WASHINGTON.- El presidente Barack Obama planea visitar este mes el Salón del Automóvil en Detroit, para celebrar el resurgimiento de la industria automotriz estadounidense.
La industria corría peligro de colapsar cuando Obama tomó la presidencia en 2009, pero en 2015 reportó ventas históricas.
Casi 17.5 millones de vehículos estadounidenses se vendieron el año pasado, lo que superó la marca de 17.35 millones del 2000. Los analistas pronostican incluso mayores ventas este año conforme la tasa de desempleo continúa en descenso y más compradores jóvenes entran al mercado.