Escisión de activos, será elemento disuasivo: Guajardo

Uno de los temas que más preocupa al sector privado en la legislación secundaria sobre competencia económica que enviará mañana el presidente Enrique Peña Nieto, es la regulación sobre escisión de activos que aplicará en casos extremos para las empresas que recurran a prácticas monopólicas absolutas.

Al respecto, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, aseguró que uno de los tres objetivos de la Reforma en Competencia Económica, que se negoció intensamente en el marco del Pacto por México, es precisamente la posibilidad de la escisión de activos que se ha aplicado a nivel mundial en contadas ocasiones como es el caso de Estados Unidos cuando se dividió ATT en las famosas Baby Bells.

Sin embargo, aclaró que la escisión de activos está contemplada como un elemento disuasivo para las empresas que sólo se aplicaría en casos realmente extremos de prácticas monopólicas absolutas, una especie —dijo— de bala de alto calibre.

Dentro de los objetivos de la Reforma en Competencia que serán plasmados en la legislación secundaria están también medidas para una mayor competencia en la comercialización de insumos que son esenciales para muchos sectores empresariales; y la eliminación de barreras al libre comercio y competencia de bienes y servicios.

El objetivo de la reforma es una legislación secundaria que fortalezca a la Comisión Federal de Competencia Económica, y las empresas conservarán su derecho a defenderse jurídicamente pero ya no se podrán alargar los juicios en contra de resoluciones de la Cofece como sucedía antes de esta reforma en el que las empresas impugnaban cada paso del proceso.

La legislación secundaria en materia de competencia será enviada a la Cámara de Diputados y todo indica que el presidente Peña Nieto enviará la muy esperada legislación de telecomunicaciones al Senado.

Ley de competencia sí aplicará en telecomunicaciones

Aunque con la reforma de telecomunicaciones, se creó en el IFT una nueva unidad de competencia económica, el secretario de Economía asegura que las concesionarias en el sector de telecomunicaciones estarán también regidas por la Ley de Competencia Económica.

El IFT será, en efecto, el  encargado de emitir la declaración de empresas preponderantes y la regulación asimétrica que se aplicará a estas empresas, pero todas ya sean preponderantes o no, tendrán que cumplir con la Ley de Competencia Económica y no incurrir en prácticas monopólicas.

Ildefonso Guajardo puso un claro ejemplo: si una empresa telefónica realiza prácticas de ventas atadas que están prohibidas por la ley, será sancionada por la Cofece y será la naturaleza de la acción la que determine si el tema es ventilado dentro de ésta o del IFT.

Empresas ferroviarias podrían solicitar panel en TLCAN

En torno a la polémica por la ley ferroviaria que aprobó en fast track la Cámara de Diputados y que está en discusión en el Senado, José Zozaya, presidente de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles, confía en que se realice un foro en el que las empresas del sector puedan presentar sus puntos de vista y objeciones a las modificaciones de la ley.

Aunque reconoce que actualmente las vías no están saturadas Zozaya asegura que no se oponen la competencia, pero sí a que las nuevas empresas que no serán concesionarias sino permisionarias sin experiencia ni  equipos modernos puedan utilizar las vías primarias lo que puede traducirse en problemas diversos desde accidentes hasta retrasos en la carga para los grandes trenes.

En Estados Unidos asegura Zozaya, quien es presidente de Kansas City en México, los permisionarios no utilizan las vías primarias sino las secundarias que es lo que se propone para nuestro país, y las facilidades para construir nuevas vías.

Otra objeción de las empresas ferroviarias es a la obligación de publicar sus tarifas porque se divulgarían los contratos con diversas empresas que son las primeras en oponerse a que esta información sea pública. Su propuesta es fijar un tope y un piso a las tarifas y que en estos márgenes cada empresa pueda negociar libremente sus contratos de carga.

Y su tercera gran objeción es a que sean las concesionarias las que tengan que cubrir los costos del mantenimiento de los cruces a nivel porque deberían ser los gobiernos estatales los encargados de la construcción de deprimidos o puentes para los cruces de los trenes.

Lo interesante es que Kansas City y Ferromex tienen un as bajo la manga que es la posibilidad de solicitar un panel del TLCAN en caso de que se apruebe la ley sin modificación y demuestren que están afectando sus inversiones y derechos como inversionistas por el cambio de reglas en las concesiones.

Al respecto Zozaya reconoce que sería una opción, pero confía en que sí se puedan hacer cambios en la ley en el Senado que eviten que el gobierno mexicano sea llevado al banquillo de los acusados no sólo en el marco del TLCAN sino también de la OMC justo cuanto estamos en plena negociación del TPP.