José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

19 Jun, 2015

Capital para startups

Ayer se dio una reunión privada entre el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, y empresarios jaliscienses. De ahí surgió una propuesta que ya se ha visto en otros países, pero que en México puede ser innovadora: crear una Asociación Público Privada para apoyar las startups, que vienen siendo las empresas de reciente creación con rápido crecimiento, con alto valor agregado, y que han hecho famosos sus primeros lugares de origen, desde el Silicon Valley y la costa de San Francisco, hasta países como Israel, que están logrando un impulso económico a través de la generación de nuevas empresas.

SILICON VALLEY LATINOAMERICANO

Las startups pueden definirse de muchas maneras: son empresas con ideas innovadoras, que suplen necesidades de los consumidores o empresas, y tienen una gran agilidad para crecer en ventas y empleos. Incluso dentro de las definiciones las ponen como empresas gacela. Lo cierto: son totalmente positivas al generar valor y empleos.

Jalisco es un buen lugar para el surgimiento de novedosas pequeñas empresas, a través de un financiamiento público apoyado con capital de riesgo del sector privado. Incluso a las afueras de Guadalajara existe un centro empresarial para tecnologías de la información, o como lo denominó Financial Times: el Silicon Valley latinoamericano.

El periódico inglés recordaba que en Guadalajara se encuentran firmas de gran nombre, como IBM, Oracle, Intel, Solectron, y atrae mano de obra joven y muy calificada. Incluso en Guadalajara existe la Ciudad Creativa Digital, para realizar la innovación en esta industria.

El problema que sigue es claro: financiamiento.

OCDE RECOMIENDA POLÍTICA DE STARTUPS

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, la OCDE, recomendaba tener una política pública clara para apoyar las startups. Entre los financiamientos posibles vienen desde el subsidio claro hasta las posibilidades público-privadas.

Y es ahí donde el secretario Videgaray y los empresarios jaliscienses pueden iniciar un modelo que se replique a lo largo del país. El financiamiento público le entra, pero de la mano con el privado, con capital de riesgo, donde veamos hombres de negocios dispuestos a participar en una novedosa empresa, en verdaderos emprendedores.

EN EU E ISRAEL: HASTA 50% DE CAPITAL PRIVADO

La OCDE recuerda casos de éxito de financiamientos con capital de riesgo.

Por ejemplo, en Estados Unidos, los recursos que aportan capitales de riesgo e inversionistas ángeles (quienes aportan capital, pero también experiencia y contactos), va desde 20 hasta 50% de nuevas empresas con alta capacidad de crecimiento y que están basadas en el conocimiento.

En Israel existen los fondos de riesgo que llegan a aportar entre dos y seis millones de dólares.

Las APP planteadas por Hacienda pueden ser una modalidad del capital de riesgo, donde una garantía vaya por cuenta del financiamiento público, pero otra por cuenta del privado.

CAPITAL DE RIESGO CON APP, APENAS INICIA

La experiencia internacional es contundente a favor de las pequeñas empresas innovadoras, muchas de ellas basadas en alta tecnología o tecnologías de la información (aunque también en otras áreas).

Desde luego, están los casos más renombrados de startups que crecieron hacia grandes empresas: Facebook, Instagram, Uber, Amazon, Twitter. Y hay otro tanto de empresas que no son tecnológicas, pero sí innovadoras.

El tema en México: impulsar a los emprendedores con ideas novedosas, que vengan a crear y llenar huecos en los mercados, a través del financiamiento público-privado.

En México hay esfuerzos como el realizado por el Fondo Pyme. Pero permitir que junto con el financiamiento público esté el capital privado de riesgo, podría darle no sólo seriedad, sino garantizar que se tratará de hacer productivas a las empresas nacientes. Esperemos que esta propuesta de APP prospere.

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