¿Quieres un celular para videojuegos? Primero fíjate en estas cosas

Ciudad de México.- El mundo del juego en celulares está muy discriminado, principalmente por personas que creen que todo el mundo del gaming en móviles gira en torno a Candy Crush. No, no es así, entre los miles de juegos que puedes encontrar en las tiendas digitales de tu celular, puedes encontrar cosas interesantes para jugarlas sin problemas en un dispositivo móvil.

Un ejemplo claro de lo anterior puede ser Valiant Hearts, un título de Ubisoft que cuenta con una excelente narrativa y nos da un recorrido histórico por algunas tragedias de la segunda guerra mundial. Originalmente fue publicado para distintas plataformas como PC y el PlayStation 4, pero ¿qué pasa si no tienes ninguna de éstas dos? Ubisoft adaptó muy bien la experiencia "para llevar".

Es importante que si quieres comprarte un celular -para lo que sea- pienses en los usos que le vas a dar, si no, de alguna manera será dinero desperdiciado por no saber aprovechar todo el potencial de tu equipo, o por el contrario, por comprar un celular "al ahí se va" y esperar resultados que jamás obtendrás.

Esta es una pequeña guía para que pienses antes de adquirir un dispositivo celular (al menos uno que pienses usar de manera regular para videojuegos). Recuerda: criterios similares aplican para comprar cualquier cosa, siempre es necesario pensar en por qué estás realizando una inversión en cualquier producto.

1.- Procesador: Sin meternos en especificaciones arduas o muy técnicas, básicamente lo que debes checar al momento de adquirir un dispositivo es si el procesador cuenta con más de un núcleo. Si pasa esta prueba, ya tienes asegurado que te dará un buen rendimiento a la hora de jugar; sin embargo, la decisión "difícil" llega a la hora de decantar por uno que tenga procesador Dual Core (dos núcleos) o Quad Core (cuatro núcleos). Entre mayor número de procesadores, la respuesta ante un número mayor de aplicaciones será más eficaz, o bien, no tendrá problemas con aplicaciones muy pesadas.

Con un terminal con dos núcleos no deberías tener problemas, pero si puedes optar por un Quad Core, mucho mejor. La velocidad del procesador también es importante, asegúrate que esté como mínimo con 1 GB de RAM, si optas por algo abajo de eso, no esperes jugar grandes cosas.

2.- Almacenamiento/memoria: No es tan complicado como suena, pero hay un apartado importante que debemos aclarar: aunque los celulares dicen que cuenta con X cantidad de memoria, solamente un porcentaje es designado para las aplicaciones, por lo que te puedes llevar una sorpresa.

Hay celulares que hacen gala de una memoria interna de 8 GB, sin embargo, algunos -sí, algunos- tienen un sistema de archivos diferente al de almacenamiento; por ende, esos 8 GB de almacenamiento se reducen un poco, provocando que aunque tu celular cuente con una memoria interna, a las cinco aplicaciones marque que "el dispositivo no tiene espacio para la instalación". Esto puede arreglarse de dos maneras: moviendo -si lo permite- los datos de las aplicaciones a una memoria externa o la otra, que es "rootear" (o desbloquear) tu celular y dividir una memoria externa para que el celular la detecte como una expansión para aplicaciones.

Entre mayor sea la memoria externa, mucho mejor, así tu navegación podría ser más rápida con el almacenamiento de algunos datos temporales.

La versión de KOF A 2012 suele dar problemas por su peso. Fuente: SNK.

3.- Batería: Hay varios juegos que aunque no estén muy pesados o tengan gráficos en 3D, suelen consumir mucha batería del dispositivo móvil. Algunas aplicaciones y juegos pueden aumentar la temperatura de dicho dispositivo, lo cual provoca que el consumo de batería sea mayor, (esto suele pasar con emuladores). En ocasiones si el dispositivo llega a cierta temperatura, las aplicaciones pueden cerrarse o trabarse y presentar varios fallos.

Jugar en celulares es un arma de dos filos, específicamente con la batería, aunque esto puede ocurrir en consolas portátiles, no están exentas. El calor corporal de tus manos cerca de la batería puede provocar que el desgaste sea mucho mayor y algunas quemaduras leves, al menos el síntoma. Sé cuidadoso y no utilices tu dispositivo mientras está cargando.

4.- Versión de software: Los dispositivos "funcionales" deberían contar con una versión de Android mínimo en 4.0, de esto puede depender que varias de las aplicaciones funcionen, porque algunas veces un pequeño número puede hacer la diferencia entre que puedas o no disfrutar de un título. Si tienes dudas y preguntas respecto a lo que estás comprando, pregunta sin miedo, no pueden negarse a darte la información. La decisión final es tuya.

Si ves que el celular que quieres cuenta con una versión superior a 4.0 de Android y tiene una memoria RAM de 512, puede que no sea la mejor idea, puesto que no responderá con la velocidad que debería, aquí la versión de software es importante porque tenemos que buscar un equilibrio entre los componentes.

5.- Pantalla y resolución: Debe ser de un tamaño considerable, entre más amplia mejor. El mercado de los smartphones se mueve entre unas 5 pulgadas, lo que es aceptable. La pantalla debe ajustarse a tus necesidades: puede ser pequeña pero a algunos les parecerá perfecta como para disfrutar el apartado visual del juego o incluso para los botones táctiles, puede suceder que no ves algún objeto, enemigo o detalle porque un dedo ya estaría tapando media pantalla, o un buen ejemplo es el emulador de Nintendo DS, ocupa no sólo "dos pantallas" sino espacio suficiente para los botones de dicha consola. Se aconseja una pantalla con resolución mínima de 800x480 píxeles o más y una densidad de pixeles de 330, de esto dependerá un poco qué tan bien se vean los juegos.