Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

18 Oct, 2014

Desendeudamiento en los países más afectados por la crisis

Cuando uno estudia las crisis financieras el común denominador es que hay un aumento en el endeudamiento previo. Para estar en condiciones de reactivar la actividad financiera, se tiene que reducir dicho endeudamiento con sus efectos en el crecimiento y bienestar de la economía.

El argumento anterior aplica a crisis de países por su deuda soberana excesiva y a crisis bancarias. El primer tipo de crisis tiene que ver con el apalancamiento excesivo del sector público. El segundo tipo de crisis tiene que ver más bien con el endeudamiento del sector privado, tanto de empresas como de familias.

Cuando se da una situación de endeudamiento excesivo que lleva a una crisis hay básicamente cuatro opciones para poder reducir el endeudamiento. Ésta es una condición importante para regresar a una situación de normalidad en cuanto al dinamismo de la economía.

Por ejemplo, el caso de Japón en los 90 no entró a un proceso de desendeudamiento y reconocimiento de pérdidas y tuvo un largo periodo de estancamiento económico.

La primera manera, que es la que idealmente todos quisieran, es que la deuda se mantenga constante en términos de valor y que más bien se de un crecimiento del ingreso y que con esto disminuya el apalancamiento relativo. Si bien lo anterior es lo más deseable, esto casi nunca ocurre.

La segunda es que se asuman pérdidas por los acreedores y que con ello se lleve a un desendeudamiento gradual de la economía como un todo.

Para el caso de una crisis bancarias el asumir pérdidas quiere decir que los créditos de acreditados que no son viables tengan algún mecanismo de quiebra y que se asuman las pérdidas por parte de los intermediarios y de los inversionistas.

Este proceso, que es un tipo proceso de depuración en la economía se da de manera gradual en el tiempo y lo que hace es disminuir la cantidad agregada de deuda. Esto lleva a que se dé el fenómeno de desendeudamiento.

La tercera se da por un proceso en el que empresas, familias y gobierno destinan una mayor proporción de sus ingresos a pagar la deuda y con eso tener un proceso de desendeudamiento gradual.

Esto se da a pesar de llegar a estar en una situación en la que el nivel de ingreso permanece sin cambios relevantes durante periodo de referencia.

La cuarta es una muy particular y tiene que ver con que las condiciones de la economía sean tales que se dé un proceso en el que las tasas nominales son menores a la inflación y por lo tanto se tienen tasas reales negativas.

Lo que sucede en este caso es que aunque la deuda nominal se mantiene, en términos reales baja y al compararla contra ingreso o contra PIB el nivel de apalancamiento se reducirá.

Ahora bien, para que se den estos procesos que se llaman de “represión financiera” tienen que darse una serie de condiciones en el mercado.

Por ejemplo, del lado de los inversionistas tienen que haber restricciones estructurales, legales o condiciones de mercado o de otro tipo para que estén dispuestos a mantener su dinero en instrumentos que les den tasas reales negativas.

Este proceso implica una transferencia de riqueza de los ahorradores a los deudores. Al final se da lo que los economistas llamamos un juego de suma cero.

Analizaré brevemente el contexto actual de las dos zonas que tuvieron los efectos más profundos de la crisis: Estados Unidos y Europa.

En Estados Unidos se ha dado un proceso dual. Por una parte la deuda del gobierno ha ido en aumento, pero por la otra su sistema financiero ha disminuido su apalancamiento y su sector privado ha reducido su endeudamiento.

Por lo anterior, hoy están en una situación en la que el sector privado está en condiciones más ventajosas es esta variable y pueden retomar un dinamismo en la economía. Esto da un buen contexto porque ya se prevén para 2015 aumentos en tasas.

Por otra parte, en Europa los bancos siguen con una alto nivel de apalancamiento y el nivel de endeudamiento de familias y empresas ha bajado apenas se ha empezado a reducir cuando se mide como porcentaje del PIB. Por otra parte, han sido resistentes al proceso de reconocimiento de quebrantos por el sobreendeudamiento.

En resumen, se describió un proceso por el que tienen que pasar la economías muy endeudadas y se aportó evidencia de fundamentales que explican por qué Estados Unidos va mejor que Europa.

*Director General del FUNDEF
guillermozamarripa@itam.mx

 

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube