Darío Celis

Tiempo de negocios

Darío Celis

21 May, 2015

Chinos piden compensación de 700 mdp por el fallido tren rápido

El China Railway Construction Corporation ya hizo la petición formal de la indemnización que pide por la cancelación del Tren de Alta Velocidad México-Querétaro. La firma presidida por Meng Fengchao solicitó al gobierno mexicano una compensación superior a los 700 millones de pesos.

A su vez, las tres compañías mexicanas que complementan el consorcio están requiriendo por separado un resarcimiento de aproximadamente 40 millones de pesos más. Es importante destacar que éstas últimas están respaldando su solicitud con documentos y facturas.

Lo anterior es relevante, porque en el caso de los asiáticos hay indicios de que el monto de los gastos que reclaman estarían inflados, lo que algunos ven como una mala señal debido a que no descartan que esta controversia termine en tribunales.  

A inicios del presente mes el Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos (INAI), que encabeza Ximena Puente, resolvió que sólo una parte del documento que explica la cancelación del tren rápido podía clasificarse como reservado.

China intenta presionar por otros medios. La Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, principal agencia de planificación económica, está pidiendo tomar en cuenta intereses como la mano de obra y dinero que las compañías chinas invirtieron en el fallido proyecto.

Asimismo están incidiendo para que otras empresas, como la automotriz FAW y la constructora China Harbour Engineering Company, critiquen el clima de negocios para invertir en México. Por ahí hay ya varias declaraciones públicas provenientes de ese país en ese sentido.

Lo anterior se da en un contexto en el que la administración del presidente Enrique Peña Nieto ha seguido invitando a las empresas chinas a desarrollar proyectos, como la expansión del puerto de Guaymas, la construcción de un astillero en Tuxpan y un gasoducto en Baja California.

E&Y AVALA OHL

OHL salió bien librada en el informe sobre las supuestas malas prácticas en su filial mexicana. El informe entregado por Ernst & Young, de Francisco Álvarez no encontró irregularidad alguna en la concesión SCEM-CCA-0107 otorgada en 2008.
La firma corroboró que OHL México, que comanda Sergio Hidalgo, cumplió a cabalidad y fielmente los términos y condiciones de la concesión del Viaducto Bicentenario de México que tendría una extensión de 32.2 kilómetros de longitud. En el informe se asegura que la empresa española no cometió perjuicio económico alguno al Estado de México, que gobierna Eruviel Ávila.

DOCTOR ORTIZ

No pierda de vista a Guillermo Ortiz. Quien fuera presidente de Banorte hasta noviembre del año pasado tiene muchas razones para seguir ligado al banco que fundó Roberto González Barrera, pero sobre todo con quienes son sus herederos reales: la familia Hank.

La principal es que el exgobernador del Banxico habría atesorado una tenencia accionaria en el grupo de por lo menos 1.5%. No se equivoque. El doctor Ortiz es el hombre clave de Banorte en los negocios que se ven venir con la Reforma Energética. Está gestionando un gran fondo de inversión en nuevos proyectos.

BURILLO Y POSH

Tras de que el juez de Oceanografía, Felipe Consuelo Soto, diera por concluido el concurso mercantil, los más optimistas juran y perjuran que la naviera volverá a surcar los mares en julio o agosto próximos. Su rápida incorporación va a depender de quién sea el nuevo socio que, de entrada, inyectará 75 millones de dólares. Debe tener la bendición de Pemex. Interesados había muchos hasta principios del año pasado. Apunte a Carlos Hank Rhon, Alejandro Burillo y Miguel Alemán, amén de grupos internacionales como el noruego Seadrill y el singapurense Grupo Posh.

VA ORO NEGRO

Y mientras unos salen otros tientan terreno del concurso mercantil. Se trata de Oro Negro. Le había platicado que Pemex suspendió la contratación de nuevas plataformas, lo que llevó a esta firma que hasta hace unas semanas dirigía Gonzalo Gil a entrar en crisis con los tenedores de bonos que lo financiaron. El accionista mayoritario, José Antonio Cañedo White, le pidió a su amigo y abogado de confianza, Alonso Rivero, que le prepare el escenario concursal. Este litigante, por cierto, es el que trabaja para los bonistas que se llevaron el barco Goliath de Oceanografía.

CHEMA TAMBIÉN

Quien también ya fue rescatado por Roberto Hernández es José María Zubiría. Chema fue forzado a renunciar casi a la par que Javier Arrigunaga de Banamex-Citi por el caso de Oceanografía. Tenía a su cargo la Dirección Corporativa de Administración del grupo. Y al igual que Arrigunaga, recientemente fue incorporado a las empresas de Hernández Ramírez en calidad de administrador. De hecho es el brazo derecho de Arrigunaga. Quien contra viento y marea se mantiene dentro de Banamex es Alonso García Tamés. Es director de Banca de Gobierno.

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