaray quien desde el Foro Económico de Davos, en Suiza, habló sobre la reforma energética.

El secretario de Hacienda tocó un tema clave, sobre todo para su partido, el PRI, y el partido de izquierda, el PRD: dejar atrás atavismos ideológicos sobre Pemex y más bien ver a Petróleos Mexicanos como una compañía que necesita liberarse del yugo fiscal y ser mucho más eficiente.

Desde luego, con Pemex existe toda una historia del nacionalismo moderno. Pero debemos reconocer que hoy en día podríamos utilizar los recursos del petróleo para el desarrollo y no para tapar el boquete fiscal de 40% de los ingresos públicos.

Pemex, beneficiado por mercados

Mientras llega la reforma energética, Pemex aprovecha los mercados. Emilio Lozoya, director de la paraestatal, y su director de finanzas, Mario Beauregard, vieron la buena colocación de los bonos hacendarios y de inmediato salieron al mercado.

Realizaron la colocación más barata de Pemex en toda su historia: bonos por 2.1 mil millones de dólares con una tasa de rendimiento de 3.53 por ciento.

Tan sólo un año previo la misma colocación se hizo, pero ofreciendo un premio mucho mayor a los inversionistas de cinco por ciento.

Pemex todavía podrá seguir colocando en los mercados. Tiene un techo de endeudamiento de 9.8 millones de dólares; 50% lo harán en mercados internacionales, 30% en mercado nacional.

Pero su participación en mercado no le resta la necesidad de mejorar su funcionamiento y de liberarse de seguir siendo la fondeadora fiscal, y más bien dar el paso de servir para el desarrollo económico.

Sorprende superávit comercial

México dejó de tener déficit comercial y por primera vez en años, tiene superávit con el exterior. El superávit en balanza comercial fue de 962 millones de dólares. Incluso Banamex recuerda que es el mayor saldo positivo obtenido en 16 años.

Cualquiera diría que es un dato bueno: exportamos más de lo que importamos. Vendemos más de lo que compramos.

Pero no necesariamente es así.

México tiene un déficit comercial cuando crece más: importa bienes de capital (inversión en maquinaria y equipo) necesarios para la inversión productiva. Pero también realiza importaciones de consumo.

Si dejamos de realizar importaciones es un foco amarillo que avisa que la economía mexicana puede empezar a desacelerarse.

Aunque también debemos decir que exportamos más. Quiere decir que las ventas manufactureras, con todo y todo, van aumentando.

El problema sería el de hace años: el sector exportador no está jalando a toda la economía y el mercado interno puede seguir siendo débil.

Las dudas siguen sobre Dragon Mart

Por más que han salido los inversionistas regiomontanos de Dragon Mart a decir que traerán importaciones legales, y nada de migración de China, los empresarios mexicanos no les creen.

Basta ver lo que dice el CEESP, el brazo investigador del Consejo Coordinador Empresarial, al considerar que México es una economía abierta y debe competir con todos, pero con base en la legalidad, en donde ellos sienten que Dragon Mart, así como está planteado, podría traer piratería-imitación ilegal, productos subsidiados (dumping) y hasta migración ilegal. Siguen las dudas sobre el proyecto de más de 550 hectáreas que se construiría a 20 kilómetros de Cancún.