Pugnas de socios, reto del TLCAN

CIUDAD DE MÉXICO.- El sistema de resolución de controversias, es algo que se debe mejorar del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya que México y Canadá están acudiendo con dos casos a la Corte de Apelación de la Organización Mundial de Comercio (OMC) a demandar a Estados Unidos por incumplimiento de resoluciones de paneles del TLCAN.

Ricardo Ramírez, el primer juez mexicano presidente de la Corte de Apelación de la OMC, explicó en entrevista con Excélsior
que “la reflexión importante es que a pesar de que existe el TLCAN, las controversias se están resolviendo en la OMC”.

Por ejemplo, dijo, los casos de México en contra de EU como es el del atún se pudo haber resuelto en el TLCAN y no se resolvió, lo mismo que el de etiquetado, que se llevó a la OMC.

“Esto puede dar una idea de qué tan eficaz es un mecanismo, o puede decir que los miembros del TLCAN consideran que es más confiable el mecanismo de la OMC que el del Tratado y esto se mencionó en los foros donde se revisaron los 20 años del
TLCAN”, destacó.

“Yo no podría concluir que los mecanismos de solución de controversias del TLCAN no están funcionando, lo que se podría decir es que sus socios están ventilando sus controversias en la OMC. Entonces la pregunta que hay que hacer es por qué controversias que son propias del TLCAN se están ventilando en la OMC”, dijo.

Pero lo importante de la discusión del TLCAN no debe ser nostálgica, de lo bueno y lo malo, sugirió, sino analizar cómo se puede mejorar y como construir a partir del Tratado.

En marcha

México tiene dos controversias en curso, uno por el tema del atún y otro por el etiquetado,mismos que inició contra EU; en un caso, México va junto con Canadá, y en el otro va solo, y estos casos ya llegarán al tribunal, que las deberá revisar y dirimir el asunto.

“Me reservo más detalles de estos asuntos, debido a que son dos controversias en curso”, señaló, y recordó que en el caso del cemento se llegó a un acuerdo y en el aguacate no pasó nada.

“El asunto del transporte no se podría llevar a la OMC porque el asunto es muy particular, tiene que ver con compromisos del TLCAN en materia de servicios”, contestó.

El tribunal

El órgano de apelación es el tribunal internacional más importante y activo en el ámbito mundial y hasta la fecha ha resuelto más controversias que la Corte Internacional de Justicia.

Explicó que las controversias que resuelve tienen que ver con todo el tema del derecho económico internacional, desde restricciones a cigarros o al atún, hasta las que tienen que ver con aviones. Así, la gama de casos que revisa la OMC es muy amplia, prácticamente cualquier cosa que tiene que ver con el derecho económico internacional.

La Corte de Apelaciones de la OMC es un tribunal de última instancia y desde 1995 ha emitido 96 fallos, que representan 30 por ciento de los casos concluidos por los paneles de solución de controversias.

“Yo he participado en unas seis controversias”, comentó.

“Fui elegido por los miembros del tribunal en 2009 en una competencia muy reñida con una candidata brasileña, con un argentino y un costarricense”, recordó Ramírez.

“Llevo en este tribunal ya cuatro años y medio y el año pasado mis colegas tuvieron a bien nombrarme presidente del tribunal, por lo que llevo todo 2013,
y 2014 también seré presidente del tribunal”, abundó.

“Somos un tribunal de siete miembros y representamos geográficamente a la membresía de la organización. Esto significa que yo ocupo un lugar de América Latina, básicamente”, comentó.

“En la OMC hay tres mecanismos: una instancia de consultas, que son diplomáticas, ya que los miembros de la OMC tratan primero de resolver el asunto por la vía diplomática; luego hay una instancia arbitral de unos panelistas que son designados y nosotros somos quienes revisamos las decisiones de los paneles o los grupos especiales de la OMC”, puntualizó.

Recordó que la OMC es una organización de países miembros y sólo tienen legitimidad para acudir al tribunal dichos países. Obviamente detrás de cada país hay el interés de una empresa o grupo de empresas que quieren empujar su controversia, pero en realidad una empresa particular no puede iniciar un caso en el órgano de apelaciones, sólo los países miembros de la OMC.

Una larga trayectoria jurídica

Ricardo Ramírez Hernández preside uno de los tribunales con mayor impacto económico en el mundo. Es el primer mexicano en presidir un tribunal multilateral integrado por la mayoría de los países del mundo. Además, es el juez más joven de cualquier tribunal a nivel internacional.

Los primeros días de enero de este año, la Organización Mundial del Comercio (OMC) oficializó la reelección de Ricardo Ramírez Hernández como presidente del órgano de Apelaciones para el año 2014.

El hecho fue destacado en la cuenta oficial de Twitter de la Presidencia de la República y de la Secretaría de Economía.

“La @wto hace oficial reelección del mexicano @ricardoramirezh como Pdte. Órgano de Apelación”, se publicó en @PresidenciaMX.

Mientras que en la cuenta @SE_mx se tuiteó: “El tribunal de la @wto resuelve controversias que van desde las restricciones para exportación, hasta los subsidios para fabricar aeronaves”.

Su trayectoria

Ricardo Ramírez Hernández es abogado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), con maestría en Derecho Comercial Internacional por el Washington College of Law, de la American University.

Al concluir sus estudios en Washington en 1995, entró a trabajar en la Secretaría de Economía, para luego en ese mismo año, desempeñarse como consultor jurídico adjunto de negociaciones.

En esa área de la dependencia se desempeñó durante once años, brindando asesoría jurídica respecto a tratados de libre comercio suscritos por México.

Durante su desempeño como asesor jurídico del gobierno, dio clases en la UNAM sobre derecho y comercio exterior.

En 2006, dejó la Secretaría de Economía y se incorporó al despacho Thatcher Proffitt & Wood, donde litigó más de dos años en temas de comercio internacional y procedimientos de arbitraje sobre inversiones.

Experiencia

En 2008, formó parte del bufete Chadbourne & Parke, como consejero jurídico y director de la Práctica de Comercio Internacional para América Latina.

A sus 40 años se convirtió en juez del tribunal del Órgano de Apelaciones, y permanecerá hasta 2017.

Efectos

1.- El gobierno de Estados Unidos no ha acatado resoluciones en el marco del TLCAN, por lo que las disputas comerciales deben llevarse ante la OMC.

2.- El tribunal de apelaciones de la Organización Mundial de Comercio es un órgano de última instancia, por lo que los países miembro deben acatar todas sus resoluciones.