Alicia Salgado

Cuenta corriente

Alicia Salgado

15 Oct, 2013

Reforma fiscal, un tema clave para México

WASHINGTON. ¿Coincidencia? El próximo jueves, vence el “auto plazo” que fija la ley presupuestal para que se alcance un acuerdo en la Cámara de Diputados de México (por supuesto también en Estados Unidos), que en materia de reforma hacendaria permita terminar con la debilidad estructural de los ingresos fiscales (allá pueda concluirse el sequestration), y reducir la dependencia pública de los ingresos petroleros del país (allá elevar el techo de la deuda pública que les permita evitar el default).

Lo que no es curioso es que este lunes y martes se celebra el 20 aniversario de la autonomía del Banco de México (con la presencia de una veintena de banqueros centrales, que vienen invitados por el gobernador Agustín Carstens), uno de los acuerdos políticos alcanzados antes de la crisis de 1995, que ha sido crucial para entender la capacidad de respuesta institucional de nuestro país ante los episodios de iliquidez e incertidumbre que en estos 20 años han ocurrido en el país.

México hoy cuenta con un sistema de inflación por objetivos explícito y es uno de los nueve países que mantiene por segundo año consecutivo la calificación de “país con libertad cambiaria sin intervención alguna en el mercado”, que a diferencia de la Fed, de Ben Bernanke de EU, dota al Banco de México de una elevada credibilidad porque no se está manipulando al tipo de cambio para aumentar exportaciones o mantener la expansión económica.

Pero ambos países coinciden en algo: les es indispensable una revisión profunda de su acuerdo fiscal, que siempre será un acuerdo político, y lo que parece una “oposición absurda” y hasta “radical”, como la de la fracción panista, tema que en el Senado y el blanquiazul lidera Ernesto Cordero, resulta ser el factor de compensación que baja temas y gana adeptos.

Ayer el PAN, encabezado por el diputado Juan Bueno Torio en la parte económica, fue quien logró bajarle a la “discrecionalidad” a la “cláusula antielusión. Cierto, Cordero ha ganado adeptos para su intención de presidir el PAN, pero el equilibrio que juega para facilitar la negociación de la reforma hacendaria al blanquiazul, se pondrá a todo cuando se trate de definir “las compensaciones” políticas y presupuestales acordadas para admitir la homologación del IVA en la frontera.

Hasta ahora, con los acuerdos alcanzados, llevan muy poco perdido de lo que va a aparecer en la hacienda pública que tocará administrar a Luis Videgaray, y falta el tema más crítico. El Presupuesto.

De Fondos a Fondo

Los que están muy preocupados son las 14 armadoras integrantes de la ANPACT, que preside Miguel Elizalde, pues entre el impacto de la caída de exportaciones al mercado colombiano y la continua desaceleración en México, podrían iniciar proceso de desinversión en nuestro país.

De enero a septiembre se han comercializado 28 mil 96 unidades, casi 800 menos que en igual periodo del año pasado, 2.8% menos para ser exactos, pero en los últimos cinco meses, la recuperación es de apenas 1%.

De hecho, en septiembre frente al mismo mes del año pasado, se vendieron casi 20% menos de unidades al distribuidor, y 15.8% menos al público en general, caída que coincide con la discusión de una propuesta fiscal que, de aprobarse en los términos planteados por el Ejecutivo federal, afectaría de forma importante y en sentido negativo, la operación, logística y sistemas de nuestras empresas armadoras de autobuses, camiones y tractocamiones ubicadas en territorio nacional.

De manera específica, nos referimos a la reforma contenida en el artículo 25 de la Ley del IVA que propone gravar con este impuesto a las importaciones de material de ensamble y de maquinaria y equipo que se importan mediante el depósito fiscal automotriz, lo cual obligaría a los fabricantes de vehículos pesados en México a pagar el IVA en la aduana de entrada, aun cuando las importaciones fueran temporales.

Lo anterior, a diferencia del régimen que ha venido operando por más de 22 años, a través del cual se puede diferir el pago del IVA en la importación, para pagarse en el momento en el que las empresas armadoras conocen el destino de los vehículos fabricados (mercado nacional o internacional).

La reforma señalada afectará considerablemente el flujo de efectivo y la operación de comercio exterior, al hacer inoperantes las autorizaciones de depósito fiscal automotriz que hoy tienen las empresas armadoras, y que otorgaban seguridad en la planeación de operaciones, puesto que se otorgaban por un plazo de entre cinco y diez años.

Mauricio Kuri tomó la decisión, después de seis años de encabezar la tarea de Comunicación y Políticas Públicas de General Motors México, de iniciar un proyecto personal en el mismo terreno profesional que conoce, y dejar al equipo que encabeza Ernesto Hernández. Ese nuevo camino no implica dejar el sector automotriz, pero con la ventaja de que la tarea que se hace de forma independiente, puede lograr mejores resultados que la que impone la norma de cumplimiento corporativa.

También en el sector, quien dejó Ford Motor Company fue Eduardo Serrano, director ejecutivo para América Latina. Se retira después de 31 años en la compañía.

Desde el inicio de su trayectoria en Ford en 1982, Eduardo Serrano se desempeñó en diferentes posiciones de liderazgo en Estados Unidos y México en las áreas de compras, calidad, mercadotecnia, ventas y gerencia. En 2005 fue nombrado presidente de la Región Andina, cargo que dejó a finales de 2008 al ser nombrado presidente y director general de Ford de México. Durante los últimos tres años encabezó las operaciones de la región latinoamericana.

A partir del primero de noviembre de 2013, Gabriel López, presidente y director general de Ford de México, y Steven Armstrong, presidente de Ford América del Sur, reportarán directamente a la vicepresidencia para las Américas, encabezada por Joe Hinrichs.

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