Perspectivas para 2015

Hoy es mi primera colaboración del año 2015. Quiero empezar por lo más importante: desearle a todos los lectores de Excélsior lo mejor para este 2015. Este mismo deseo lo tengo para México, como país, en las diferentes dimensiones como pueden ser la económica, la de seguridad y la de justicia social, entre otras.

En mi análisis del día de hoy me voy a concentrar en hacer una evaluación sobre qué tan factible es que los buenos deseos para el desempeño de la economía se vuelvan una realidad.

Empezaré por definir qué entiendo por un año muy bueno en términos económicos. Tener un crecimiento económico para 2015 entre 3.5 y 4.0% sería muy bueno para el país. Nos estaría indicando que se está iniciando un proceso de mayor dinamismo.

También es importante tener en mente cuál puede ser un escenario no del todo favorable. Si tomamos en consideración los datos más recientes lo tendríamos en un rango de 2.0 a 2.5% que si bien no es el óptimo, tampoco es un escenario catastrófico. En resumen: si todo sale medianamente bien el piso de crecimiento no será malo.

Para que los agentes económicos tengan confianza es muy importante que se den las señales correctas. Que no se den anuncios que, en realidad, no benefician, que confunden o que merman la credibilidad.

En específico, me refiero al anuncio del domingo pasado en el que se presentan una serie de medidas que realmente no dan una señal clara sobre la conducción de la economía. Por ejemplo, decir que ya no habrá gasolinazos cuando la gasolina en México es mucho más cara que en los otros países de América del Norte es algo que no es una gran noticia. Decir que millones de hogares recibirán televisiones digitales no es una acción a favor del crecimiento.

Para tener una visión de lo que puede afectar el desempeño de nuestra economía es importante entender el entorno. Es decir: qué elementos pueden ayudar y cuáles pueden afectar el crecimiento.

Un primer elemento que hay que entender muy bien es el comportamiento del mercado petrolero. También debe observarse qué factores afectan el comportamiento de la oferta y la demanda. Una visión inicial es que el aumento de oferta no va a desaparecer en el corto plazo y por lo tanto no tendremos precios elevados en los próximos meses.

Un segundo elemento es entender cómo nos puede beneficiar como país manufacturero el buen desempeño esperado de la economía de Estados Unidos.

Un tercer elemento es reconocer que en el mundo hay incertidumbre respecto de la zona euro y de otros países. Por lo tanto, en buena parte de 2015 vamos a tener volatilidad en las variables. Nos tenemos que acostumbrar a vivir con este fenómeno, al menos durante una parte del año y que no nos afecte.

Un cuarto elemento es cómo se da el desarrollo a nivel regional en el país y entre los sectores del país. Hoy tenemos sectores de actividad económica y regiones del país muy dinámicos y otros sin dinamismo. Si la inercia de ambos grupos se mantiene teniendo regiones y sectores que no aporten al crecimiento puede ser un lastre.

Un quinto elemento es reconocer que para el año 2015 los efectos de las reformas estructurales todavía no se van a ver. Es decir, no podemos poner en estos cambios la esperanza de un buen escenario.

El sexto elemento es que ante un choque adverso de ingresos, como el Presupuesto ya llevaba un endeudamiento importante, no se verá bien por los mercados recurrir a más deuda para mitigar el choque de ingresos. El camino tendrá que ser por la vía de menos gasto.

Hay muchos factores que habrá que ir entendiendo en su evolución para saber si vamos a estar en el escenario de buenos deseos o en el piso.

Independientemente de lo anterior, hay dos temas que se deben observar y cómo se van atendiendo por el gobierno de una manera creíble y que son la aplicación del Estado de derecho y la corrupción.

Si en estas áreas no hay señales claras de que el gobierno va a cambiar se podría volver un factor que contamine a la evolución de la actividad económica.

En resumen: es un año en el que aun el piso que no es malo,  puede llegar a ser bueno. Pero se deben hacer muchas cosas para que nos vaya bien, además de tener un poco de buena suerte.

*Director General del FUNDEF
guillermozamarripa@itam.mx