Convención Bancaria, nuevo estilo de SHCP y campo

Hoy inicia la 78 Convención Bancaria en Acapulco con un secretario de Hacienda quien, por primera vez, va a estar desde la mañana para tener dos encuentros con los banqueros: con la banca privada y en la comida con la banca de desarrollo.

Luis Videgaray podrá tener una relación más directa con los banqueros, después de que el gremio financiero había sentido cierta desatención, real o irreal, pero así lo sentía.

Ahora, esperemos que los banqueros sí se animen al diálogo franco con el secretario de Hacienda y no termine la reunión con un ir y venir de lugares comunes y diplomacias.

En la agenda: ¿cómo enfrentar alza en tasas?

Hay agenda para rato. Todos saben que van a aumentar las tasas de interés en Estados Unidos. ¿Cómo reaccionar en un ambiente de alza en tasas de interés?

Van a encarecer el crédito, o quizá los bancos puedan hacer un esfuerzo para mantener determinados productos como, por ejemplo, los créditos hipotecarios o algunos empresariales.

El tema preocupante de estos años ya no es el crédito, es el ahorro.

No se había ahorrado por falta de buenas tasas de interés, pero también fue porque el marco fiscal no estimula el ahorro y porque los banqueros tampoco crearon productos atractivos para el ahorrador: en el mejor de los casos, las familias y empresas podían mantener el poder adquisitivo similar a la inflación, pero no ganar rendimientos.

Los pendientes están ahí. Y desde luego un pendiente es cómo los bancos pueden ser palanca del crecimiento que se quiere tener, pues si bien con la Reforma Financiera están prestando mucho más, a nadie le queda duda que la banca puede tomar el papel de ser una de las fuertes palancas de desarrollo.

Videgaray sabe que cuenta con Luis Robles, el nuevo presidente de la Asociación de Bancos de México. Esperemos que la buena relación de verdad traiga resultados.

La transformación de Financiera Rural

Hay tela de dónde cortar entre Hacienda y los banqueros.

Otro botón de muestra es qué hacer con el campo. Los préstamos para el agro habían sido olvidados, por decir lo menos.

Desde que se transformó Banobras en Financiera Rural se les trató de dar un impulso. Pero después del primer impulso (que por cierto lo hizo el equipo del hoy canciller José Antonio Meade, y donde estaban Jaime González Aguadé, hoy regulador, y Aristóteles Núñez, hoy jefe del SAT), Financiera Rural tuvo años sin dar fuertes golpes… hasta ahora.

Ahora se llama Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero, pero más allá del largo nombre, el caso es que el crédito al campo empieza a fluir.

Y debe existir una cooperación entre la Asociación de Bancos de México y Financiera Rural. De hecho hoy estarán firmando un convenio.

Prestan al agro a tasas de 7.5%

Bajo la dirección de Juan Carlos Cortés, Financiera Rural aumentó sus clientes atendidos a más de 50 mil en un año.

Y lo que más llamó la atención: pudo bajar la tasa para prestarle al campo. La tasa máxima a la cual presta Financiera Rural es de 7.5%. Esto obligó a la banca privada a seguirla.

Sin embargo, financiera Rural está combinando sus préstamos tanto en primer piso (bajo 90 sucursales propias) y en segundo piso apoyada por la banca de desarrollo.

Se están prestando hasta 230 mil pesos para pequeños productos y a la tasa preferencial de 7%, en caso de mujeres productoras.

Había que hacer cosas distintas para llegar a los productores del campo. Y como ya existe la infraestructura de telecomunicaciones para tener internet casi en todo el país, entonces Financiera Rural salió con 300 laptops a prestar a los pequeños productores.

Comida con Peña, mensaje de Carstens, prevención de González Aguadé

El secretario de Hacienda, Luis Videgaray, recobra el que era el foro por excelencia del equipo hacendario: la Convención Bancaria.

Hoy Videgaray estará desde temprano en Acapulco. Pero la Convención también mantendrá un formato que se ha venido dando desde que Peña es presidente: en lugar de cena con los banqueros el día de la inauguración, mejor habrá comida con el Presidente. Esto obligará a los presidentes de los bancos a quedarse los dos días de la Convención para atender la comida con Peña.

Ahí estarán los tradicionales discursos del secretario de Hacienda, pero también el del gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, quien podrá darnos luces de cuándo el instituto central podrá enfrentar la volatilidad con alzas en tasas.

Y desde luego el discurso del regulador, Jaime González Aguadé, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, quien ha tenido un año bastante movido entre los fraudes de Oceanografía y Ficrea.

Como sea, el secretario de Hacienda parece determinado a retomar el foro bancario como un foro de discusión con las autoridades hacendarias.