Darío Celis

Tiempo de negocios

Darío Celis

19 Mar, 2013

Casi 40 mil mdp en pérdidas para IP y CFE en 2012 por ausencia de infraestructura para gas

Apenas le decía la semana pasada que las alertas críticas por el desabasto de gas en el país le costaron a la industria casi 22 mil millones de pesos. A su vez a la CFE, que dirige Francisco Rojas, otros 19 mil millones derivado de tener que modificar la matriz de combustibles.

Y es que ésta se tuvo que ajustar con base a la disponibilidad. Otro factor que pegó en contra fue la falta de lluvia, que aunado a la ausencia de gas llevó al organismo a utilizar más combustóleo, mucho más oneroso y dañino para el medio ambiente.

Pero al final de cuentas, el alto costo que México está pagando es consecuencia de una total omisión del gobierno de Felipe Calderón, que en seis años fue incapaz de construir un solo kilómetro de gasoductos que hoy evitarían este complejo escenario.

Además de adelantarse con oportunidad a esta crisis, nos pudo permitir como país acceder en tiempo y forma a un gas natural de a tres o 3.8 dólares el millón de BTUs, como el que posee Estados Unidos, contra uno de 15 o 20 dólares, que es el precio de referencia en Europa y Asia.

El handicap es que históricamente no tenemos cómo importarlo, algo que se pudo empezar a prever con Vicente Fox. El caso se vuelve todavía más grave, si considera que Calderón no pudo decirse extraño a los requerimientos que en materia de infraestructura necesitaba México.

Fue secretario de Energía antes de saltar a la candidatura presidencial por Acción Nacional. Desde esa posición conoció perfectamente el reto y riesgo que se le avecinaba al país con la potencial escasez del energético y la falta de gasoductos.

Por su escritorio como titular del ramo pasaron, por ejemplo, proyectos como el multimillonario y estratégico de Los Ramones, que a marchas forzadas y en la total opacidad intentó sacar el último mes de su mandato, es decir, apenas en noviembre pasado.

Quizás en descargo de Calderón sea válido decir que ya como Presidente tema prioritario se volvió la inseguridad y el combate frontal al narcotráfico y las bandas del crimen organizado que lo alimentan. Sin embargo, no puede decirse lo mismo de sus colaboradores.

Particularmente llama la atención la inacción de Jordy Herrera, personaje de su círculo íntimo. Herrera se coló a su vez en ese grupo por su amistad con Juan Camilo Mouriño. Juntos transitaron por Banobras, la Secretaría de Energía, el Congreso y la campaña presidencial.

El pecado de Herrera fue ser omiso en un tema de seguridad nacional, como lo es en términos económicos y de costo de oportunidad para la competitividad del país el desabasto de gas y que significó solamente el año pasado esos casi 40 mil millones de pesos.

Cuando Calderón llegó en 2006 a la Presidencia nombró a Herrera subsecretario de Planeación Energética y Desarrollo Tecnológico de la Secretaría de Energía. Posteriormente lo hizo director de Pemex Gas y
Petroquímica Básica.

Su trabajo debió ser analizar e implementar la infraestructura de redes que Pemex necesitaba para garantizar el transporte en calidad y precio del gas natural, escasez que ya empezaba a desbordarse en las principales regiones industriales del país.

Específicamente esa debió ser su encomienda en el tiempo que estuvo en Pemex (del 4 de enero de 2010 al 9 de septiembre de 2011). Un año nueve meses que vaya usted a saber a qué los dedicó en Pemex, y que se suman al otro año que fue secretario de Energía.

¿Quién pagará los platos rotos de esa criminal negligencia? Los contribuyentes y consumidores ya absorbieron el doble golpe.

Pemex: CKDs

En más temas de energía, se estima que la reforma energética que prepara el gobierno de Enrique Peña Nieto será enviada al Congreso en el tercer trimestre del año.

Uno de sus puntos torales será permitir el establecimiento de joint-ventures en la exploración de aguas profundas, un rubro que requiere tecnología e inversiones intensivas en capital, algo que difícilmente se logrará con un presupuesto tan acotado.

Y es que la paraestatal a cargo de Emilio Lozoya cuenta con 28 mil millones de dólares y desarrollos de esa envergadura cuestan alrededor de cinco mil millones cada uno. Le adelanto que esta administración alentará esquemas de asociación 50-50 con multinacionales para compartir riesgos y ofrecer reales incentivos a los privados. Es por eso que en esa tesitura el área de Finanzas a cargo de Mario Beauregard ya trabaja en esquemas de asociación. Uno va a ser los famosos CKDs de infraestructura petrolera.

La idea es armar paquetes de servicios que se licitarán entre potenciales inversionistas y que en paralelo podrán fondearse vía la Bolsa Mexicana de Valores, lo cual permitirá levantar recursos simultáneamente de afores, fondos de pensión y público en general. Lo que Pemex podrá contratar en principio serán plataformas, perforadoras y buques tanque. La idea es que los CKDs estén listos este mismo año.

Vitro engaña

Por más que Vitro pretenda aparentar que logró un gran triunfo que obligó a doblegar a los fondos opuestos a su reestructuración financiera, le platiqué hace unos días que el hecho es que resultó todo lo contrario porque vía Fintech Advisory, de David Martínez, compró los bonos de los acreedores disidentes.

Y este vehículo domiciliado en Nueva York y Londres adquirió el papel a una tercera parte más cara, pues mientras el grupo de Adrián Sada y que dirige Hugo Lara ofreció en su plan concursal pagar a 64 centavos de dólar y hasta 2019, a Elliott Management, Knighthead Fund, Aurelius, Beach Point Capital, DK Partners y Contrarian Capital, les liquidará inmediatamente a 85 centavos, que implica una recuperación de prácticamente 100% del capital.

Además están los gastos y costas legales de su contraparte que se comprometieron a asumir. En este rubro hablamos de tan sólo otros 56 millones de dólares a las firmas Dechert, que desplegó la estrategia jurídica en Estados Unidos, y a su par mexicana, Guerra Abogados, de Jaime Guerra.

Por todo lo anterior no es creíble que Vitro siga alardeando y diciendo a todo el que lo quiera oír que terminó pagando lo mismo a disidentes que a acreedores a modo. Y mucho menos que ganó esta controversia.

Coto a estados

La Secretaría de Economía, que comanda Ildefonso Guajardo, sigue de cerca lo que algunas entidades hacen para atraer inversiones del sector automotriz y no descarta ordenar su participación.

Y es que detectó que en aras de lograr la instalación de una u otra armadora los gobernadores se están excediendo en los apoyos que ofrecen, lo que puede agravar sus situaciones financieras.

El caso más reciente fue Puebla, que gobierna Rafael Moreno Valle. Si bien no está en el foco de los estados más vulnerables, la entidad se tiró al piso en pos de atraer al grupo que preside Martin Winterkorn. Los apoyos que dio fueron desde la construcción de infraestructura hasta venta de terrenos a precio de ganga, pasando por exenciones fiscales que tarde o temprano mermarán sus finanzas públicas.

Lo que se busca es que las compañías definan la localidad, y que no sea al revés y a costa de beneficios que terminen afectando a la población.

El ordenamiento se dará de cara a los planes que tienen BMW, Mercedes Benz y Tata, próximos a instalarse en el país.