José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

14 Nov, 2014

¿Coberturas suficientes? Parece que sí

La mezcla mexicana se derrumba. Su precio baja a 70.60 dólares el barril, sin piso alguno que pueda sostenerlo, y en medio de un mercado petrolero con sobreoferta por Arabia Saudita y Rusia, así como por falta de consumo por la desaceleración mundial.

El contexto energético no es halagüeño. En este escenario, ayer el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, informó que la cobertura petrolera de México por fin concluyó para 2015. Aun así el temor está ahí. La tercera parte de los ingresos públicos mexicanos todavía dependen del crudo y, sin una buena cobertura, quedamos a la deriva de los posibles ajustes que se tendrían que dar en el gasto.

A los 76.4 dls entra la cobertura ¿alta o realista?

Para el año 2015 la cobertura del precio del petróleo quedó en 76.4 dólares el barril. 

Es la negociación de coberturas más grande que ha realizado el gobierno mexicano. Se gastaron en la contratación de operaciones con 43 instituciones alrededor de 773 millones de dólares.

Para algunos, la cobertura quedó un poco encima de lo predecible, pues hoy en día la mezcla mexicana ya se encuentra en 70 dólares el barril y la cobertura es de 76.4 dólares el barril.

Recordemos que la cobertura podría entrar desde el primer minuto del próximo año. Es una cobertura contratada por la Secretaría de Hacienda, y donde el Banco de México fungió como agente financiero del gobierno. Estaría cubriendo 228 millones de barriles (todos son datos de Hacienda).

Los dos dls sin cubrir vienen del Fondo de Estabilización

El mercado petrolero había estado bien en los últimos años. Nos habíamos olvidado de los ajustes del gasto, de los problemas en el mercado energético y más bien vivíamos precios por encima de los 100 dólares el barril de crudo. Sólo en 2009 habíamos utilizado las coberturas.

Para el año 2015 el contexto puede cambiar. Parecen aproximarse nubarrones en el mercado energético: más producción y menos consumo.

El gobierno mexicano, al ver el nuevo escenario, decidió contratar las mayores coberturas desde que inició su adquisición, por allá de los tiempos foxistas (con Francisco Gil Díaz siendo secretario de Hacienda).

La cobertura entrará por debajo de los 76.4 dólares el barril. Pero habrá dos dólares del barril que quedan sin cubrirse, por lo cual se tienen reservados siete mil 944 millones de pesos de una subcuenta específica del Fondo de Estabilización de Ingresos Petroleros.

El Fondo queda con 33 mil 641 mdp

Las coberturas son necesarias. Son un seguro por si el precio del petróleo sigue a la baja y entonces se hace un boquete en la tercera parte de los ingresos públicos.

El dinero para comprar las coberturas salió del Fondo de Estabilización de los Ingresos del Petróleo (que ahora se llamará Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios). En el Fondo siguen existiendo 33 mil 641 millones de pesos para lo que se ofrezca… por si sigue bajando el precio del energético.

Desde luego, nos gustaría depender menos del petróleo. Pero para ello necesitamos otras fuentes de financiamiento de los ingresos públicos, como bien podría ser el obtener ingresos de quienes hoy no pagan impuestos.

Buen Fin, compra de mil pesos

El Buen Fin llega a su cuarta edición y justo cuando se necesita: estando el consumo privado deprimido.

Las baratas en esta edición prometen mejorar y no sólo centrarse en la estrella de las ventas: las pantallas digitales, sino también en muchos otros productos con ofertas que pueden ir de 50 hasta 70 por ciento.

En Estados Unidos el Black Friday funciona porque hay grandes ofertas, de hasta dos por uno. Allá se trata de terminar con los inventarios de primavera-verano, para dar paso a las compras navideñas de otoño-invierno.

En México, aunque no tenemos estaciones tan marcadas, lo cierto es que las modas, por lo menos en ropa, ya dependen de las estaciones. Así que también aquí podríamos ver este tipo de descuentos.

Esperemos ver los descuentos fuertes. Esperemos que las tiendas no den las mejorías en el precio en puntos para amarrarte a la misma tienda. Esperemos que esta vez se alcance una cifra mayor de los mil pesos por persona.

El Buen Fin tiene el apoyo de las autoridades. Viene la lotería fiscal, donde usted necesita guardar sus tickets de compra o facturas para que el fisco le pueda llegar a abonar el descuento del impuesto.

También viene el apoyo a la burocracia: les adelantaron su aguinaldo.

Vamos a ver si este Buen Fin puede darle un impulso a las alicaídas ventas internas que hemos tenido este año que, por cierto, por fin empiezan a recuperarse.

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