Menos privilegios para recaudar más

CIUDAD DE MÉXICO, 9 de septiembre.- El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto pretende para el próximo año ingresos adicionales por 239.7 mil millones de pesos, equivalentes a 1.4% del PIB, si se aprueba la iniciativa de reforma hacendaria que ayer fue presentada al Congreso.

La propuesta entregada por la Secretaría de Hacienda a la Cámara de Diputados implica modificaciones en todos los impuestos y la eliminación de privilegios fiscales, entre ellos el del régimen de consolidación fiscal.

De avalarse la iniciativa, el gobierno calcula un aumento acumulado en la recaudación en cuatro años de 2.9% del PIB, ya que al ingreso adicional de 2014 se sumarán otros aumentos en la captación de impuestos.

Contra la desaceleración que registra la economía este año y para evitar un recorte al gasto público, de acuerdo con el presidente Peña Nieto, el Ejecutivo solicita al Congreso de la Unión un financiamiento adicional por 0.4% del PIB.

Dará la reforma 240 mil millones de pesos

Las modificaciones en todos los impuestos y la eliminación de importantes privilegios fiscales, propuestos en la reforma hacendaria que se entregó ayer al Congreso de la Unión, aportarán al gobierno ingresos adicionales de 239.7 mil millones de pesos en 2014, equivalente a 1.4 por ciento del PIB, establecen los Criterios Generales de Política Económica (CGPE).

De ser aprobada por los legisladores, dicha iniciativa de reforma hacendaria propuesta ayer por el Ejecutivo tendrá un aumento acumulado en la recaudación en cuatro años de 2.9 por ciento del PIB, ya que al ingreso adicional de 2014 se sumarán otros aumentos en la captación de impuestos de 0.6 por ciento en 2015, de 0.3 por ciento en 2016 y de 0.3 por ciento en 2017 y 2018, respectivamente.

Entre los efectos de la reforma “social y hacendaria”, como la llamó el presidente Peña Nieto, se proyecta una captación neta adicional por los cambios al ISR y el IETU de 16 mil millones de pesos, ya que la modificación del ISR empresarial y de personas físicas aportarán ingresos al fisco de 131 mil millones y 58.6 mil millones de pesos, respectivamente, pero la desaparición del IETU generará una pérdida fiscal de 114.5 mil millones de pesos.

En el régimen del ISR empresarial, un cambio importante que se plantea es la eliminación del régimen de consolidación fiscal.

En tanto, en los cambios al ISR de las personas físicas se planea elevar la tasa máxima de ISR a 32 por ciento a las personas con ingresos mayores a 500 mil pesos anuales. Y para el resto de personas con ingresos menores a medio millón de pesos la tasa máxima queda igual en 30 por ciento.

Por otro lado, con el fin de incrementar la recaudación, mejorar la distribución de los beneficios tributarios y dar mayor progresividad al ISR de las personas físicas, se propone limitar el monto máximo de las deducciones personales realizadas por una persona física al año a la cantidad 47 mil 275 pesos.

Propone gravar las ganancias en Bolsa

Los CGPE argumentan que “con el fin de dotar de mayor progresividad al marco tributario y hacer más justa la contribución al desarrollo, se propone establecer de forma cedular el pago del ISR, aplicando una tasa de diez por ciento sobre la ganancia que obtengan las personas físicas por la enajenación de acciones emitidas por sociedades mexicanas, cuando la enajenación se realice a través de Bolsas de valores concesionadas en términos de la Ley del Mercado de Valores”.

En materia de IVA, la reforma hacendaria proyecta captar 54 mil millones de pesos adicionales por los cambios al impuesto. Plantea no tocar la tasa cero en alimentos ni en medicamentos, pero propone eliminar algunos regímenes especiales, como la exención del IVA en colegiaturas, así como al transporte terrestre de pasajeros foráneos, dejando la exención para el transporte urbano y suburbano.

La reforma busca suprimir la tasa de IVA de 11 por ciento en fronteras, para homologarla con la de todo el país de 16 por ciento.

Se cobrará una tasa de este gravamen  equivalente a un peso por litro a refrescos y aguas endulzadas.

También se prevé cobrar el IVA por la venta y renta de casas habitación. También se gravará con IVA los intereses pagados por hipotecas.

La reforma también propone eliminar la exención del impuesto a la importación temporal de mercancías.

Se propone gravar con el IVA todos los espectáculos públicos, excepto teatro y circo, mientras que se propone eliminar la exención del IVA a la introducción temporal de mercancías y a los Repecos.

Se impone impuesto ecológico al consumo de gas natural, propano, butano, gasolina, gas avión, combustóleo, keroseno, diesel, etc.

Ahora los chicles, y la venta de mascotas, como perros y gatos, así como otras especies, también pagarán IVA.

Por otra parte se eliminan el impuesto a los depósitos en efectivo, el IDE.

La reforma estima recibir 33.8 mil millones de pesos adicionales por los cambios al IEPS no petrolero y 61.7 mil millones de pesos adicionales por las modificaciones al IEPS de las gasolinas y 15.1 mil millones de pesos adicionales por los cambios a la ley de derechos.

El reparto del dinero

En el documento se propone transferir a los estados del país en 2014 el equivalente a 0.5 por ciento de la recaudación adicional de impuestos de 1.4 puntos del PIB, bajo el rubro de participaciones y aportaciones.

Señala que en un lapso de 4 años las participaciones sumaron un punto del PIB.

Ante legisladores federales y acompañado de su equipo de trabajo de la dependencia que preside, Videgaray explicó que la reforma hacendaria busca un sistema fiscal "más simple y transparente, con el fin de detonar el crecimiento y generar empleos”.

Al inicio de su mensaje, el Presidente hizo un reconocimiento a los diputados de la Comisión de Hacienda, por su responsabilidad y patriotismo, al lograr avances en la aprobación, en lo general, de la reforma financiera, lo que calificó como un paso decidido para generar créditos para las pequeñas y medianas empresas.

La Mesa Directiva de la Cámara de Diputados acordó en su momento que una vez que el documento llegue al órgano legislativo se turnará de inmediato a las comisiones correspondientes.

El gobierno, que también presentó ayer por la tarde su propuesta de paquete presupuestario para el 2014, propondrá un déficit "transitorio" de 0 a 0.4% del PIB en el 2013 y prevé un rojo del 1.5% para el 2014.

La iniciativa fiscal se suma a una reforma energética ya presentada al Congreso por el mandatario, que propone un esquema de contratos de utilidad compartida con empresas privadas en los sectores petrolero y de gas. El Partido Acción Nacional (PAN) busca establecer concesiones con empresas.

Cualquiera de las dos alternativas requiere reformas a la Constitución, algo que los partidos de izquierda, como el PRD, rechazan.

Hacienda evitará un recorte al gasto público

Ante la desaceleración económica que vivió el país durante la primera mitad del año, y con el objetivo de no realizar una reducción al gasto público que provoque un menor desempeño, el gobierno federal propuso un Programa de Aceleración del Crecimiento que contempla un déficit para 2013, sin incluir la inversión de Pemex, por 65 mil 300 millones de pesos, lo que equivale a 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Esta medida contracíclica se suma a la reducción hecha por el Banco de México (Banxico) el pasado viernes de 25 puntos base en la tasa de referencia, para ubicarla en 3.75 por ciento, con las que se busca dar un impulso al crecimiento económico, luego de que el primer semestre del año se registrara un dinamismo menor al  esperado.

“Este programa responde al insuficiente desempeño de la economía nacional durante este primer semestre del año. Busca dinamizar el mercado interno y apoyar el empleo entre los mexicanos”, dijo al respecto Enrique Peña Nieto, en el marco de la presentación del paquete económico  para el  ejercicio fiscal 2014.

Otros apoyos

Asimismo, solicitó al Congreso de la Unión aprobar una "serie de déficits" transitorios, que se irán reduciendo gradualmente hasta 2017, lo que dará paso a un estímulo contracíclico para apoyar a la economía y al empleo, al tiempo que permitirá invertir “de manera decidida desde ahora para alcanzar los frutos de las reformas estructurales lo antes posible”.

De acuerdo con el documento, enviado al Congreso, el Programa de Aceleración del Crecimiento para 2014, prevé un déficit de 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto, sin considerar la inversión de Petróleos Mexicanos.

Dicha cifra se prevé que decrezca en el tiempo para alcanzar 1.0 por ciento del PIB en 2015, 0.5 por ciento en 2016 y un presupuesto balanceado para 2017.

“Estos déficits transitorios, reconocen la desaceleración de la economía nacional ante factores externos e internos, y son una propuesta consistente en el manejo responsable de las finanzas públicas, además este programa prevé  acelerar  la ejecución del gasto reasignando recursos hacia aquellos proyectos de rápida instrumentación”, subrayó Peña.

Cabe resaltar que dicha estrategia se revisará en cada ejercicio fiscal de acuerdo al desempeño de la actividad económica y de las finanzas públicas, según refiere el paquete económico para 2014 enviado al Congreso.

Por otra parte, en congruencia con el desempeño de la actividad económica observado en el primer semestre, las estimaciones para la segunda mitad del mismo y el incremento de riesgos a la baja para la economía mexicana, el gobierno federal ajustó sus proyecciones de crecimiento del PIB de México para 2013 de 3.5 a 1.8 por ciento.

En tanto, para el siguiente año estimó un crecimiento de 3.9 por ciento, cifra similar al 3.74 por ciento que proyectaron los analistas del sector privado consultados por el Banco de México en su encuesta de agosto de 2013.

Finalmente, Hacienda solicita un endeudamiento neto externo total por hasta diez mil millones de dólares, y un techo de endeudamiento interno por hasta 550 mil millones de pesos.

Habrá un nuevo régimen fiscal en Pemex, según la propuesta federal

La iniciativa de reforma hacendaria presentada por el presidente Enrique Peña Nieto incluye un nuevo régimen fiscal para Petróleos Mexicanos (Pemex). La propuesta aplicable a las actividades de exploración y extracción de hidrocarburos consiste en capturar la renta petrolera y los impuestos por la actividad industrial.

El jefe del Ejecutivo aseguró que con el esquema propuesto, el cual es similar al de cualquier otra empresa petrolera en el mundo, le permitirá a la paraestatal hacer mayores inversiones a favor del desarrollo nacional.

Los Criterios Generales de Política para la Iniciativa de Ley de Ingresos y el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación correspondientes al Ejercicio Fiscal 2014 estipulan que el pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR) se llevará a cabo por los ingresos derivados de estas actividades, esto significa que Pemex pagará ISR, como cualquier otra empresa en México.

Cuotas

El nuevo régimen fiscal considera una cuota superficial, por la parte del área contractual que no se encuentre en la fase de extracción de hidrocarburos, elemento que pretende funcionar como un incentivo a la petrolera para no retrasar el desarrollo de las áreas.

Se contempla un pago de alrededor de 10 por ciento del valor de la producción, el cual cumple las funciones de las regalías por la extracción de los hidrocarburos. En lo referente a la distribución de la utilidad operativa entre el Estado y Pemex, establece que ésta se divide de acuerdo a porcentajes preestablecidos, que se ajustan de acuerdo a la rentabilidad acumulada del contrato. “Para el cálculo de esta utilidad operativa, se reconocen, a lo largo de la vida productiva del contrato, todos los costos por la exploración y extracción, sujetos a un límite por periodo, para modular la velocidad en la que se amortizan las inversiones”.

En pago de dividendos se transparenta la decisión entre tomar las utilidades, a través de la figura de dividendo estatal, o reinvertirlas.

La propuesta del Presidente de la República también considera mecanismos para el control y registro de los costos, las inversiones y la producción. “Se vela por una continua transparencia y rendición de cuentas a la sociedad”.

El proyecto prevé una migración gradual de las actividades de exploración y producción a este nuevo régimen, para que entre en vigor a partir de enero de 2015. Sin embargo, Pemex podrá iniciar la migración del esquema actual al de contratos de utilidad compartida con el Estado inmediatamente.

La iniciativa indica que para el manejo responsable de las finanzas públicas se contemplan niveles mínimos de dividendo estatal que Pemex deberá entregar al Estado año con año. Estos niveles se fijan para el primer año en que se encuentre en vigor esta Ley, como mínimo en 30 por ciento de los ingresos generados por los contratos de utilidad compartida. Gradualmente, estos niveles se reducen, hasta eliminarse en 2026.

El director general de Pemex, Emilio Lozoya, consideró que la reforma hacendaria fortalece a la paraestatal con la propuesta de un nuevo régimen fiscal que le permitirá incrementar sus inversiones.