Pemex compra 51% de astillero español Barreras

CIUDAD DE MÉXICO.- Petróleos Mexicanos (Pemex), a través de su filial internacional PMI, firmó un contrato para la compra de 51 por ciento de las acciones del astillero español Hijos de J. Barreras, S.A (Astillero Barreras), para lo cual ejercerá una inversión de 5.1 millones de euros.

Según la petrolera mexicana, esta transacción tiene como objetivo aprovechar la experiencia y tecnología de la mencionada empresa para la construcción de embarcaciones especializadas para Pemex, y trabajar con armadores nacionales e internacionales.

En un comunicado, la paraestatal aseguró que la firma de este contrato “es un esfuerzo conjunto encaminado a la reactivación de la industria naval en España, lo que permitirá además desarrollar capacidades en el mediano plazo para la construcción de buques especializados en México”.

Según la petrolera nacional, con estas acciones también se capitalizará el desarrollo tecnológico del sector naval gallego enfocado a la industria petrolera.

Actualmente PMI, en conjunto con el Astillero Barreras y el astillero público Navantia, se encuentran participando en la licitación pública internacional convocada por Pemex Exploración y Producción para la contratación de los servicios de alimentación y hotelería mediante dos floteles.

“Este contrato refuerza el acuerdo de colaboración firmado entre Pemex y la Xunta de Galicia en mayo de 2012, para la construcción naval.”

Desactiva conflicto

El conflicto abierto entre el gobierno argentino y la petrolera española Repsol por la expropiación de YPF, que el gobierno de Cristina Fernández realizó hace algo más de un año y que no paraba de perjudicar los intereses de Pemex de manera indirecta,  finalizó ayer.

Pemex medió políticamente entre los gobiernos, quienes terminaron firmando un acuerdo, a la vista de  que la batalla judicial para calcular la indemnización que el Estado argentino debía pagar a Repsol por la expropiación de 51% que la española poseía en YPF podía eternizarse.

La obstinación del presidente de Repsol, Antonio Brufau, por rechazar las ofertas económicas que Pemex (que posee 9.4% del capital de la española) le pedía aceptar, se terminó gracias a las negociaciones de la firma mexicana.