¡Nacidos para ganar!

FRÁNCFORT.– Así es como se define la impresionante “colaboración” corporativa entre la Alianza Renault-Nissan (ARN) con 16 años de existencia y cuyo CEO es Carlos Ghosn, y el corporativo Daimler, que preside Dieter Zetsche:
“Nacidos para Ganar Siempre”.

¡Y cómo no! Nacen de una idea práctica. Lograr sinergias para ahorro en costos y no reducir su capacidad de inversión en investigación y desarrollo e infraestructura.

Sellan las alianzas con cruces accionarios, que en todos los años les ha hecho favoritas de los mercados por las utilidades y dividendos generados y, su objetivo es aumentar su capacidad de competir, sin perder identidad de marca corporativa y de modelo automotriz, frente al consumidor.

Creen en lo mismo para el futuro: autos conectados a dispositivos, autos eléctricos, movilidad y autonomía, capacidad de personalización, estrategia multisegmento (masivo, intermedios y premium) y menores emisiones.

Escucharlos permite entender por qué Ghosn la describe como “la alianza más “sostenible” de la historia automotriz: sus resultados son reales, se basan en proyectos que permiten nuevos lanzamientos cada año. Volvo, por ejemplo, este año ni siquiera se presentó en el Autoshow.

A la ARN se sumó desde hace seis años Daimler con un modelo distinto: trabajan por proyectos, aprovechan las sinergias y escalas de cada uno. Eso sí, la alta dirección no permite grillas entre equipos porque marca objetivos claros y tiempos precisos de entrega. En ese lapso concretaron 13 proyectos en tres continentes.

En el caso de ARN –que por Renault, es dirigida por Thierry Bolloré, y en Nissan, por Hiroto Saikawa– su éxito está en dejar de ser armadoras regionales para convertirse en el cuarto grupo automotriz mundial en 16 años, con ventas de 8.5 millones de vehículos en 2014, provenientes de ocho grandes marcas independientes, tienen huella en 146 países y se han planteado como objetivo vender diez millones de vehículos en 2016 –se ve difícil dada la caída de casi 36% en Rusia, 12% en Brasil, el ajuste en China y el moderado crecimiento en Europa, Asia y Estados Unidos.

Destinan aproximadamente 8% de sus ingresos en investigación y desarrollo más inversión en infraestructura, y su capacidad de manufactura conjunta global incluye 32 plantas, además de la nueva coinversión en China, mercado que vende 19.5 millones de vehículos aún con crecimiento económico cercano a 6%, Renault adquirió una participación con el socio chino de Nissan, Dongfeng, para construir una planta de manufactura combinada.

Las sinergias se dan en cuatro áreas básicas: desarrollo tecnológico, fabricación modular, logística y exportación, compras globales y recursos humanos, que se han traducido en ahorros por tres mil 800 millones de euros acumulados en los 16 años de alianza y que el año pasado generó utilidades por 48 millones de euros a Renault y 10.48 trillones de yenes a Nissan.

México es el sexto mercado en importancia para ventas de la ARN, aunque en realidad este resultado se debe más a Nissan e Infiniti,  dirigidas por Airton Cousseau y Philipp Heldt, respectivamente, porque la primera mantiene el primer lugar en ventas con 26% del mercado y la segunda marca premier con cuatro años en el país, crece a tasas superiores a 30 por ciento.

El mercado mexicano en términos de ventas, sólo es superado en participación de mercado por Rusia y Francia, con participaciones superiores a 30% en carros vendidos, pero como nos dijo Ghosn, en “México la decisión del gobierno de cerrar la frontera a la importación de autos usados ha hecho la diferencia, pues eliminó el principal obstáculo para crecer el mercado doméstico”.

En cuando a los resultados del Acuerdo de Cooperación con Daimler, que vede 2.5 millones de vehículos y genera ingresos antes de impuestos por 10 mil 800 millones de euros, Zetche la considera “cómoda y exitosa”,

Tienen seis años con 13 proyectos realizados en tres continentes (incluyendo la producción de la X-Trail y el Smart), y han iniciado el más agresivo en 2015: la construcción de la Planta de Manufactura en Aguascalientes, que para 2018 agregará 230 mil vehículos de nueva generación de premium para el mercado NAFTA, tanto de la marca Infiniti como de Mercedes-Benz. “¡Una colaboración de mil millones de dólares no se da todos los días!”, bromeó Ghosn y avaló Zetche.

También por primera vez, Daimler entrará al mercado de pick ups Mercedes-Benz de una tonelada, aprovechando su plataforma, red de distribuidores y la experiencia Nissan en ese mercado, pero el modelo alemán se producirá en Argentina y España, porque la planta de Cuernavaca sólo tiene capacidad para satisfacer la demanda de la NP300 de Nissan y la Alaskan de Renault.

El tercer proyecto anunciado para 2016 son las versiones eléctricas de Twingo-Renault y Smart-Daimler, con motor producido en la fábrica de Cléon en Francia y, el Infiniti Q30, que comienza a producirse con componentes de Daimler en la fábrica de Nissan en Gran Bretaña. Son tres, pero no dude que sean más. ¡Han Nacido para Ganar!