En gas natural: ¡urge enmendar la plana!

Y mire lo que son las cosas. Después de haber sido aprobado hace dos plenos y de haber sido enviado, desde la semana pasada a la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer), que dirige Virgilio Andrade, ayer ésta subió la opinión de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), cuyo pleno preside Alejandra Palacios, sobre el contrato marco de compra-venta general, compra-venta de primera mano y las condiciones generales para la comercialización, todos ellos de gas natural.

La opinión de la Cofece es tajante y la CRE tendrá que enmendar la plana. Si la revisan a detalle, podría ser el analgésico que evite los dolores de cabeza. El órgano antimonopolio establece, de entrada, que ambos anteproyectos contienen disposiciones que “podrían tener efectos negativos en el proceso de competencia y libre concurrencia en el mercado de gas natural…” (sic).

Observa dos grandes escollos. El primero está en los mecanismos que permitan tanto a compradores, como adquirientes, cambiar fácilmente de proveedor. Para el caso de los compradores, el anteproyecto señala que el vendedor —que podría ser Pemex o cualquiera de sus empresas productivas subsidiarias— dará condiciones especiales a los compradores con contrato superior a cinco años y con consumo igual o mayor a cinco mil gigajoules de gas por día, y la Cofece opina que esa “magnífica” propuesta, podría “distorsionar la decisión de compra”. Sugiere que se definan esas condiciones especiales y detallen con claridad en el anteproyecto y, sobre todo, que no se vinculen al contrato macro. Eso es, coincide con el sector privado.

En las condiciones de contrato, tanto para ventas de primera mano como comercialización, detectó puntos que pudieran dificultar innecesariamente la terminación del contrato y por tanto, la posibilidad de cambiar de proveedor.

La razón es que el anteproyecto de la CRE incorpora como cláusulas excluyentes para renegociar puntos como las fluctuaciones en el precio del gas natural, mejores oportunidades de compra o venta del energético, incrementos salariales derivados de una disposición legal y aumento en los impuestos.

Al respecto, la Cofece los califica como puntos restrictivos, ante lo que recomienda que se exprese de manera especifica todos los supuestos “que podría dar motivo a la renegociación, en lugar de establecer las excepciones…”. Ven. Ahí la migraña cedería un poco.

En el punto de las normas para rescindir el contrato, la Cofece identificó “que no existe proporcionalidad en los supuestos de recesión, ya que estos son más flexibles para Pemex y más rigurosos para los compradores y los adquirientes. Ante lo que recomienda política parejera.

El otro gran punto es sobre los precios del gas. Para el caso de las ventas de primera mano, el anteproyecto establece que Pemex podrá otorgar descuentos “por iniciativa propia o a solicitud del adquiriente cuando los criterios de aplicación estén previstos”, la Cofece sugiere definir de forma clara los criterios para aplicar los descuentos y “establecer que todos los compradores que cumplan con ese criterio podrán acceder al mismo tipo de descuento, con el objeto de reducir cualquier espacio de discrecionalidad por parte de Pemex”, y ¡mire que hay toda clase de antecedentes!

Sobre la regulación de los precios máximos, menciona que tal y como lo establece la Ley de Hidrocarburos, deben reflejar el costo de oportunidad y las condiciones del mercado internacional, ya que considera que un precio artificialmente bajo e inducido por la regulación, podría generar una ventaja indebida a Pemex.

Por último, en el rubro de comercialización, la Cofece identifica omisiones importantes en el catálogo de precios y contraprestaciones que pudieran afectar la competencia.

¡Ah!, por cierto, sobre lo que comenté ayer en este espacio respecto a que siendo comprador de gas natural en una renegociación ante una mejor oferta , Pemex tendría el derecho preferencial para igualar la oferta, “se considera que el simple hecho de dar preferencia a Pemex, con respecto a otros proveedores podría otorgarle una posición preferencial en el mercado”, por ello sugiere eliminarlo, “así como cualquier ventaja a favor de cualquier agente económico en particular”.

¡Para mí que el anteproyecto busca matar al mercado antes de que arranque y volverle a dejar el monopolio a Pemex!, ¿o qué no? Pregúnten en Concamin y Canacintra a ver qué opinan.

De Fondos a Fondo

En su reciente visita a México, Ana Botín, la presidenta de Grupo Santander, habló de que va a impulsar al interior del grupo un cambio cultural en serio en el corporativo financiero global, que plantee una relación distinta con el cliente para fidelizarlo, basada en tres pilares “personal, simple y justa”.

De eso se trata cuando anuncia que en México se invertirán 15 mil millones de dólares en los próximos cuatro años, todos en crédito tanto para impulsar el financiamiento de infraestructura derivada de reformas estructurales como a pymes.

Y el apapacho para la filial de Santander, que encabeza Marcos Martínez, no sólo fue venir a México y entrevistarse con el presidente Enrique Peña, con el titular de la SHCP y con el gobernador del Banxico, Agustín Carstens, sino que ratificó que no habrá ajustes y está contenta con lo que se hace en el país, en particular, destacó el profesionalismo del cuerpo directivo y del consejo del banco en el país.

Tuvo reuniones con el consejo en México, con empresarios de pymes de todo el país, con quienes se habló de organizar misiones comerciales apoyadas por el banco a EU y Sudamérica, y también se reunió con empresarios del calibre de Carlos Slim, Eduardo Tricio, Daniel Servitje y Armando Garza. O sea, ¡agenda completa!

Sume usted a partir de hoy un nuevo jugador en el segmento de las aguas premium. Se trata de agua Claret, que lanza hoy la empresa Manantial San Judas Tadeo, que dirige Gerardo Lapeluz, para lo cual destinaron inicialmente poco más de cinco millones de pesos.

Esta nueva agua es de origen único del Nevado de Toluca, justo por ello la ponen en circulación bajo el sello “con denominación de origen”. Entre los principales competidores de aguas premium anote a las marcas Evian, Vis, Voss, Fiji, B’ui, Perrier y Pellegrino; estas dos últimas marcas de Nestlé.

Mire, la firma consultora Euromonitor estima que durante 2013 el mercado global de agua embotellada tuvo un valor de 10 mil 036 millones de dólares (mdd), y el rubro denominado Premium fue por alrededor de 10% de ese total, cifra nada despreciable.

Manantial San Judas Tadeo, empresa 100% mexicana, va por cubrir la mayor parte de los puntos de distribución en el Valle de Toluca y Valle de México, focalizando sus esfuerzos a consumidores premium. La meta es ser uno de los cinco primeros jugadores de la categoría de aguas embotelladas premium en un periodo de tres años.