Las personas de baja estatura viven más tiempo: científicos

CIUDAD DE MÉXICO.- Ahora, gracias a una nueva investigación publicada en la revista PLoS ONE, investigadores han descubierto por fin el secreto de la longevidad de las personas más bajas: está en sus genes.

Así es. Diversos estudios han examinado la relación entre la altura y la duración de vida de las poblaciones de todo el mundo, lo que sugiere que las personas más bajas generalmente viven vidas más largas, mientras que las personas altas tienen más probabilidades de tener ciertas enfermedades y desarrollar varios tipos de cáncer.

Con el uso de datos de un estudio observacional a largo plazo de los hombres estadounidenses de origen japonés en Hawai, los investigadores demostraron que un gen relacionado con la longevidad, llamado FOXO3, también está relacionada con el tamaño del cuerpo. Lo que es más, los investigadores encontraron que cuanto más baja una persona era, era más probable que fuera a tener una larga vida.

En uno de los estudios más grandes y de más larga duración del mundo en hombres de edad avanzada, los investigadores de la Universidad de Hawai en Manoa publicaron un análisis dividiendo más de 8,000 sujetos en dos grupos de altura -1.58 y 1.64 metros- y analizaron sus tasas de alturas, de salud y de muerte durante un período de 40 años.

"Las personas que medían 1.58 vivieron más tiempo", dijo el Dr. Bradley Wilcox, investigador y profesor en el Departamento de Medicina Geriátrica de la Universidad de Hawai. "También tenían niveles más bajos de insulina en ayunas y tuvieron menos cáncer".

Y mientras 1.58 metros "es muy corto (la altura media de un hombre estadounidense es de 1.79) los resultados fueron alentadores para los chicos bajos 'más altos' también: los datos mostraron que la vida útil y la estatura se vincularon de manera que entre más alto un hombre era, más corta su vida era así".

La investigación demostró, por primera vez, que el "gen de la longevidad" FOXO3 está relacionado con el tamaño del cuerpo humano. "Lo conocíamos en modelos animales de envejecimiento. Nosotros no sabíamos que era igual en los seres humanos", dijo el Dr. Willcox en un comunicado. "Tenemos la misma o una versión ligeramente diferente [del gen] en ratones, gusanos, moscas, incluso levadura ... es importante en la longevidad a través de todas estas especies".

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Mientras que el estudio podría potencialmente aplicar a las mujeres y otros grupos étnicos, los investigadores dicen que se necesitan más estudios para verificar si los resultados pueden generalizarse más allá de los hombres estadounidenses de origen japonés. Pero el Dr. Willcox parece confiar en que lo hará.

"Las personas no son tan diferentes. Genéticamente, somos todos muy similares", dijo a HuffPost. "Si este efecto se aplica a organismos modelo, de lo que puede estar bastante seguro de que se aplica a otros seres humanos porque los humanos son mucho más similares entre sí".

*livm