Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

Guillermo Zamarripa

27 Feb, 2016

Sobre el crecimiento económico

En la semana el Inegi dio a conocer el dato de crecimiento económico en 2015, que fue 2.5 por ciento. Hay aspectos positivos, negativos y en el detalle hay información adicional. Voy a presentar argumentos para dar una visión de lo que se puede esperar de la economía de México.

Un primer punto positivo, obvio, es que la tasa de crecimiento de la economía se viene acelerando en los últimos años. Para 2013 fue de 1.4% y en 2014 fue de 2.3 por ciento.

El primer punto negativo tiene que ver con que en los tres años el dato final de crecimiento fue menor que el estimado inicial. Es decir, se dio un fenómeno en el que las expectativas se fueron deteriorando para terminar muy por debajo del nivel originalmente planteado.

El segundo punto positivo es que el crecimiento acumulado en los tres primeros años del gobierno es de 6.32 por ciento. Cuando uno calcula la tasa anual compuesta tenemos que el crecimiento promedio anual fue de 2.06 por ciento.

Este crecimiento está en el rango de crecimiento promedio de la economía. Explicado de otra forma, lo que observamos es un crecimiento que es consistente con la media de la evolución en el pasado reciente.

Hay argumentos que aseguran que esta tasa de crecimiento es la mejor para los tres primeros años de gobierno de los últimos sexenios. La implicación es que los datos duros son un motivo para estar optimistas.

El segundo punto negativo viene de un análisis más integral. La tasa de crecimiento media de la economía en las tres últimas administraciones fue 3.2%, 2.2% y 2.1 por ciento. La tasa media de crecimiento de los sexenios anteriores ha estado por encima del nivel promedio de los últimos tres años.

Para llegar al promedio de la administración del presidente Fox la economía debe crecer más o menos a 2.4% anual el resto del periodo. Para llegar al crecimiento promedio de la administración del presidente Zedillo se tendría que crecer por encima de cuatro por ciento.

Cuando se estudian los datos se aprecia que hay una tendencia de crecimiento estable. Llegar a la primera meta hoy se ve factible. Llegar a crecer como hace tres sexenios se ve fuera de lo posible.

El punto negativo es que en la campaña nos dijeron que el crecimiento medio poco superior a 2% era malo para nuestro país. Nos prometieron que se lograría una tasa mayor. Hoy un escenario en el que se cumpla esta promesa se ve distante.

Esta situación me pone en un contexto en el que los participantes de la economía lo vean como de expectativas no cumplidas. El problema es que esto puede tener efectos en la elección.

Si bien se ve que es muy factible llegar a un escenario cercano a los sexenios de los presidentes Fox y Calderón, lo que se debe reconocer es que el margen de error es bajo. Si se hacen las cosas mal o si se percibe el endeudamiento de gobierno como un factor de riesgo se puede dar una desaceleración. Es decir, un escenario que se puede dar es que esta administración tenga un peor desempeño que las tres anteriores.

Un último tema que tiene que ver con la información adicional es el desempeño del sector de minería petrolera. Sí está siendo un lastre para el crecimiento económico. Si se quiere tener un buen desempeño de la economía se tiene que empezar a arreglar Pemex.

En resumen, el crecimiento bien no se ve que vaya a aumentar, estaremos en un desempeño inercial de la economía a menos que por malas decisiones entremos a un escenario adverso.

*Director general del FUNDEF

guillermozamarripa@itam.mx

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