David Páramo

Análisis superior

David Páramo

24 Ene, 2014

Naturaleza bancaria

Existe una creencia ampliamente difundida entre diferentes sectores de la sociedad, señaladamente pequeños empresarios y algunos políticos, que todo se arregla con crédito.

Que si una empresa recibe financiamiento de una manera casi milagrosa logra superar cualquier problema, cuando en realidad sólo se trata de una visión bastante parcial y desinformada.

No todos los problemas se arreglan con crédito, algunos no sólo complican la situación de una empresa, familia o gobierno, sino también pueden ser la semilla de una crisis financiera que termine dañando a la economía en su conjunto.

El creer que todo se arregla con crédito es una forma bastante burda de enviar hacia otros lo que, en la mayoría de los casos, corresponde a una empresa.

Algunos funcionarios del gobierno, ciertos de que sí hay una crisis en el sector de la vivienda, han pedido a los bancos que den más crédito a los desarrolladores de vivienda como si eso fuera la solución del problema.

Seamos claros. Los esfuerzos que está haciendo, por ejemplo, la Sociedad Hipotecaria Federal para dar garantías son una medida correcta, pero insuficiente. Que el Infonavit hubiera aumentado el monto de los créditos que da directamente hasta 700 mil pesos también va en el sentido correcto.

Sin embargo, la disminución en el crédito que ofrecen los bancos no se trata de un hecho caprichoso o falta de compromiso de las instituciones financieras que, por cierto, durante los últimos años tuvieron en el financiamiento a desarrolladores de vivienda y personas físicas uno de sus principales nichos de negocio.

Bancomer, que tiene el liderazgo en la colocación de crédito de vivienda, estima que sólo se construirán unas 250 mil viviendas este año. Este cálculo se basa en que las nuevas reglas de construcción de vivienda y manejo de reserva territorial, aunado al menor ingreso disponible de las personas, disminuirá la capacidad de tomar créditos y por lo tanto se mantendrá la desaceleración de este sector fundamental para el empleo en el país.

Supongamos por un momento que los bancos se ponen a dar crédito. Para hacerlo tendrían que disminuir los niveles de prudencia en la colocación del crédito. Quienes conocen el sector bancario saben que cualquiera puede dar un financiamiento, pero el problema es recuperarlo.

Y es ahí donde los bancos tienen que tener una visión de largo plazo, lo cual choca con los intereses de los políticos que no tienen una mira de futuro, sólo les importa el aquí y el ahora.

Un banco tiene como primera obligación proteger el dinero de sus depositantes y de sus accionistas, así que debe dar créditos que le den una buena posibilidad de recuperación y un correcto margen de ganancia.

Es sorprendente que políticos, quienes tuvieron que enfrentar desde el Congreso de la Unión la crisis bancaria de la década pasada, no hayan aprendido que soltar el crédito a tontas y locas es un error que todos los miembros de la sociedad terminan pagando y, peor aún, que va en contra del objetivo planteado.

Cochinero

Quizá Alfonso Sarabia debió haber buscado un mal arreglo en lugar de un buen pleito entre el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y Fumisa; sin embargo, cuando se ve el fondo de los manejos que tuvo la inmobiliaria que dirige Ruffo Pérez de estos establecimientos se comprende la desesperación del funcionario público.

Es difícil explicar, por ejemplo, por qué algunos locales tienen rentas diferenciadas con respecto a quién es el propietario. Más allá, las matemáticas más simples dejan muy claro que Fumisa no tendría derecho a decir que no han alcanzado la rentabilidad indicada en el contrato con respecto a los ingresos que generaron durante estas dos décadas.

Lo que ha pedido Sarabia es que hagan cuentas, las cuales podrían generar que Fumisa les deba más de seis mil millones de pesos al AICM.

Las revelaciones de esta historia apuntan directamente hacia Advent, encabezada por Luis Solórzano, puesto que podría implicar una gran cantidad de problemas que comienzan desde la forma en que este fondo de inversión se benefició indebidamente de la parcialidad con la que se dieron los contratos de arrendamiento para restaurantes, así como por el impacto que podría generar entre sus inversionistas.

De hecho, no se descarta que el cochinero descubierto por Sarabia termine implicando gravísimos problemas no únicamente para Fumisa, sino también para Advent.

Ahora quizá se debería pensar que Pérez se equivocó al hacer un pleito tan grande en el que perderán mucho más que el contrato de la terminal uno del AICM.

¿Relevante?

Lo que ha sucedido con las acciones de Homex en los últimos días hace suponer que hay una situación verdaderamente grave al interior de la emisora cotizada en la Bolsa Mexicana de Valores.

Hay quienes han interpretado el comportamiento errático de una emisora que no reporta resultados como el principio de una solución a sus problemas financieros, es decir, que podría estar cerca de terminar con su concurso mercantil.

Independientemente de que la empresa que encabeza Eustaquio  de Nicolás pudiera llegar a una salida de sus problemas financieros, lo cual es dudoso aún, plantea que alguien tiene información que los demás no, lo que genera una muy fuerte especulación dentro del mercado de valores.

Esperar que la Bolsa Mexicana de Valores tome acciones resulta un tanto utópico, puesto que la administración de Luis Téllez se ha caracterizado por dejar hacer y dejar pasar siempre y cuando no dañe su proyecto político. Sin embargo, sí es necesario que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores inicie una investigación sobre este comportamiento de las emisoras que se encuentran en problemas financieros serios.

Desinversión

Teléfonos de México emitió un comunicado de prensa en el cual asegura que no ha solicitado a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes ni a ninguna otra autoridad permiso para escindir activos concesionados.

Afirman que las empresas en las que se han desinvertido no están sujetas a concesión y básicamente se trata de inmobiliarias.

Con estas afirmaciones aseguran que no están tratando de eludir las regulaciones de preponderancia y dominancia que deberá emitir en breve el Instituto Federal de las Telecomunicaciones.

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