David Páramo

Análisis superior

David Páramo

5 Jun, 2013

Ningún aprendizaje

El rotundo fracaso que resultó la prueba piloto para el apagón analógico en Tijuana podría dejar algunas lecciones para las siguientes etapas y lograr cumplir la meta, que pronto estará en la Constitución, de dar a todos los mexicanos televisión digital abierta a partir del último día de 2015.

Sin embargo, parecería que el presidente de la Cofetel está empeñado, como ha sido su tradición, en creer que todo el mundo está equivocado menos él y lanzar, a través de sus amigos, cualquier cantidad de bolas de humo.

Si se pone algo de atención a las declaraciones públicas de este funcionario parecería que la prueba piloto salió mal por una mezcla de conspiradores entre los que están las empresas de televisión abierta; las secretarías de Comunicaciones, Hacienda y Economía; los comisionados de la Cofetel; los gobiernos de Baja California y Tijuana, así como la opinión pública.

A Televisa y Azteca les acusa, mucho más a través de sus amigos, de estar atrás de la inconformidad popular en Tijuana y de las críticas al apagón. Narran una historia increíble según la cual la oposición tiene que ver con la intención de retener la banda de 700 MHz y evitar la licitación de dos cadenas de televisión.

De la SCT dice, por más que lo trate de negar con sofismas semánticos, los “instruyó” para que dieran marcha atrás con el apagón analógico. Cuando se trató de una petición hecha no sólo por esta dependencia sino también por los órganos locales y federales electorales.

A la Secretaría de Hacienda la culpa de no dar los fondos para comprar los decodificadores para el apagón analógico y dar presupuesto para una mayor campaña de difusión. De paso, también reparte la culpa entre los legisladores por no considerar en el presupuesto una partida.

Una y otra vez ha dicho que el éxito de las siguientes pruebas, programas en noviembre, tienen que ver con la entrega de fondos, así como en el cumplimiento del apagón analógico.

A la Secretaría de Economía la acusa de no tener lista la Norma Oficial Mexicana que impediría la venta de televisiones que sólo reciben señales analógicas.

A los comisionados de la Cofetel los culpa de haber obstaculizado su labor cuando lo que hicieron fue hacer advertencias sobre la proximidad de las elecciones, la opacidad de la metodología, la incapacidad de la empresa Teletec, así como una serie de problemas de transparencia que se han registrado durante el proceso.

Uno de los temas que más se discutieron fue la metodología para calcular la penetración y las formas de medir. Se puede usar una jerga tecnocrática y referirse a polígonos o zonas cuando en realidad se trata de personas que tienen derecho a la televisión abierta.

Valentía

En ese sentido, será muy relevante la comparecencia que tendrán el presidente de la Cofetel y los tres comisionados en el Senado de la República, en el que se esperaría que José Luis Peralta, Alexis Milo y Gonzalo Martínez Pous hicieran públicas las objeciones que han presentado en el pleno durante muchos plenos, es decir, que vayan más allá de un simple deslinde de responsabilidades.

Es necesario que estos comisionados tomen una actitud valiente en la que abiertamente digan cuáles fueron los problemas en la implementación de esta política pública y las objeciones que fueron ignoradas. Bastaría que se hicieran públicas las grabaciones de los plenos en los cuales se toca temas de TDT. Son verdaderamente reveladoras.

Las “recomendaciones” del titular de la Cofetel para otras pruebas tienen que ver con estos temas y jamás cuestiona qué hicieron mal él y los órganos que están bajo su cargo.

Cuando alguna persona cree que todos están en su contra o equivocados lo más probable es que el equivocado sea él.

Lecciones

En este sentido, algunas lecciones que parecería que no se han aprendido son:

Primero. La cobertura tiene que estar cerca del ciento por ciento de las localidades, porque no se puede eliminar el derecho a las personas a tener acceso a la televisión abierta.

Segundo. Se tienen que cambiar las bases de medición sobre la forma en que se calcula la penetración, puesto que los datos del Coneval no muestran la mejor imagen de las necesidades de población.

Tercero. Se tienen que establecer normas de transparencia en cuanto a las empresas que contrate la Cofetel o próximamente el IFT. Se tienen que aumentar los requerimentos de capacidad y experiencia.

Cuarto. Se tienen que involucrar necesariamente dependencias como las secretarías de Desarrollo Social, Hacienda y Economía.

Quinto. El Congreso tiene que involucrarse activamente en esta política pública, puesto que es la que debe asignar los fondos suficientes para la transición a la televisión digital.

Si bien no es una lección que sólo se aplique.

Humo

Mony de Swaan está lanzando bolas de humo. Ataca a sus regulados de formas muy diferentes puesto que no sólo critica los estados financieros de algunos, sino que ahora pretende evitar el cumplimiento de una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en detrimento de Telcel.

Como recordará, el 29 la SCJN confirmó en definitiva que Axtel tendría que pagarle a Telcel las tarifas de interconexión correspondientes al periodo 2005-07 por un monto que ronda los mil 500 millones de pesos; sin embargo, en esa empresa se quejan de que el presidente de la Cofetel está tratando de evitar que la compañía de Tomás Milmo cumpla con la resolución judicial de última instancia.

Críticas

Los presidentes de AMDA y AMIA están cometiendo otro error histórico. Simple y sencillamente no creen que el gobierno de Miguel Ángel Mancera vaya a imponer un día sin circular a los vehículos sin importar su año de fabricación o, peor aún, no quieren desgastarse y que sean otros los que den la pelea.

Parece que este gremio aprende poco y mal de las experiencias del pasado. Los gobiernos emanados del PRD en la Ciudad de México no se han distinguido por la racionabilidad económica de muchas de sus medidas y este viraje en la lucha contra la contaminación generará muchos más daños que beneficios.