Fibra Shop, a la expectativa del mercado

Alejandro Reynoso, director de Estructuración de Actinver, es un firme convencido del potencial de las fibras en México, que tuvieron un largo y accidentado parto con Fibra Uno en marzo de 2011, y hoy representan ya el cuarto mercado más grande del mundo con las seis emisiones de fibras que se han realizado en los últimos dos años con un valor de mercado que supera los 120 mil millones de pesos.

Reynoso es también uno de los mayores expertos en fibras en el país porque participó cuando estaba en Protego en la primera fibra, Fibra Uno y ahora en Actinver tiene ya todo listo para la colocación de Fibra Shop, que será la primera del mercado enfocada como su nombre lo indica a centros comerciales dirigidos a clase media y alta desde pequeños con tienda boutique hasta grandes plazas comerciales que están en proceso de transformación como es Kukulcán, en Cancún, remodelada con una tienda de autoservicio: Soriana y con una cadena de cines de Cinépoliis.

Al frente de Fibra Shop está Gabriel Ramírez, quien fuera director del Infonacot el sexenio pasado y se incorporó a Actinver, que preside Héctor Madero.

Aunque Fibra Shop está ya lista para ir a la BMV desde luego la decisión sobre la fecha de colocación dependerá de las condiciones del mercado que desde luego no son muy favorables dado que ayer se registró un jueves negro y el IPC perdió 3.91% para cerrar en un nivel de 37 mil 517 unidades.

La oferta de Fibra Shop, que tiene ocho centros comerciales será por siete mil millones de pesos de los cuales cuatro mil 500 son por los inmuebles que ya compró y dos mil 500 para la adquisición de nuevos inmuebles porque —explica Reynoso— hoy las Fibras manejan en su cartera un promedio de 70% en inmuebles y 30% en cash para su expansión lo que ha generado una expansión del mercado extrabursátil ya que las seis Fibras que operan en México se han convertido en los compradores institucionales.

Las plazas que hoy tiene Fibra Shop son: Kukulcán, en Cancún; Puerto Paraíso, en Cabo San Lucas; La Luciérnaga, en San Miguel Allende; Cibeles, en Irapuato, y cuatro Urban Centers, que son plazas de menor tamaño en Jalapa, Juriquilla y Jurica, en Querétaro; y Condesa, en el Distrito Federal.

En cuanto a los accionistas principales de Fibra Shop son Rafael Marcos Dayan de Grupo Frell; Moisés Ison de Central de Arquitectura, y Grupo Caceba de Salvador Cayón, quien por cierto, enfrentó un litigio que ya resolvió precisamente por la construcción de Plaza Cibeles.

Volaris, otra vez con mal timing

Desde luego no es Fibra Shop la única que está evaluando con lupa las condiciones del mercado antes de decidir si aplazan o no su oferta accionaria. Resulta que antes que Fibra Shop hay varias ofertas accionarias que ya están con un pie en la puerta y hasta la semana pasada, antes de la estrepitosa caída del mercado accionario y cambiario, tenían una gran demanda por el interés que despierta México entre los inversionistas extranjeros.

La primera en la lista es la de Grupo Financiero Inbursa por la venta de la posición accionaria de Caja Madrid que venderá 10% de su tenencia y se quedará con otro 10%. La oferta se espera para el lunes próximo, pero un factor clave será lo que suceda hoy con los mercados ya que la caída se consideró como una sobrerreacción a lo que dijo Bernanke el miércoles pasado y se espera que puedan recuperarse hoy.

Las otras ofertas accionarias que como se dice en el mercado están en el pipe line para colocarse en las próximas dos semanas son las de OHL; OMA; Vesta; Grupo Financiero Banorte y Volaris.

La de Volaris es la única que también se listará en Estados Unidos pero en verdad Pedro Aspe tiene mala suerte porque hace dos años también tenía ya todo listo para colocarse y cancelaron por la caída del mercado.

Corredor Transístmico, ¿ahora sí?

Marcos Theurel, presidente municipal de Coatzacoalcos, Veracruz, está en campaña intensa para convencer al presidente Enrique Peña Nieto y al secretario de Hacienda, Luis Videgaray, de rescatar el proyecto del corredor Transístmico que reuniría a Coatzacoalcos con el Puerto de Salina Cruz, en Oaxaca, lo que implicaría reactivar la línea ferrovaria y acortar en diez días el tiempo que hoy hacen los buques de carga en el Canal de Panamá.

Es un viejo proyecto que se buscó detonar desde el gobierno de Porfirio Díaz, pero que nunca se ha concretado por su elevado costo. Theurel asegura, sin embargo, que ya es rentable y que hay una oportunidad única porque Panamá ha elevado sus costos, por el elevado precio del crudo y de los seguros, porque Nicaragua está negociando con China un nuevo canal y porque sería un detonador de empleo en Oaxaca y Veracruz.