Pasto menos verde

Mientras que en México hay partidos políticos, líderes sociales, analistas y algunos líderes de iniciativa privada que se rasgan las vestiduras y van entre la ridícula intención de un cambio de modelo económico hasta una contrarreforma fiscal que plantee nuevamente el IVA en alimentos y medicinas, los números de la economía no se ven tan mal.

Sí, la economía necesita sacudir una serie de inercias negativas, que le han impedido crecer poco menos de 2% anual en promedio durante más de tres décadas. Que el problema no es discutir, con malas interpretaciones de los datos del INEGI, si el país está en recesión o no. El problema, sin duda, es el raquítico crecimiento de la economía.

Los panistas evidentemente quieren sacar raja política con su intento de hacer comparecer al secretario de Hacienda y revivir temas como el IVA en alimentos y medicinas. Líderes sociales como Alejandro Solalinde sólo hablan desde el desconocimiento, y otros, como Luis Foncerrada, lo hacen desde visiones absurdas del universo.

El martes, Luis Robles hizo un discurso que debería ser leído más de una vez por los líderes de la iniciativa privada. Dijo que el pesimismo es estéril y que no se deben dramatizar los efectos de la Reforma Hacendaria, puesto que es un peaje (que calificó de bajo) por la Reforma Energética.

En esta columna hemos señalado que el cambio en el sector energético es tan importante como la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, puesto que implica 1.5% más del PIB, es decir, si el país fuera a crecer 2.7% este año, con la reforma lo haría en 4.2 por ciento.

Y en alguna parte habló sobre no dramatizar la situación de la economía. Ayer mismo datos llegados de Estados Unidos establecieron que el país no se encuentra tan mal en comparación con nuestro principal socio comercial y principal potencia mundial.

Durante el primer trimestre de este año el país mal gobernado por Barack Obama decreció a uno por ciento, mientras que México tuvo un crecimiento muy pequeño, pero, al fin, 0.26 positivo es mejor que 1 negativo.

De acuerdo con las estimaciones a partir de esta revisión de la economía de aquel país sería posible que este año México creciera más que Estados Unidos y que estuviera ligeramente por encima de las estimaciones de la OCDE, Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional.

Sin decir que el país está perfecto y que no se requieren programas de mayor impulso para la economía, la realidad es que muchas veces se tiene que mirar que el pasto de los vecinos no sólo está menos verde que el nuestro, sino totalmente quemado por el frío.

Posiciones

Fernando Flores es uno de los pocos hombres con experiencia y capacidad que aún quedan en el sector de la aviación. Tiene una doble posición sobre el tema de la apertura de cielos.

En primer término, como presidente del gremio que agrupa a 70% de las líneas aéreas, no tiene una opinión, puesto que debe representar el interés de todos sus agremiados, algunos nacionales y otros extranjeros.

Como cabeza de Aeromar está pendiente del curso que tome lo que hasta el momento se sigue viendo como una idea que ha sido expresada públicamente por la Secretaría de Turismo y algunos gobernadores, que ha merecido algunos sondeos privados por parte de Comunicaciones y Transportes.

¿Para qué?

La reforma a las telecomunicaciones y la competencia económica está a punto de cumplir un año de haber sido promulgada y hasta el momento es realmente poco lo que ha pasado.

Los legisladores siguen dándole vueltas a la regulación secundaria de las telecomunicaciones a pesar de que debieron haberla tenido lista a más tardar el 9 de diciembre del año pasado.

Lejos de plantear una ruta crítica seria, muchos han preferido tirarse a las frivolidades y avanzar por rutas verdaderamente peligrosas. La Cámara de la Industria de Radio y Televisión, encabezada por Tristán Canales, advirtió otra vez sobre la intención de algunos de violar la Constitución y generar una competencia desleal en contra de los concesionarios.

Resulta que hay quienes quieren que las concesiones públicas y sociales puedan comercializarse, lo que no sólo sería una competencia indebida, sino algo mucho más grave. El artículo 28 de la Constitución establece que las concesiones públicas y sociales no podrán tener fines de lucro, y si comercializan sus espacios evidentemente tendrán lucro.

En la Comisión Federal de Competencia Económica, Alejandra Palacios y los suyos siguen jugando al mago con el estudio de competencia que debieron haber tenido listo a principios de marzo. La nueva alineación y nombre de la CFCE se dio al mismo tiempo que se creó el IFT, que sí cumplió con las tareas que le fijaron los legisladores en un lapso de 180 días.

En el organismo que preside Gabriel Contreras no ha dejado de dar resultados un solo día. El miércoles por la noche acordó la creación de tres comités, con cabezas claras, para dar seguimiento puntual a las regulaciones de preponderancia en los mercados de telefonía fija, móvil y televisión.

En estos comités, adicionalmente, se establece una gran transparencia hacia el resto de los concesionarios y la opinión pública.

En el lado oscuro está la CFCE. Palacios y su gente no sólo violaron esta obligación, sino que además han ido ajustando la fecha a su comodidad, puesto que ahora se sabe que en julio entregarán el estudio de competencia del sector financiero, que, como le hemos explicado en esta columna, no tendrá absolutamente nada novedoso y se tratará de poco más o menos de la compilación de trabajos de autoridades financieras y la Asociación de Bancos de México.

El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, ha dicho una y otra vez que es necesario aumentar la competencia en el país y su competitividad para crecer de una mejor manera. Órganos surgidos de esta intención son el IFT y la CFCE, pero mientras que el primero está dando resultados y tiene mucho más que un voto de confianza, el segundo ha sido poco menos que una vergüenza nacional.