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Ciudad de México.- La comida tiene más importancia de la que a veces le otorgamos, muchas veces no nos damos cuenta por el ritmo de vida que actualmente llevamos. Encontrar el momento adecuado para comer es difícil por la falta de tiempo.
Muchas personas tienen la costumbre de comer de pie porque es más rápido, y así se puede regresar pronto al trabajo. Sin embargo, el no comer sentado puede perjudicar nuestra salud, ya que no resulta adecuado para la digestión.
Cuando se come de pie es más difícil estar relajado y se engullen alimentos de manera más rápida. Al hacerlo con mayor velocidad se genera estrés y se ingiere más aire. De acuerdo con la Revista Española de Enfermedades Digestivas, el aire que se traga es el principal origen del gas en el estómago.
Al dedicar poco tiempo a comer también nos lleva a comprar comida rápida o alimentos poco saludables. Las consecuencias son muchas, pero la más inmediata es el riesgo de padecer obesidad.
De inicio, es esencial disponer del tiempo adecuado para ir a comer, para tener una buena digestión sólo se deben ingerir los alimentos a un ritmo normal y masticar correctamente la comida.
Comer de pie no es tan malo, sólo se debe tomar el tiempo necesario y no hacerlo con prisa. Sin embargo, el hecho de hacerlo de pie implica que tenemos prisa, y corremos el riesgo de ingerir más alimentos, pues al tragar más rápido la sensación de saciedad tarda en llegar.
Actualmente, la relación que tenemos con la comida está muy descuidada, pues el acto de comer implica, no sólo dedicar el tiempo necesario, sino que también debe servir para desconectarnos de lo que hacíamos antes de ir a comer.
Los nutriólogos aconsejan que bastan hasta 20 minutos para comer, pero hay que hacerlo concentrados.
Varias de las técnicas de Mindful Eating, o Alimentación con Atención Plena, establecen que es necesario mejorar la manera en cómo nos relacionamos con la comida y entender el por qué comemos.
Según la página de Mindful Eating México, “hemos olvidado cómo es comer cuando tenemos hambre y parar cuando hemos comido suficiente.”
Y es que, “es muy fácil comer cuando es la hora, pero también lo es cuando hay comida frente a nosotros o en respuesta a emociones como enojo, ansiedad, depresión, o simple aburrimiento.”
La filosofía central del Mindful Eating, no es cambiar lo que comemos, sino cómo lo hacemos.
Éste podría ser el punto central del tema, tal vez no tenga nada de malo comer de pie, pero si podría ser incorrecta la forma en cómo comemos.
Jbf
