México es el mejor país para Pixar

México se ha convertido en el mercado más receptivo para Pixar en los últimos años
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Jim Morris, CEO de Pixar, dijo ayer a Excélsior que seguirán inviertiendo en los próximos meses para mejorar su tecnología. Foto: David Hernández
Jim Morris, CEO de Pixar, dijo ayer a Excélsior que seguirán inviertiendo en los próximos meses para mejorar su tecnología. Foto: David Hernández

CIUDAD DE MÉXICO, 10 de diciembre.- México se ha convertido en el mercado más receptivo para Pixar en los últimos años, tema que a Jim Morris, CEO de la compañía que hace 20 años creó la primera película hecha totalmente en computadoras, le genera satisfacción y ganas de seguir invirtiendo en mejorar su tecnología para no perder este mercado.

 El público mexicano ha sido uno de los más altos en base per cápita, y siempre apoyan los trabajos que llevamos a la pantalla. De hecho, estamos muy felices de celebrar 20 años del lanzamiento de la primera película computarizada, en este país”, dice durante su visita a México.

Morris, quien concedió una entrevista a Excélsior, asegura que el éxito para crear una buena película, que deje ganancias y que impulse a su empresa a ser competitiva, es elegir a gente que se apasione en su trabajo, que sean profesionales, conozcan lo que hacen, pero sobre todo que les guste.

  Cuando decidimos hacer una secuela de filmes tan exitosos como Toy Story, no se hace muchas veces por ganar dinero, sino porque la gente la pide, y claro, implícitamente viene el negocio”, asegura.

Para Jim Morris, quien asegura que hacer una secuela es mucho más complicado que hacer una película original, la tecnología es la columna vertebral de su negocio. “Cuando ya tienes el mundo hecho y personajes establecidos, el reto es trabajar para sorprender con lo predeterminado, y ahí es donde entra el trabajo de un director que se apasiona en su trabajo. La tecnología siempre ha estado en el corazón de nuestra compañía, la fundó un grande del sector.

 Seguimos creando mucha tecnología de la que utilizan hoy grandes artistas de este y otros sectores. Nos enfocamos en crear software, herramientas que le permiten al artista individual hacer más, expandir su alcance creativo y poner más en la pantalla al servicio de la imagen”, dice el CEO de Pixar, quien adelanta que están mejorando las herramientas que hoy tienen en sus manos.

Los próximos lanzamientos de sus secuelas serán Toy Story 4 en 2016, Los Increíbles 2 y Cars 3, éstas aún sin fecha.

Pixar revoluciona la tecnología

Jim Morris, CEO de Pixar, asegura que se enfocan en crear software y desarrollar la creatividad

En 2015 se celebrarán 20 años de que los juguetes de Toy Story cautivaron al mundo, especialmente a México, iniciando una nueva era en la industria de la animación por computadora.

Jim Morris, CEO de Pixar, quien en 1995 trabajaba para la compañía Industrial Light & Magic, sabía que cada estreno de una película de la firma que hoy preside dejaba a todos con la sensación de que sus creadores estaban unos cuantos pasos por delante de los demás, debido a la tecnología que usaban.

Hoy, Morris se dice afortunado de trabajar en Pixar y formar, desde 2005, parte de un equipo que formó quien considera uno de los mayores genios de la tecnología: Steve Jobs.

Son las nueve de la mañana, y el frío que comienza a ceder en la pequeña sala donde el ejecutivo recibe a Excélsior, lo lleva a decir que esto es muestra de la calidez con la que México recibe las películas de Pixar, lo cual lo ha convertido en el mercado más receptivo para la compañía.

 El público mexicano ha sido uno de los más altos en la base per cápita, y siempre apoyan los trabajos que llevamos a la pantalla. De hecho, estamos muy felices de celebrar los 20 años del lanzamiento de la primera película computarizada en este país”, dice.

Morris, quien concedió una entrevista a Excélsior, asegura que el éxito para crear una buena película, que deje ganancias y que impulse a su empresa a ser competitiva, es elegir a gente que se apasione en su trabajo, que sean profesionales, pero sobre todo que les guste lo que hacen.

Cuando se decide hacer una secuela de filmes tan exitosos como Toy Story, no se hace muchas veces por ganar mucho dinero, sino porque la gente la pide y, claro, implícitamente viene el negocio”, asegura.

Secuelas son complicadas

Para Morris, quien asegura que hacer una secuela es mucho más complicado que hacer una película original, la tecnología es la columna vertebral de su negocio.

“Cuando ya tienes el mundo hecho y personajes establecidos, el reto es trabajar en sorprender con lo predeterminado, y ahí es donde entra el trabajo de un director que se apasiona en su trabajo. La tecnología siempre ha estado en el corazón de nuestra compañía, la fundó un grande del sector.

“Seguimos creando mucha tecnología de la que utilizan hoy grandes artistas de éste y otros sectores. Nos enfocamos en crear software, herramientas, que le permiten al artista individual hacer más, expandir su alcance creativo y poner más en la pantalla al servicio de la imagen”, dice el CEO de Pixar, quien adelanta que están mejorando las herramientas que hoy tienen.

La novedad, asegura Morris, la complementa y enriquece la dirección tecnológica en tercera dimensión hacia la cual parece orientarse Pixar, desde 2006 integrante del poderoso conglomerado Disney, que pagó por el ciento por ciento de sus acciones nada menos que siete mil 400 millones de dólares.

Luego de dar a conocer los próximos lanzamientos de la compañía: Toy Story 4 para 2017, Los Increíbles 2 y Cars 3, estas dos últimas aún sin fecha, asegura que buscarán ampliar el negocio con la continuación de Buscando a Nemo, que llevará como título Buscando a Dory, en junio de 2016. Para 2015 traerán Un gran dinosaurio e Intensa-mente.

“No estábamos planeando hacer otra película de Toy Story, pues todos pensamos que había sido muy buena la trilogía y que la historia era muy completa. Algunos ejecutivos como Andrew Stanton (Buscando a Nemo) y John Lasseter (Toy Story) hicieron un acuerdo de no hacer otra película a menos de que alguien presentara una idea que todos adoraran. Pasó el tiempo, se presentó la idea y a John Lasseter le encantó tanto que decidió quitarse la gorra de ejecutivo para ponerse tras la dirección del mismo.

“Esta nueva entrega tiene muchos de los personajes que vimos y amamos en Toy Story, pero es como un nuevo capítulo. No es exactamente una continuación de la historia y esta vez  habrá una historia de amor. Es todo lo que puedo decir por ahora”, precisó.

La presión importa

Morris, quien sonríe al asegurar que no son perfectos y que se batalla antes de lanzar un nuevo estreno a cartelera, asegura que siempre tratan de hacer la mejor película posible, “y es cierto, tenemos muchas presiones”.

“Hay que ser persistente. Se necesita mucho trabajo para  hacer una película de este tipo,  con computadoras. Se repiten una y otra vez hasta que quede lista para su estreno. El compromiso es otro concepto que debe definir a Pixar en este tema de trabajar con tecnología”.

Respecto a que ahora hay una serie de estudios de animación que también cuentan ya con herramientas tecnológicas que pueden ofrecer buenas películas animadas hechas también en computadora, como el caso de Dreamworks, Morris asegura que la llegada de más competencia los pone a pensar en que deben mejorar, que deben hacer mejores películas.

“A partir de que se lanzó Toy Story, el mundo de la animación cambió. De hace 20 años acá, cuando sólo una o dos películas salían al año, hoy hay una gran gama de ofertas que son muy buenas. Se podría pensar que eso es malo, pero para nosotros, el que haya un mercado en crecimiento en este segmento nos ayuda a mejorar y a tener más clientes a quienes ofrecer productos de calidad.

Este año, al menos en EU, se han lanzado 18 largometrajes, lo cual es un dato que muestra el crecimiento del sector de la animación en el cine.

 

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