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Ciudad de México.- Para impulsar la compra de vehículos en el país, la industria automotriz ha mantenido prácticamente “inamovibles” los precios de los automóviles, los cuales registran una inflación de 0.84% en lo que va del año.
En entrevista con Notimex, el director general Adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), Guillermo Rosales Zárate, aseguró que “hoy en día en términos reales es más accesible obtener un vehículo que en el pasado”.
Explicó que de acuerdo con datos obtenidos, a julio pasado la inflación promedio en los vehículos fue de 0.84%, mientras que el Índice Nacional de Precios al Consumidor en general registró un incrementado 4.0 % en el mimo periodo.
“Esto da relación de cuatro a uno, es decir, que mientras que el promedio de precios crece al 4.0%, el de los vehículos se incrementa menos de 1.0 %, lo que apuntala los incentivos de la industria automotriz para motivar la venta de vehículos”.
Ello, indicó, es muestra de los esfuerzos que realiza la industria automotriz para aumentar la venta de unidades en el mercado interno, sumado a promociones exclusivas de cada marca o distribuidor.
De ahí, detalló, que la industria contribuya a los favorables resultados de ventas que se obtuvieron en los dos últimos meses cuantificados, luego de que en agosto pasado el aumento en ventas superó 17 por ciento.
Respecto a la cifra acumulada, en los últimos 12 meses, se tiene que en las ventas del último año, lo que se ha vendido entre septiembre de 2013 y agosto 2014 asciende a un millón 086 mil unidades, muy cerca del pronostico esperado para fines de año.
Así, la tasa mensual de crecimiento es de 1.45%, por lo que las ventas acumuladas tienen un claro repunte en el último bimestre julio-agosto, luego del estancamiento de los primeros meses del año.
El director de la AMDA consideró que luego de los malos resultados del primer trimestre del año, los cuales estuvieron influidos por una cuestión de coyuntura como los cambios fiscales que entraron en vigor el 1 de enero de este año, generó incertidumbre, la cual prácticamente se desvaneció hacia la mitad del año.
Y es que, dijo, prácticamente lo que sucedió fue una postergación de las compras de los primeros meses del año, y hoy los buenos resultados hacen pensar que los cuatro meses que faltan para terminar 2014 serán de recuperación, impulsado en gran parte por el sector.
“A ocho meses del año, lo que sucede es una adecuación de los consumidores. Hay fuertes incentivos por parte de productores y distribuidoras para cambiar las cosas”.
El directivo aseveró que aunado a la oferta de crédito por parte de las financieras de marca y bancos, con plazos y tasas históricamente favorables para los consumidores, se suma una mejora de las condiciones de la economía nacional.
Jbf
