Cinco consecuencias negativas de trabajar en la noche

Ciudad de México.- Hay empleos que por su naturaleza, se necesitan ejecutar de noche, también, existen personas a las que les agrada más trabajar de noche, ya sea porque tienen mayor concentración, o identifican mejor con estos horarios.

Sin embargo, tener estos turnos, o cambiar de horarios constantemente no es tan benéfico para la salud, sobre todo con el paso de los años. Pues en la juventud es fácil hacerlo, pero cuando se envejece el cuerpo necesita descansar más.

Según un estudio realizado por el American Journal of Preventive Medicine, las mujeres que trabajaban como enfermeras, y cuyos turnos cambiaban constantemente, mostraban la tendencia a disminuir su esperanza de vida y eran propensas a sufrir enfermedades cardiovasculares.

Además, las mujeres que intercambiaron horarios durante 15 años, tenían el riesgo de morir por cáncer de pulmón.

Los investigadores tomaron la información de 75 mil enfermeras en Estados Unidos, y encontraron que aquellas que trabajaron por más de seis años con rotación de turnos, sólo el 11% experimentaba que su esperanza de vida se había reducido.

El riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular alcanzó a un 19%, para aquellas personas que trabajaron en condiciones similares entre seis y 14 años. Las mujeres que trabajaron por más de 15 años, elevaron el riesgo a 25% de morir de cáncer de pulmón.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), consideró estos factores, en 2007, como una causa de cáncer.

Algunas consecuencias de no dormir bien son:

1. Riesgo de tener un accidente cerebrovascular.
2. Lleva a la obesidad debido a los cambios hormonales, menos horas de sueño elevan la producción de hormonas relacionadas con el hambre.
3. Incrementa el riesgo de diabetes, hay una relación entre la falta de sueño y la resistencia a la insulina.
4. Pérdida de memoria, regularmente los días que estamos más cansados tendemos a recordar menos. La falta de sueño lleva a tener problemas cognitivos permanentes.
5. Daño en los huesos, no dormir provoca cambios en la densidad mineral de los huesos y en la médula ósea.

Jbf