José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

31 Jul, 2013

PAN: Pemex, no al monopolio

Hoy el PAN presenta su reforma energética, en la cual parte de una premisa similar a la del PRD: no privatizar los activos de la compañía petrolera, el Estado es el dueño de los hidrocarburos y fortalecer a Pemex como empresa. Hasta ahí llegan las coincidencias con el PRD, porque el PAN presentará una reforma constitucional con una diferencia esencial: Pemex no puede seguir siendo un monopolio en hidrocarburos, se necesita más competencia.

Unidad blanquiazul para energía

La reforma del PAN muy posiblemente sea presentada por Luis Alberto Villarreal, coordinador del blanquiazul en la Cámara de Diputados. Y será defendida en San Lázaro por Ricardo Anaya, vicecoordinador del área que ha estado dentro del análisis.

En esta ocasión los senadores del PAN, encabezados por Ernesto Cordero, sí podrían ir con la propuesta de su partido político, y acompañar a Jorge Luis Preciado.

En otras palabras, se espera unidad por parte de Acción Nacional, presidido por Gustavo Madero.

PAN sí a cambio constitucional

El PAN plantea una reforma constitucional, a diferencia del PRD.

Los panistas cambiarían los artículos de la Constitución para eliminar el monopolio que Pemex tiene en petróleo, refinación, petroquímica, transporte y  gas. En todo.

Parten de la premisa de que Petróleos Mexicanos sí debe seguir siendo 100% del Estado, pero que abra concesiones donde la paraestatal lleve todo el control.

Por ejemplo: en esquemas como exploración debe ser Pemex la que realice las bases de licitación para la exploración y explotación de crudo, basada en un precio de referencia según la región geológica, y de ahí esperar una subasta para ver qué empresa privada puede dar las mejores condiciones a la paraestatal.

Diagnóstico con mucha importación

El PAN parte de datos duros: hoy Pemex no puede seguir así. Importa la mitad de la gasolina consumida; importa la mitad del gas utilizado por la industria; importa 80% de la petroquímica que hoy es una industria clave para casi todo.

Y también parten de la premisa de que no hay empresa estatal en el mundo que haga todo lo quieren que haga Pemex: que sea monopolio en todas las áreas, y todas las produzca bien. Ya no tiene ni recursos ni tecnología para hacerlo.

De hecho, desde Petrobras, Ecopetrol hasta Statoil y Aramco, todas son compañías estatales que aceptan complementación de inversión y tecnología privadas.

Pedro Joaquín: en agosto, reforma

Ya están las dos posturas de la oposición. El lado positivo: todos quieren cambiar a Pemex. El PRD (Cuauhtémoc Cárdenas) plantea darle más autonomía de gestión y presupuestal. El PAN (Gustavo Madero) plantea que deje de ser un monopolio público para abrirla a la competencia.

Mientras tanto, salió el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, a decir que el gobierno federal (seguramente con su partido político, el PRI) sí va a presentar su propuesta energética para agosto.

Señores, la mesa está puesta para el debate energético, es la última vez que México puede cambiar su compañía petrolera, pues de no hacerlo ahora, las nuevas circunstancias globales la llevarán a cambiar, pues ahí están las nuevas empresas estatales más competitivas, además de un gran consumidor que se transformó en productor: Estados Unidos.

Lozoya, no basta con reforma fiscal

En medio de la discusión energética salió el director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, a mencionar que a la empresa paraestatal no le alcanzará con una reforma fiscal. Tiene razón. Viendo toda la importación de gas, gasolinas y petroquímicos, debemos meternos de lleno a transformar la petrolera.

Lozoya comenta que a veces sólo se termina diciendo que Pemex paga más impuestos, derechos y obligaciones, y que cambiando tal situación se tendría otra compañía. Y no es cierto. Ahí hace falta entrar de lleno a todas las áreas de Petróleos Mexicanos. Y desde luego nos indica por dónde viene la reforma energética del gobierno federal, la cual parece acercarse más a los planteamientos que trae el PAN, de reforma constitucional para permitir más productividad con empresas privadas en nuevas áreas, que con la del PRD donde tendría un menor acercamiento. El PRD, recordemos, ha planteado que si a Pemex se le quita la carga fiscal tendría gran posibilidad de cambiar. Pero desde luego, no basta con la reforma fiscal sin cambios de estructura de la petrolera para ser más competitiva y explotar áreas donde hoy ni siquiera se encuentra. Lozoya tiene un buen diagnóstico.