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A pesar de que la economía mexicana se desaceleró durante el primer trimestre del año, creciendo su PIB sólo 0.8%, su menor tasa de expansión desde que comenzó a crecer en 2010, y la actividad industrial cayó 1.5 por ciento interanual en el mismo lapso, la Inversión Extranjera Directa (IED) aumentó entre enero y marzo de este año 14 por ciento, al ubicarse en cuatro mil 988 millones de dólares, la cifra más alta para un primer trimestre desde 2007.
Los indicadores de la Secretaría de Economía revelan que la mayor parte de esta IED, tres mil 68 millones de dólares, corresponde a la reinversión de utilidades, lo que podría ser un indicativo de que los inversionistas están aprovechando la “época de vacas flacas” para afianzar sus inversiones en una clara apuesta por una reactivación de la economía mexicana, en momentos en que la mayor parte de países industrializados se desaceleran o están al borde de la recesión.
Para comparar el impacto de esta alza en esta inversión, vale recordar el primer trimestre de 2009, cuando se resentía en el país lo más profundo de la crisis, y cuando el PIB y la producción industrial se desplomaron 8.2 y 9.9%, respectivamente. La IED también se vino abajo casi 40% respecto a un año atrás.
Jonathan Heath, economista independiente y autor del libro, Lo que indican los indicadores, recordó que en 2009, cuando se desplomó la producción industrial, se registró un monto aceptable de IED y sobre todo de reinversión de utilidades.
En todo 2009 se registró una IED de ocho mil 380 millones de dólares, y más de la mitad, cuatro mil 313 millones, correspondieron a reinversiones de utilidades. En ese mismo año la industria se desplomó 7.3 por ciento y la economía en su conjunto registró una de las peores caídas de su historia al retroceder 6.5 por ciento.
Lourdes Rocha, economista de Banamex, afirmó en el reporte Económico Diario de la Institución que el grupo financiero prevé que la IED sume en total en 2013 cerca de 38 mil millones de dólares, un panorama distinto.
Deborah Riner, economista principal de la American Chamber/México, explicó que este monto récord se verá influenciado por la compra de Modelo, por parte de la empresa belga Anheuser-Busch InBev, que es de 20 mil 102 millones de dólares.
Industria, la ganadora
Miguel Barreda, director de comercialización de Lintel, empresa desarrolladora de parques industriales, dijo a Excélsior que a pesar de la desaceleración reciente de la economía, la IED nueva y la reinversión de utilidades hacia México no se está deteniendo, por lo que su empresa tiene proyectos en marcha para la construcción de naves y parques industriales para inversión extranjera por mil 500 mdd.
“Hay empresas de todos los sectores, pero lo que hemos visto es que casi ciento por ciento de la inversión que llega ha sido de autopartes”, señaló.
Barreda explicó que el Tsunami benefició a México, ya que los japoneses se dieron cuenta de que tenían muy concentrada su producción en su país, por lo que decidieron trasladar operaciones a México en Guanajuato, San Luis Potosí y Aguascalientes, entre otros estados.
Las automotrices forman parte de las llamadas macroempresas, que de acuerdo con un reporte del INEGI, dicho estrato de firmas en 2010 registró un saldo comercial superavitario por un valor de 18 mil millones de dólares, mientras que las pymes y grandes presentan en conjunto un déficit de siete mil millones de dólares.
El 68% de las unidades económicas con transacciones comerciales internacionales son pequeñas y medianas, y representan 9% del valor del comercio exterior de las empresas manufactureras. Por su parte, 15% son unidades grandes y 17% son macroempresas y alcanzan 9% y 82% del valor ya citado.
