Ganar a cualquier costo

A principios del nuevo milenio varios países de Europa llevaron a cabo rondas de licitaciones de espectro radioeléctrico, para migrar a la entonces novedosa tecnología de telefonía móvil de tercera generación (3G). En Reino Unido y Alemania, quizás los países con mayor competencia en esta industria en Europa, los precios por las frecuencias llegaron a niveles estratosféricos: en el Reino Unido generaron un poco más de 35 mil mdd para el gobierno (siete veces mayor de lo esperado), mientras que la subasta alemana representó 46 mil mdd. Sin embargo, en muchos sentidos, estas subastas no fueron exitosas para el mercado de telecomunicaciones al apalancar a las empresas participantes e impedir el despliegue de nueva infraestructura (un proceso de por sí muy costoso).

Este episodio sirve de lección por la reciente subasta de espectro para concesiones de televisión en México. Grupo Radio Centro no la aprendió claramente y, en un evento previsto por muchos, no pudo pagar y estará ahora en una peor situación financiera que antes. Con la ejecución de la garantía de seriedad de 415 mdp y la deuda que arrastraba desde antes, de 1,579 mdp, este grupo de radiodifusión se verá en serias dificultades e incluso al borde de la quiebra.

¿Pero qué llevó a esta compañía a aventurarse en un “todo o nada”? Quizás la forma más fácil de explicarlo es desde tres vertientes: la ilusión de Francisco Aguirre, el pater familias de la dinastía Aguirre, de regresar a la televisión, la promesa fallida de algún inversionista (que no ha sido revelado) de respaldar la operación y, más importante, la apuesta por la televisión como una fuente de diversificación de ingresos y saneamiento financiero. Es muy probable que, bajo estas tres vertientes, haya puesto todos los huevos en una sola canasta y el resultado está a la vista. Ofreció un precio muy por encima del mínimo de referencia, no pudo pagar, el IFT declaró desierta la licitación y ahora ejecutará lo que puede ser la estocada mortal para sus finanzas.

Sin embargo, todo ello es especulación. Lo que es cierto es que es una empresa que cotiza en la Bolsa y el precio de su acción ha caído al día de ayer alrededor de 30%, reflejando así el pesimismo del público inversionista en su fortaleza financiera. Seguramente Grupo Radio Centro estará esperando la ejecución de la garantía de seriedad que dejó para la licitación para litigar ante los tribunales judiciales (una vez que se configure el acto administrativo) y hasta, posiblemente, de la opinión pública, tal y como es práctica en esta industria.

Las lecciones están muy claras. Lo que los formadores de políticas públicas deben hacer es impulsar el uso de internet. El mercado de publicidad de televisión abierta en México es, de acuerdo con la Asociación de Agencias de Medios, de 37 mil mdp (2013) o 53% del mercado total de publicidad en medios. Sin embargo, el de internet está creciendo a tasas de más del 20% cada año y ahora representa casi el 10% del mercado mexicano.

Ello requerirá, entre otras cosas, priorizar licitaciones de espectro para banda ancha móvil y una agenda de competencia para disminuir costos.