Una nueva visión eléctrica

A mediados de la década de los setenta del siglo pasado, Bill Gates tuvo la visión de que podría existir una computadora en cada escritorio. En ese entonces muy pocos advirtieron el cambio profundo que dicha visión generaría para el mundo. Hubo otros visionarios, como Steve Jobs, que aportaron un mejor diseño y a inicios del siglo XXI, la generalización de la adopción de los teléfonos inteligentes. Observar con atención las nuevas tendencias, que van surgiendo a través de las visiones de este tipo de personajes, es indispensable para entender cómo se va perfilando el mundo.

Una de estas visiones se presentó el jueves por la noche en California, Estados Unidos, el visionario es Elon Musk, quien ganó notoriedad desde que cofundó PayPal y a sus 30 años se encontró con 100 millones de dólares en la bolsa, luego de haber vendido la compañía al portal de subastas eBay.

Una de las características de Elon Musk es que suele soñar en grande, por ello fundó SpaceX, con la idea de llevar a un ser humano a Marte, hasta el momento su mayor logro es haberse convertido en la primera compañía privada en recibir un contrato con la NASA para llevar una carga a la Estación Espacial Internacional. Musk también fundó Tesla, la cual se dedica a desarrollar vehículos eléctricos deportivos.

Aunque ambas empresas son revolucionarias y pueden definir cómo nos transportaremos en el futuro, tanto en la Tierra como en el espacio exterior, lo que presentó Elon Musk en la semana que termina podría tener efectos más inmediatos en la sociedad. Se trata de Powerwall, una batería que tendrá un costo de tres mil 500 dólares y que permite almacenar electricidad para proveer energía eléctrica a una casa.

La batería que puede ser instalada en una hora, está pensada para alimentarse de paneles solares, aunque también puede conectarse a la red eléctrica y ser utilizada ante apagones o en lugares muy remotos en donde no hay un servicio muy regular de electricidad.

Además, se pueden enlazar hasta nueve baterías juntas y estarán conectadas a internet para funcionar de manera inteligente. Elon Musk también presentó una batería de aplicaciones industriales, de hecho la presentación de Tesla Energy, que es el nombre de la nueva compañía que las va a comercializar en tres meses en Estados Unidos, se dio utilizando las baterías cargadas con energía solar.

Musk planteó que para suplir las necesidades eléctricas de todo el mundo se necesitaría colocar en el mercado dos mil millones de baterías. Aunque la cifra suena lejana, también parecía muy alejado de la realidad lo que planteó Bill Gates a mediados de los setenta.

La tecnología presentada por Musk puede ser un gran diferenciador en el consumo de energía en el futuro, que tiene el potencial de resolver el tema de acceso a fuentes de energía en regiones muy apartadas y, al mismo tiempo, podría ser una herramienta muy efectiva en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, que contribuyen al calentamiento global.

Seguramente, en los siguientes días veremos cualquier cantidad de críticas que apuntan a que lo presentado por Musk es una ilusión, después veremos ataques orquestados por parte de las industrias incumbentes, es decir las compañías de electricidad y, por supuesto, también veremos imitaciones o ideas mejoradas del concepto de Musk, pero más allá de las dificultades que puede enfrentar la Powerwall, tiene los elementos para convertirse en una gran revolución.