Ser vulnerable

Hace unas semanas Sheryl Sandberg, directora operativa de Facebook y una de las mujeres más poderosas y admiradas del mundo de los negocios y la tecnología, hizo algo impensable: aceptó que era un ser humano. Después de la trágica muerte de su esposo escribió dos cartas al público en donde expresaba su crudo dolor.

Obviamente esto es una reacción normal de cualquier viuda, pero no para un alto ejecutivo.

Lo que hace unos años hubiera sido un no-no en el mundo de los negocios particularmente para una mujer, abrió un debate muy interesante: El demostrar que somos vulnerables, léase humanos, ¿es una debilidad o realmente una fuerza en la vida profesional?

Antes se “pensaba” que la vida personal y la del negocio debían mantenerse completamente separadas. Autómatas de 9 am a 5 pm y humanos fuera de la oficina. Demostrar que la vida personal pesaba o dolía era visto como una carencia de carácter o una falta de profesionalismo. Pero poco a poco, la manera de pensar está cambiando y el nuevo esquema, mucho más humano, acepta que demostrar vulnerabilidad no sólo es algo inevitable para los seres humanos (que es lo que somos aun detrás del escritorio) sino que, también, es un arma poderosa para conectarnos con la gente con la que trabajamos y hacernos líderes/colegas/proveedores más efectivos, generar mejores equipos de trabajo, conexiones más humanas y esquemas de trabajo más horizontales. Todo lo cual genera resultados positivos en el bottom line.

Ahora bien, el ser vulnerable o promover a los demás abrirse en el ambiente de trabajo, no implica (¡definitivamente no!) hacer de la oficina un foro de Mujer, casos de la vida real, en donde todo mundo deba caminar con una caja de Kleenex moqueando y llorando. Necesita existir un ambiente de “vulnerabilidad productiva” en donde la gente, incluyéndote a ti, tenga el valor de bajar la guardia y aceptarse como humano a la vez que se siga cumpliendo los objetivos de trabajo.

Pasos para ser exitosamente vulnerable en el trabajo:

1.- No todo te puede quebrar. Escoge tus batallas y escoge tus debilidades. El demostrar que todo te rompe y todo te quiebra, realmente, te hace una figura de telenovela. No un líder exitoso o un trabajador profesional. Quejarse o atormentarse por problemas cotidianos, a los que todos estamos expuestos, no califican como señal de vulnerabilidad sino como una actitud melodramática. Cierto, no debes esperar a tener una tragedia como la de Sandberg para demostrar vulnerabilidad (es algo que poca gente le pasa), pero tampoco “todo” puede ser un tema de quiebre.

2.- Foro es fondo. No todo momento ni todo lugar de la oficina es el adecuado para abrirse ante la gente. Encuentra el lugar y el foro adecuado para transmitir a la gente con la que trabajas lo que estás sintiendo. Los medios internos de comunicación son ideales para transmitir comunicaciones masivas (como lo hizo Sheryl) o encontrar los momentos adecuados para hacerlo cara a cara con la gente. El tener un breakdown a la mitad de una conference call no es particularmente productivo. Aun en medio de los problemas más difíciles uno puede elegir la manera más seria y adecuada de transmitirlos.

3.- La vulnerabilidad no puede ser un pretexto. No puedes usar lo que te está pasando como razón para fallar en el trabajo. Puedes utilizarla para explicar cambios que necesitas o peticiones específicas de antemano, más no para justificar fallas en el trabajo o en los resultados. Más vale anticipar que lamentar. Si enfrentas un evento importante en tu vida que va a impactar tus resultados de trabajo sé frontal y anticipa lo que va a pasar… No busques después la justificación de por qué no pasó.

4.- Se empático más no barco. El demostrar vulnerabilidad implica, obligatoriamente, aceptar también la vulnerabilidad de los demás. Si alguien en tu equipo de trabajo se acerca a ti para abrirse pídele que siga los tres puntos anteriores. Abre el oído y el corazón, pero mantén los objetivos de trabajo y del negocio siempre en mente. La gente puede demostrar su debilidad, y puedes adaptar ciertas cosas para demostrar apoyo, pero el trabajo y los resultados no pueden ser olvidados.

PARA VER

Si quieres saber más sobre El Poder de la Vulnerabilidad (The Power of Vulnerability)  busca la plática, con este nombre, impartida por Brené Brown en Ted.com.