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CIUDAD DE MÉXICO.- El fabricante de harina y productos de maíz Gruma dio a conocer que durante el cuarto trimestre del año pasado sus ventas crecieron debido a la debilidad del peso frente al dólar, fenómeno que benefició los resultados de su negocio en Estados Unidos, al convertirlas en pesos.
Sin embargo, la debilidad de la moneda mexicana también tuvo cierto efecto adverso, puesto que el costo del maíz aumentó junto con el de algunos aditivos y empaques.
Durante el periodo de referencia los ingresos crecieron 17 por ciento, hasta alcanzar los 15 mil 164 millones de pesos, contra 12 mil 907 millones obtenidos en igual lapso de 2014, mientras que el EBITDA subió 25 por ciento, a dos mil 490 millones de pesos.
Además, la compañía reportó un alza en el volumen de ventas de cuatro por ciento, resultado de mayores ventas en Gruma Corporation y GIMSA, otras divisiones de negocio de la fabricante de harina de maíz.
Sin embargo, en este lapso reportó pérdidas de dos mil 591 millones de pesos, a consecuencia de “cargos virtuales relacionados con la cancelación del valor en libros de su inversión neta indirecta en Molinos Nacionales (Monaca) y Derivados de Maíz Seleccionado (Demaseca), así como de las cuentas por cobrar que ciertas subsidiaras de Gruma que tenían con Monaca”.
En los últimos cuatro meses del año pasado, la empresa invirtió 64 millones de dólares en expandir la capacidad de sus subsidiarias e integrar mejoras a nivel tecnológico.
Así, en todo el año, la empresa destinó 221 millones de dólares al negocio de la fabricación de harina y tortillas de maíz.
