¿Qué tan mexicanas son las exportaciones de México?

CIUDAD DE MÉXICO.- Uno de los elementos que se han mantenido constantes dentro de la política económica de México desde que el país ingresó al Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio en 1986 es que la política comercial ha estado enfocada en la promoción del libre comercio a ultranza, ya sea mediante reducciones unilaterales en los aranceles o mediante la firma de tratados de libre comercio (el más reciente con Panamá). Los beneficios que en teoría trae consigo esta política es que por un lado permite a los consumidores tener acceso a una mayor cantidad de bienes a un menor costo, mientras que los exportadores nacionales se encuentran en mejores condiciones de competir.  Este último punto llevaría a que los sectores exportadores crecieran, impulsando consigo al resto de la economía y llevando a la economía nacional a mayores tasas de crecimiento.

De 1987 a 2011 las exportaciones pasaron de representar 20% del producto a ser casi un tercio del mismo. En cambio, en el mismo periodo el producto por habitante creció en promedio cada año 2% (datos de Banco Mundial). El resultado de esta magra tasa de crecimiento son los niveles de pobreza que actualmente se observan en la economía mexicana. ¿Por qué si las exportaciones crecieron (más que el producto), la economía no creció aceleradamente? Una respuesta tentativa a esa pregunta se puede obtener analizando el contenido nacional de la producción en los sectores de mayor vocación exportadora.

Para ello, se utilizaron los datos de la base de datos mundial sobre insumo-producto desarrollada por Marcel Timmer y un amplio equipo de economistas. Se definió a los sectores de mayor vocación exportadora como aquellos 5 sectores en donde la participación de las ventas al exterior fuera mayor. Por su parte el contenido nacional por sector es la suma del valor de los insumos de producción nacional y el valor agregado en el sector, todo como porcentaje del valor total producido por el sector. El resultado de estos cálculos es el siguiente gráfico:

Vale la pena señalar que salvo en el caso brasileño, la producción exportada de los 5 sectores de mayor vocación exportadora representa la mitad o más del total de exportaciones para el año 2011 (el último disponible). En el caso brasileño representa cerca del 40% del total. Es decir, se trata de los sectores que producen buena parte de las exportaciones de los países analizados, por lo que el análisis es una buena primera mirada al método de producción de las exportaciones en su conjunto.

El principal resultado es que si se excluye las actividades de extracción de recursos naturales o de procesamiento básico de los mismos, los sectores altamente exportadores de la economía mexicana son los que menos contenido nacional tienen. Mientras que en Brasil y China el contenido nacional en estos sectores ronda el 90%, en Corea del Sur es cerca del 80% y en México es aún menor, pues apenas se está por encima del 60 por ciento. Véalo de esta forma: de cada peso exportado, en México sólo 60 centavos se quedan en México, en Brasil y China son 90 y en Corea del Sur alrededor de ochenta.

De ahí que si los sectores altamente exportadores mexicanos crecen, su impacto vía el consumo de insumos de producción nacional y vía el pago a los trabajadores que ellos trabajan sobre la economía, es menor a lo que ocurre en el caso de los otros países. Esto explica por qué en la economía mexicana se observa un desacoplamiento entre el sector exportador y el resto de los sectores. En tanto que el primero no demanda lo producido por los demás (o lo hace en volúmenes pequeños) ni genera un alto valor agregado (retribuido en salarios), su capacidad de impulsar a la economía en su conjunto es muy reducida. Sonará drástico, pero esto es señal de que el sector exportador es en parte un enclave dentro de la economía nacional.

Ante este panorama, vale la pena ponerse a pensar si no es tiempo de que se recuperen medidas de política industrial que fomenten la integración entre los sectores altamente exportadores y el resto de la economía. De otra forma, difícilmente el sector exportador podrá hacer algo más por la economía en su conjunto que lo que ya hace. 

*gl