Argentina excluye a Repsol y Pemex

CIUDAD DE MÉXICO.- La española Repsol podría quedar fuera de la zona de Vaca Muerta, al menos en la primera fase de explotación del yacimiento argentino de gas y petróleo no convencionales (shale gas & oil), luego de que la compañía YPF firmara un entendimiento con la estadunidense Chevron, que no tardó en aprovechar la pugna entre las compañías para llegar a invertir.

El acuerdo implica para Chevron un desembolso inicial de mil 240 millones de dólares que, sumados a lo ya invertido por YPF, alcanzan una inversión total de mil 500 millones de dólares para la explotación conjunta de shale gas.

El convenio afecta indirectamente a Petróleos Mexicanos (Pemex), que es dueño de casi diez por ciento de las acciones de Repsol, al no obtener beneficios económicos por la exploración y futura explotación de este campo de gas en Argentina.

YPF, petrolera expropiada por el gobierno de aquel país sudamericano a Repsol, anunció que finalmente había llegado a un acuerdo con los estadunidenses de Chevron para la exploración de dos áreas de este yacimiento, ubicado como uno de los más grandes de su tipo en Latinoamérica.

Para los expertos, este movimiento del gobierno de Argentina deja en claro que no quieren saber más de Repsol, a la que no le han liquidado la expropiación de sus acciones dentro de YPF, proceso en el que Pemex ha fungido como negociador.

Para Miriam Grusntein, analista del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), de haber participado en Vaca Muerta, las acciones de Repsol hubieran tenido un impacto positivo, beneficiando a la petrolera mexicana. Sin embargo, esto no será posible.

“Depende mucho el manejo político de la información. Si se valoran las acciones de Repsol al participar en Vaca Muerta, las acciones de Pemex en la firma tendrían más valor, porque es un proyecto importante”, dijo.

Repsol rechazó convenio

En junio pasado, Repsol recibió una propuesta por parte del gobierno argentino para liquidar el adeudo por la expropiación mediante un convenio por el cual les permitirían a los españoles la participación en Vaca Muerta. Sin embargo, no se concretó.

Inclusive, en ese mismo mes, Carlos Morales Gil, director de Pemex Exploración y Producción, asistió como representante de Pemex al Consejo de Administración de Repsol. Ahí expuso los pros y contras de entrarle a Vaca Muerta. Pemex tampoco pudo confirmar si el acuerdo con YPF seguía vigente.

Excélsior buscó a algún representante de Repsol para comentar al respecto, y al cierre de esta edición la oficina no respondió si la propuesta para explotar Vaca Muerta junto con YPF se mantiene.

Por su parte, personal de Pemex declinó comentar al respecto, y sólo se dijo que la asignación a Chevron es un tema que no les afecta directamente, sino que sería a través de Repsol, de la cual es socio con casi diez por ciento de las acciones, por donde vendría una baja en los recursos que capta por su sociedad.

“Es contradictorio porque el mensaje de Fernández al expropiar las acciones de Repsol en YPF fue casi como anticolonialista. Entonces podría pagarlo caro si deja que entre Chevron a Vaca Muerta, porque ella misma sentó un precedente para que participe Repsol en un campo grande y muy importante”, dijo.

Vaca Muerta es uno de los descubrimientos de hidrocarburos más importantes de Argentina. Fue anunciado en 2010, y el año pasado se dijo que contiene reservas por 22 mil 500 millones de barriles de petróleo crudo equivalentes.

“Es el gran tesoro argentino. Siempre que hay descubrimientos importantes los ánimos políticos se caldean, y con precios de crudo importantes, peor. El primer gesto de expropiación de las acciones de Repsol en YPF es realmente una conducta política y cíclica de los gobiernos, y ahora asociarse con Chevron es una muestra más. La gente piensa que están compartiendo sus recursos con una empresa norteamericana, con las connotaciones que tiene para los latinos”, comentó Grunstein.

La entrada de Chevron a Vaca Muerta ha desatado protestas en Buenos Aires y Neuquén por parte de organizaciones sociales y políticas y de comunidades aborígenes mapuches, tanto por temas de seguridad ambiental como por el mantenimiento de la soberanía argentina sobre los recursos naturales.

El acuerdo fue suscrito en Buenos Aires por el presidente de YPF, Miguel Galuccio, el titular de Chevron, John Watson, y el responsable de la estadunidense en las operaciones de exploración y producción en África y América latina, Ali Moshiri, quienes se han reunido también con la presidenta argentina, Cristina Fernández.

Brufau, el perdedor

Con la asignación de Vaca Muerta a Chevron, Antonio Brufau, presidente de Repsol, perjudicó a su empresa, ya que desde el inicio se negó a la propuesta del gobierno argentino de participar en Vaca Muerta.

En esta propuesta inicial, como Excélsior informó a finales de junio, Pemex tendría una participación de dos por ciento en el proyecto. Sin embargo, Brufau terminó por desecharlo y dejar a sus socios sin ganancias.

Los problemas de la petrolera argentina

La expropiación de YPF ha originado batallas legales por parte de Repsol, quien no ha aceptado los métodos de pago del gobierno argentino.

-La entrada de Chevron en Vaca Muerta ha desatado protestas en Buenos Aires y Neuquén por parte de organizaciones sociales y políticas y de comunidades aborígenes mapuches, tanto por temas de seguridad ambiental como por el mantenimiento de la soberanía argentina sobre los recursos naturales.

- La argentina YPF y Chevron habían suscrito en septiembre de 2012 un memorando de entendimiento sobre Vaca Muerta que provocó una denuncia de la española Repsol en tribunales de España y Estados Unidos. Sin embargo, el convenio al que se llegó ayer muestra que la queja no procedió.

- Desde la expropiación del grueso de sus acciones en YPF, Repsol ha entablado una batalla legal para exigir al gobierno de Cristina Fernández una compensación, y mantiene que tomará medidas legales contra cualquier firma que intente invertir en la petrolera argentina hasta que le resuelvan.

- YPF, bajo control del Estado argentino desde mayo de 2012, ha firmado memorandos de entendimiento con otras empresas del sector, la también estadunidense Dow y la estatal venezolana PDVSA, con vistas a lograr acuerdos de sociedad para explotar otras áreas de Vaca Muerta.