Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

4 Oct, 2014

Aspectos interesantes de la encuesta sobre seguridad

Durante la semana, el INEGI dio a conocer la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2014 (ENVIPE). El análisis de algunos resultados nos lleva a conclusiones diferentes a las que nos dicen las autoridades. Además nos revela la poca confianza en las instituciones.

Es conveniente entender la metodología y lo que mide la ENVIPE. Esta encuesta se hizo en 95 mil 516 viviendas del país entre marzo y abril de 2014. Por el tamaño de muestra y por la cobertura geográfica sus resultados son un buen termómetro de lo que le ha sucedido a la población.

Al ser una encuesta de victimización incluye aspectos que afectan al ciudadano común y corriente como el robo (con y sin violencia), secuestro, fraude y extorsión, entre otros. No incluye otros delitos como la delincuencia organizada y narcotráfico.

Un primer asunto tiene que ver con que la ENVIPE ratifica que la principal causa de preocupación que perciben los mexicanos es la inseguridad con una mención de 58.1%. Esta causa esta seguida por el desempleo con 46.1 por ciento.

Hay un aspecto más preciso que tiene que ver con la percepción sobre la seguridad pública. En este caso el resultado fue que 73.3% de la población mayor a 18 años consideró en 2014 que vivir en su estado es inseguro a consecuencia de la delincuencia. Este dato contrasta con el de 2012 que era de 66.6 por ciento.

Un segundo asunto tiene que ver con el tipo de delito que más ha aumentado. El de mayor incidencia es el robo en la calle o en el trasporte público con una participación de 29.6% en el total y que aumentó 22.4% entre los resultados de 2013 y 2014. El segundo de mayor incidencia con 23.6% es el de extorsión. Cabe señalar, que este tipo de delito aumento en 29.1% en el periodo.

Por lo que respecta al secuestro de algún integrante del hogar, éste aumentó. El secuestro de menos de 24 horas ganó participación y es casi dos terceras partes del total.

A partir de los resultados, la ENVIPE hace una estimación de victimización llevando a un número de 28 mil 224 víctimas de delito por cada cien mil habitantes. En 2010 la estimación era de 23 mil 993 por cada 100 mil habitantes. Estos datos son consistentes con los resultados anteriores.

En cuanto a la parte geográfica se aprecia una dispersión muy grande entre los estados. Este comentario se hace utilizando el indicador llamado Tasa de Víctimas por 100 mil habitantes. En general, los estados del sureste tienden a tener una menor tasa de victimización. Ahora bien, la tasa más elevada es en el Estado de México con 47 mil 778 víctimas por cada 100 mil habitantes. Es decir, el lugar más inseguro está alrededor de la capital.

Por otra parte, en cuanto a la aplicación de la ley lo que se tiene es que ésta es muy pobre. Lo anterior se fundamenta en lo que llaman la “cifra negra”, es decir de los delitos cometidos en los que no hubo denuncia o no se inició averiguación previa. Este indicador es de 93.8 por ciento.

De las razones para no denunciar, dos terceras partes están relacionadas con la autoridad. Esas respuestas no se deben a su eficiencia ni a su diligencia.

Las señales que da la “cifra negra” son muy malas. Para quien fue víctima del delito le hace pensar que el Estado no cumple con una de sus funciones básicas. Para los victimarios le da la señal de que es muy poco probable que tengan una consecuencia por su mala acción. Es decir, los incentivos institucionales están para que el problema se mantenga.

Por último, se hace una estimación de que la inseguridad tuvo un costo de 1.27% del PIB.  La estimación incluye los costos económicos del delito y los costos de las medidas preventivas, entre otros. El tema relevante que no incluye es lo que no se hizo por la inseguridad, por ejemplo, invertir en un negocio.

Concluyendo, en cuestión de la seguridad del ciudadano normal lo que decimos a través de la encuesta es que las cosas no están mejor, refleja problemas con nuestras instituciones y aunque no hay un dato duro sí es algo que detiene mucho la actividad económica. Es decir, el principal problema que tenía y tiene México es el de seguridad.

                *Director general del FUNDEF
                guillermozamarripa@itam.mx

 

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