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CIUDAD DE MÉXICO.- Para 2015, los precios de los alimentos registrarán un repunte de por lo menos diez por ciento como consecuencia de la apreciación del dólar frente al peso, del incremento de la gasolina y de la volatilidad de los costos de los granos y oleaginosas, así como de los productos pecuarios, lo que se traducirá en un repunte en la inflación, estiman analistas.
Juan Carlos Anaya, director general de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), co-mentó que las compras al exterior, tanto de maíz amarillo, como trigo y oleaginosas, tendrán un mayor costo para los consumidores como consecuencia del alza del dólar.
Vamos a tener una afectación en los precios que se va a traducir al consumidor”, sostuvo.
El especialista comentó a Excélsior que en el tema pecuario seguirán las presiones de los eleva-dos costos de la carne de res, la cual registra precios récord como consecuencia de los bajos inventarios, tanto en México como en Estados Unidos. El valor de las compras de carne de cerdo, pierna y muslo, que hace nuestro país a Estados Unidos, también tendrá un repunte como resultado de un tipo de cambio elevado, lo que se tradu-cirá en un incremento en la inflación”, agregó.
Por su parte, Alfredo Neme Martínez, presidente de la Asociación Mexicana para un Comercio Justo, consideró que para 2015 se espera un incremento en el costo de la canasta básica de más de diez por ciento, derivado de la revaluación del dólar y del incremento de la gasolina.
El ajuste de diez por ciento de los alimentos impactará el poder adquisitivo y en el dato de inflación”.
Julio A. Millán, presidente de Consultores Internacionales, comentó que las importaciones de algunos granos y oleaginosas, que superan 60 por ciento, incrementarán su precio por el ajuste del dólar frente a la moneda mexicana.
Los mayores ajustes se esperan para el maíz amarillo que se destina para el sector pecuario, trigo y soya".
En diciembre pasado, la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) aprobó un aumen-to de 4.2 por ciento o 2.81 pesos al salario mínimo en México, para ubicarlo en 70.10 pesos para la zona económica A, que comprende el Distrito Federal, mientras que para la zona económica B, el minisalario será de 66.45 pesos, el cual entra en vigor a partir de hoy. Al respecto, Millán consideró que el salario mínimo no logrará cubrir el incremento de precios de alimentos.
El especialista recomienda al gobierno federal incrementar la producción de los granos y oleaginosas de los cuales dependemos del exterior y cuidar la cadena de suministro para evitar la especulación, como sucedió en 2014 con algunos productos como el limón y el jitomate. Rafael Gamboa González, director general de Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agri-cultura (FIRA), reconoció que en 2014 el alza de los precios de los productos agropecuarios ejer-ció presión en el dato de inflación general.
El funcionario explicó que el gobierno federal trabaja en una estrategia para disminuir la volatilidad de los precios agropecuarios, y aclaró que al final de la administración se verá el resultado.
Estamos trabajando en varias acciones para disminuir la volatilidad en los precios de los productos agropecuarios, cuya oferta a veces se contrae por fenómenos climatológicos o cuestiones sanitarias, como sucedió con la gripe aviar o con la diarrea epidémica porcina, que provocó alzas en el pollo y huevo y en la carne de cerdo, respectivamente. Lo mismo sucedió con la plaga denominada dragón amarillo, que afectó la producción del limón y provocó que el cítrico llegara hasta 70 pesos el kilogramo".
Gamboa explicó que para atender estos problemas buscan diversificar la producción.
