Rodrigo Pacheco

Suma de Negocios

Rodrigo Pacheco

6 Sep, 2014

Walmart de México y la confianza

Walmart es una de las compañías más formidables de los últimos 50 años, se trata de una organización que abarca 27 países que da atención a 245 millones de personas cada año a través de sus 11 mil unidades. Si Walmart fuera un país tendría el PIB per cápita más alto del mundo ya que sus dos millones 200 mil empleados producen ventas anuales por 473 mil millones de dólares que equivalente al PIB de un país mediano como Argentina.

Dentro del universo Walmart, la operación mexicana es uno de los grandes centros de gravedad para la compañía, sin embargo, también ha sido el origen de una de las peores crisis para la empresa, que dirige Scot Rank.

El problema se dio a conocer el 21 de abril de 2012, cuando el periódico The New York Times publicó una extensa investigación en la que se daba cuenta de muchos actos de corrupción en México que sucedían a la par de la expansión de sus tiendas y lo que la obligó en ese año a replantear el ritmo de expansión. Más allá de que las investigaciones tanto en Estados Unidos como en nuestro país no generaron acusaciones o sanciones, tuvo que haberse logrado una profunda crisis en la cultura interna de la compañía en México, que tiene como sus principales pilares la ética y la austeridad, bases que fueron plasmadas por Sam Walton desde su fundación. Desde entonces hasta ahora la compañía ha fortalecido sus áreas de auditoría interna para evitar episodios como el anterior, aunque el daño que ocasionó en su cultura interna tardará años en cicatrizar totalmente.

Es difícil estimar cuál fue el impacto que tuvo el escándalo entre los consumidores, pero ese 2012 la compañía cerró con un avance de 3.8 por ciento en unidades abiertas por más de un año. Observando los resultados tal parece que entre los consumidores pesan más los precios que la reputación de la compañía.

En 2013 comenzó otra crisis, para la empresa y para el país, que se manifestó en la debilidad del consumo, lo que se tradujo en una caída del Índice de Confianza del Consumidor de 9.3 por ciento a tasa anual en diciembre del año pasado, mientras que los resultados de Walmart de México y Centroamérica (Walmex) a unidades iguales reflejaban una caída en dicho año de 1.3 por ciento.

2014 no cumplió con la expectativa y el consumo se debilitó como lo refleja el Índice de Confianza del Consumidor, que se publicó ayer con respecto a agosto mostró una caída de 7.9 por ciento a tasa anual. No obstante, Walmex se separó de la tendencia y en agosto registró un crecimiento en ventas mismas tiendas de 3.5 por ciento, el nivel más alto desde marzo de 2013.

En una presentación que hizo a inversionistas Scot Rank, presidente ejecutivo y director general, señaló que el camino hacia adelante está apuntalado en lograr: un surtido más atractivo, capacitar a compradores, mejorar la experiencia de compra en perecederos, electrónica y bebés, dar la vuelta a Sams, impulsar al banco así como al comercio electrónico.

Buena parte del futuro del mediano y largo plazo de Walmart en México y en el mundo radica en el comercio electrónico. Scot Rank dijo que en México habrá crecimiento en esa área, sin embargo, la Profeco levantó focos rojos debido a que sancionó a la compañía porque encontró que los contratos de comercio electrónico están desproporcionadamente inclinados a favor de Walmex dejando desprotegido al consumidor. Walmex no puede darse el lujo de lastimar la confianza de sus consumidores incluso en algo tan proporcionalmente pequeño para su operación como el comercio electrónico o el banco.

Discrecionalidad el reto

En otro tema, uno de los retos que tiene México y que quedó reflejado en el Índice de Competitividad del Foro Económica Mundial es la discrecionalidad en el sector público y privado, para muestra un botón. En la jefatura del SAT tienen información que la administración central AGACE (Administración de Comercio Exterior) la encargada de programar auditorías de nombre Yolanda Aguirre “más conocida como La Dálmata”, da órdenes a qué empresas auditar y a cuáles no.

Rodolfo Torres, actualmente alto funcionario de Banamex, quien en el sexenio antepasado fue administrador de la aduana en Ciudad Juárez, Pantaco, y tiene infinidad de quejas del Órgano Interno de Control; sigue estando muy ligado a José María Zubiría, extitular del SAT y actualmente es director corporativo de Administración de Banamex, éstos, nos aseguran, están implicados en el famoso caso Oceanografía y La Dálmata también pertenece a la misma cofradía.

 

 

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