Alicia Salgado

Cuenta corriente

Alicia Salgado

30 Jul, 2013

KPN y AMX: tema de precio

Mire con quién vino a topar, con el amo de la filtración. El CEO de KPN, Eelco Blok, filtró que América Móvil no estaba de acuerdo con el precio al que se había acordado la venta de E-Plus, su filial alemana a Telefónica de César Alierta y ahora pretende hacer creer que la terminación del acuerdo de relación que suscribió el corporativo que preside Daniel Hajj, se debe a que quiere ir por la totalidad del conglomerado telefónico holandés.

Recordemos que cuando entró América Móvil a KPN, en mayo de 2012, al adquirir 4.8%, monto que fue creciendo en sucesivas operaciones hasta alcanzar 29.7% el 28 de junio pasado.

¿Por qué no compra más o va por el control de KPN? Porque su estrategia de inversión es diferente.

Si América Móvil, copresidida por Carlos Slim Domit, adquiere un porcentaje mayor de acciones no aumenta el control sobre la empresa holandesa y, por el contrario, tendría que realizar una oferta pública por 100% al mejor precio y, ello incluiría asumir la deuda de KPN que sigue siendo su principal talón de Aquiles en un mercado como el holandés, donde crece la competencia, tienen gran rezago de inversión, pero no crece el ingreso.

En febrero 20 de este año, AMX anunció la firma de un “convenio de convivencia” (relationship agreement) con la administración de KPN en el que se comprometía a compartir información, explorar áreas de colaboración en los países donde tienen huella, sea en Europa o América en áreas como el roaming, pero el acuerdo se sujetó a exclusiones comunes y AMX podía darlo por terminado anunciando su intención dos meses antes (eso ocurrió ayer), mientras que KPN no puede concluirlo hasta que transcurrieran dos años (esa es una gran diferencia, ¿no cree?).

De hecho, en la buena convivencia, la información que compartían inhibía una reacción de compra hostil (algo que quería asegurar la administración de KPN), pero siempre que lo tome en cuenta y, segundo, que no modifique sustancialmente sus condiciones y, desinvertirse en Alemania ¡es un gran cambio!, y más cuando el precio al que vende KPN se considera bajo.

AMX no se opone a la venta de E-Plus a Telefónica, sino al precio al que se vende la filial como lo filtró la gente de Eelco Blok, operación que al final, deberá ser resuelta en la asamblea de accionistas de KPN que probablemente se convoque para septiembre, justo cuando el acuerdo de convivencia llega a su fin.

¿Por qué la duda en el precio?, porque mientras Telefónica de España está vendiendo activos para desapalancarse, por otro lado adquiere E-Plus para sumarla con O2 en Alemania, dado que le ve un valor superior en el tiempo.

Imagine que fuera KPN la que hubiera entrado a AMX y esta última decide vender Brasil o México, evidentemente la holandesa hubiera visto un cambio de condiciones no aceptables.

Por ello, en mi opinión, la decision de AMX no tiene nada que ver con Telefónica, a la que respeta como competidor, pero tampoco es una decisión  que implique que sale de KPN, pues sigue manteniendo 29.7 por ciento

Tome en cuenta que tanto la autoridad de competencia en Alemania como en Europa, revisan a fondo la decisión de integración del tercer operador de móvil alemán (E-Plus) con el cuarto operador (O2), ya que el operador resultante se transformará en líder del mercado alemán, por delante de T-Mobile y Vodafone, con más de 43 millones de clientes y flujos combinados de ocho mil 600 millones de euros, derivado de una participación de mercado del 38 por ciento.

Por último, el propio Eelco Blok reconoció que la venta es por cinco mil millones de euros en efectivo, más una participación valuada en tres mil 100 millones de euros en el operador combinado, que como le vea, le generaría valor a KPN y mayor pago de dividendo a AMX. Mire, ni de Europa ni de KPN se sale America Móvil. Ni en México ni en América tiene mucho para donde crecer y, no hay que ver moros con tranchetes, es un negocio y por ende una cuestión de pesos y centavos.

De Fondos a Fondo

Todavía son muchos los inscritos en el concurso para ocupar una plaza de comisionado en los Institutos autónomos de Telecomunicaciones y Competencia Económica. Dicen que son 119, pero yo todavía no entiendo cómo el Comité de Evaluación y Selección que integran el titular del INEGI, Eduardo Sojo;  la titular del INEE, Sylvia Schmelkes; y el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, han logrado confirmar el “desempeño destacado de por lo menos tres años en el sector” como establece la fracción V del artículo 28 constitucional.

Eso implica “sobresaliente”, ¿no? Y, que yo sepa no hay tanta riqueza en el sector de telecom donde se apuntan 69 y 16 que van por los dos institutos.

En fin, ojalá el Comité no se siga perdiendo en tonterías, pues con aquello de que todo el personal de carrera de las unidades de las dos comisiones se inscribieron, pues le inflaron bien el número para lograr una inscripción masiva que “arrope el proceso”.

El examen además es increíble. Para algunos ha resultado ofensivo, pues ya me imagino si a alguno de los seleccionados para el INEGI en lo sucesivo se lo aplican. Es un cuestionario, encerrona de 6.5 horas, para responder módulos a tiempo, no pueden llevar celulares o laptops, quitarán el examen a quien se le vea copiando, serán observados con circuito cerrado de televisión para videograbar y notarizarán el hecho. Parece que la prueba es un ejercicio de aplastamiento de la personalidad, no de selección de la calidad. Yo creo que en ninguna prueba doctoral de alguna Universidad, te advierten que no puedes pasar armas o tomar sustancias prohibidas, ¿o sí?