David Páramo

Análisis superior

David Páramo

24 Ago, 2015

Deber patriótico

Parece que existe el deber patriótico entre comunicadores, líderes de la iniciativa privada, analistas económicos y una buena parte de la opinión pública de anticipar una crisis derivada del tipo de cambio, caracterizada por alza en los precios, caída en la economía y todas las plagas que desde mediados de la década de los setena y hasta 1995 azotaron continuamente al país.

Los argumentos, paradójicamente, no son racionales económicos sino que tienen un muy fuerte componente sicológico. Ya nos engañaron muchas veces, ¿por qué éstos serían diferentes? Vamos, hasta alguien dice, como argumento contundente: son priistas.

Para anticipar un repunte en la inflación, por ejemplo, es necesario ver el Índice Nacional de Precios al Productor, que señala, con cierta anticipación, el momento en el que la mayoría de quienes ofertan bienes y servicios incrementarían los precios.

Quienes sienten el deber patriótico de anticipar la crisis hacen una relación económica bastante simplona: si la devaluación, en lo que va del año, es superior a 27%, quiere decir, indefectiblemente, que habrá impacto en los precios y una fuerte caída en la economía.

Sin embargo, determinan no darle relevancia o abiertamente ignorar un cambio fundamental. Cuando una devaluación era sinónimo de crisis, el país tenía un modelo de tipo de cambio fijo, desde hace más de 20 años el país tiene un banco central autónomo y un modelo de libre flotación, es decir, la oferta y la demanda determinan cuál es el nivel correcto de tipo de cambio sin que, necesariamente, implique ajustes en otras variables económicas.

INFLACIÓN

La inflación se encuentra en el nivel más bajo desde que existe registro, hace 45 años, en 2.74% y los indicadores muestran claramente que se mantendrá rondando 3%, no sólo este año sino el próximo.

No sólo es la meta del Banco de México de largo plazo (3% más menos un punto), sino es el consenso de los analistas que consulta el instituto central y de algunos otros privados. Hasta el momento, ningún agorero del desastre económico ha comprometido una cifra sobre el repunte de inflación.

¿Cuál es un nivel preocupante de INPC? El año pasado llegó a un máximo de 4.48% y nadie se rasgaba las vestiduras. En algunas columnas puntualicé este nivel y la necesidad de tomar medidas para enfrentarlo.

Algunos creen, como fecha fatídica, que el próximo mes comenzará una escalada de precios. Supongamos, sin conceder, que agrupaciones como la Concamin y la Canacintra realmente cumplen su amenaza de violar la Ley Federal de Competencia Económica y suben precios de manera concertada.

Se enfrentarían a alguna clase de respuesta por parte de la Comisión Federal de Competencia Económica; acciones mucho más contundentes de la Secretaría de Economía, como abrir cuotas de importación o bajar aranceles en los casos que sí aplique.

Y la determinación del equipo de Agustín Carstens, que incluso podría aumentar las tasas de interés antes que la Fed para cumplir con su objetivo central. El Banxico no está para cuidar un nivel de tipo de cambio, sí para garantizar la estabilidad de precios, a pesar de que no haya crecimiento.

CRECIMIENTO

Uno de los “argumentos” en contra de la inflación es que el consumo está parado. Entonces que expliquen por qué los datos de la ANTAD reportan un crecimiento en las ventas cercano a 6% en lo que va del año. Datos del INEGI confirman que el consumo interno está creciendo.

Sí, un crecimiento de 2.2% durante el primer semestre parece poco para las necesidades del país; sin embargo, es excelente si se considera que es superior a 1.8% registrado en el mismo lapso de un año antes.

La economía mexicana, una de las cinco que más creció en el mundo durante el primer trimestre y con el mayor avance de América Latina, se encuentra entre las de mejor desempeño del orbe.

DEBER PATRIÓTICO

Con base en mi vasta experiencia en temas económicos, que se remonta a 1988 sin haber dejado un solo día de atender estos temas, estoy cierto de que se trata de un momento inédito de la economía no sólo nacional sino mundial; que verlo con ojos antiguos es negar el avance institucional del país y la solidez que durante dos décadas ha tenido el manejo de la economía nacional.

La inmensa mayoría de los funcionarios del Banco de México y de la Secretaría de Hacienda son servidores públicos de carrera, quienes están ocupados en la estabilidad del país, no de proteger a un grupo político.

Así que el verdadero deber patriótico es decir la verdad, aun cuando no resulte popular.

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube