Cambios tributarios elevan a la inflación

Los aumentos provinieron de los ajustes en bebidas saborizadas y comida chatarra
Economía -
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CIUDAD DE MÉXICO.- Los precios al consumidor en México resintieron los efectos de la Reforma Fiscal durante la primera quincena de enero, particularmente por los nuevos impuestos en bebidas saborizadas y alimentos de alto contenido calórico, así como por un mayor costo en los energéticos, factores que elevaron la inflación más de cuatro por ciento.

El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), reportó una variación de 0.68 por ciento en los primeros quince días del año, el aumento más alto registrado para ese mismo periodo desde 2010.

Así, la inflación alcanzó una tasa de 4.63 por ciento anual en la primera quincena de 2014, la tasa más alta observada para ese periodo en cinco años.

Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays, consideró que la tendencia al alza de la inflación obedece a los nuevos impuestos, particularmente los aplicados en refrescos y comida “chatarra”.

Lo anterior se refleja en que el costo de los refrescos incrementó 11.4 por ciento, el precio del pan dulce creció 4.76 por ciento y también aumentaron los costos de alimentos en loncherías, fondas, torterías y taquerías.

“En realidad, el nuevo impuesto en estos bienes fue aproximadamente de 12 por ciento, lo que sugiere que 95 por ciento de la carga se ha transferido a los consumidores”, aseguró Oviedo.

Impacto

Dado que el refresco es un producto con una demanda inelástica, el especialista duda que se reduzca su consumo con el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) de un peso por litro que se aplica a éste y bebidas saborizadas.

Arturo Vieyra, subdirector de estudios económicos de Banamex, coincidió que el impuesto a los refrescos fue uno de los cambios fiscales que más incidió en el aumento del índice de precios al consumidor, en este caso se estima que la incidencia fue de 12 puntos base. Sin embargo, otras modificaciones también influyeron. Por ejemplo, la homologación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en la frontera se observó en el crecimiento promedio de dos por ciento en los precios en Chetumal, Acuña, Tijuana y Mexicali.

Sergio Martin, economista en jefe para México de HSBC, afirmó que no sólo los cambios fiscales impulsaron los precios al alza; el aumento que registraron las tarifas energéticas, es decir, los costos de las gasolinas, la electricidad y el gas también incidió.

Muestra de ello es que el precio de la gasolina de bajo octanaje creció 1.70 por ciento debido a que se aplicó un incremento único a inicio de 2014, lo que provocó una variación quincenal mucho mayor a 2013.

Los tres analistas coincidieron en que los aumentos en precios antes mencionados fueron parcialmente compensados por la baja en el costo de productos agropecuarios como jitomate, chile poblano, tomate y uva.

Ajuste transitorio

Aunque la inflación se encuentra cercana a una tasa de cinco por ciento, los analistas de Banamex y HSBC coincidieron en que se trata de un alza temporal porque el impacto de la reforma tributaria será de una sola vez. Aseguraron que la inflación comenzaría a reducirse durante la segunda mitad del año para ubicarse en un rango cercano a cuatro por ciento a finales de 2014, sin que haya una intervención del Banxico para converger a la meta de tres por ciento.

 

El dólar, en su nivel más alto  desde septiembre de 2013

El tipo de cambio alcanzó su nivel más alto desde el 3 de septiembre de 2013, al concluir la jornada de este jueves en 13.4100 pesos por dólar, en su modalidad interbancario 48 horas reportado por el Banco de México.

La depreciación de ayer fue de 0.67 por ciento, equivalente a 9 centavos, luego de que el miércoles la paridad concluyera el día en 13.32 pesos por dólar.

Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de Banco Base, explicó que la moneda mexicana mostró la sexta mayor depreciación entre las monedas emergentes, como consecuencia de movimientos de capitales.

En tanto, el peso argentino es el que más se deprecia con 12.97 por ciento, agregó.

“El dato de la manufactura de China generó preocupaciones sobre el crecimiento económico de los países emergentes, puesto que ya que se estimaba un menor dinamismo para este año respecto a los países avanzados”, destacó.

“Además, el mercado continúa nervioso por el anuncio de la Fed del próximo 29 de enero, por las especulaciones de que recortará sus compras de bonos en 10 mil millones de dólares”, enfatizó.

Destacó que el Banco Central de Turquía intervino en el mercado cambiario por primera vez en más de dos años para frenar la depreciación de la lira turca, la cual se ha visto afectada por el tema de la Fed además de ciertos factores de su economía.

“Es muy probable que el peso siga depreciándose hacia el máximo del 2013 de 13.46 pesos por dólar. Si rompe ese nivel, técnicamente podría moverse hacia 13.68 pesos por dólar”, advirtió.

La sesión de hoy se caracterizó por una alta volatilidad en los mercados financieros y pérdidas generalizadas en los mercados accionarios a nivel global.

La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró con una pérdida de 1.26 por ciento, para ubicar su principal índice en 41 mil 531 unidades.

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