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ACAPULCO.- La incongruencia entre los buenos resultados de la economía y la impresión extendida de crisis es vista como un problema sicológico que genera frustración entre los funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Banco de México.
Entrevistados por separado, Luis Videgaray y Agustín Carstens coincidieron en que se tiene que mejorar la comunicación y “encadenar una serie de sorpresas económicas positivas” para asombrar a los agentes económicos.
El gobernador del Banco de México explicó que “tenemos que romper la memoria, que muchas veces es muy larga, de que la gente se acuerda de hace más de 20 años cuando si había una depreciación, inmediatamente se iba a los precios. Una de las cosas exitosas que se ha hecho con la autonomía de Banco de México es romper precisamente esa correlación que existía”.
Videgaray explicó que “el tipo de cambio era la última barrera y ahora es la primera”.
Dijo que “la percepción de las personas tiene que ver con la historia, pero se olvida que hoy estamos en un régimen de tipo de cambio diferente y el peso se convierte en un mecanismo para absorber los choques”.
Reconoció que “lo más contundente es que a pesar de que hemos tenido una depreciación del tipo de cambio no hay una aceleración en la inflación; al contrario, tenemos una de las más bajas de las que se tiene registro.” Añadió que “en un entorno internacional complejo tenemos cifras e indicadores de la economía mexicana buenos. Ésa es la diferencia entre realidad y percepción.”
Carstens dijo que “en la medida en que seamos exitosos en mantener la inflación baja, eso se reflejara en las tasas de interés del mercado. Pensamos que la mejor manera de que podemos contribuir al crecimiento es manteniendo la inflación baja”.
Al ser cuestionado si existe frustración sobre el escepticismo sobre la marcha de la economía, Carstens dijo que “el entorno no ha sido cooperativo, pero eso no le quita valor a lo que se ha hecho y el impulso que se le ha dado al crecimiento. Sí es una frustración porque nosotros no podemos decir, imagínense que hubiera pasado si no hubiéramos actuado”.
El secretario de Hacienda consideró que la manera de romper esta dicotomía “tiene que ser con resultados. Conforme las familias puedan reconocer que el tipo de cambio se puede mover con volatilidad e incertidumbre internacional, pero la economía del país se mantiene estable.”
Por su parte, Luis Videgaray hizo un reconocimiento público a Agustín Carstens, a quien calificó “como el mejor banquero central del mundo”.
Luis Videgaray adelantó que como resultado de las reuniones que sostienen con los bancos, el mes próximo se realizará una subasta a través de la cual los bancos tendrán la oportunidad de cambiar créditos otorgados por el Infonavit por unos con menor pago.
Adelantó que en los próximos días el director general de Infonavit, David Penchyna, anunciará el mecanismo de subasta que buscará beneficiar en su primera etapa a unos 70 mil acreditados.
