CIUDAD DE MÉXICO.- A través de su ahorro para el retiro, los 54 millones de trabajadores con una cuenta de Afore están financiando el desarrollo económico de México, rol que cobrará mayor relevancia en medio de los recortes presupuestales del gobierno federal y la escasez de recursos del Estado para llevar a cabo grandes obras de infraestructura, dijo en entrevista Tonatiuh Rodríguez, director general de Afore XXI Banorte.
Explicó que la flexibilización que se ha llevado a cabo en el régimen de inversión de las afores, a lo largo de los 20 años que lleva en operación el Sistema de Ahorro para el Retiro, que tiene recursos por poco más de 2.5 billones de pesos, ha llevado a los trabajadores formales del país a convertirse en uno de los principales acreedores del gobierno federal y de las grandes empresas del país, pero también en accionistas de por lo menos 35 compañías y de grandes proyectos de obras de infraestructura.
Desde 2008, se permitió que las afores, con los ahorros de los trabajadores fondearan proyectos de infraestructura a través de los Certificados de Capital de Desarrollo (CKD), con ello los ahorradores del SAR se convirtieron en accionistas de esos proyectos, es decir en dueños de muchas de las carreteras, hospitales, plantas de tratamiento de agua, hoteles, bosques forestales, granjas de energía eólica y por su puesto lo serán de proyectos exploratorios de petróleo”, recalcó Tonatiuh Rodríguez.
Proyectos
Detalló que actualmente hay alrededor de 38 administradores distintos de CKD, los cuales han generado o emitido 59 series de certificados de capital de desarrollo en los que las afores han participado con casi 90% de la colocación, según sus estimaciones.
Lo anterior, significa que con el dinero para el retiro de los trabajadores se han construido por lo menos 59 grandes obras de infraestructura, entre las que destacan un libramiento de 21.4 kilómetros en La Piedad Michoacán, que conecta la región del Bajío, Celaya Irapuato y Guadalajara; la modernización, operación y mantenimiento de 36.6 kilómetros en la carretera Río Verde-Rayón; 76.6 kilómetros de la carretera Rayón-Cuidad Valles; un túnel de 2.9 kilómetros que hace conexión entre dos de las avenidas más importantes del Puerto de Acapulco; la carretera de peaje en Cancún, que conecta a los estados de Yucatán y Quintana Roo; el hospital regional de alta especialidad de Zumpango; y la generadora eléctrica San Rafael, en Nayarit.
Esto, dijo el directivo, crea un circulo virtuoso, ya que durante la construcción de estas obras de infraestructura se generan rendimientos que van a dar directamente a las cuentas de ahorro de cada trabajador, pero al mismo tiempo se generan más fuentes de empleo formal, por lo que se tiene una base más amplia de personas generando ahorro para el retiro, que puede servir para financiar nuevas obras, además de empresas y al propio gobierno federal.
Aumentarán participación en CKD
En los próximos cinco años Afore XXI Banorte duplicará la inversión en CKD, instrumentos que permiten financiar la construcción de una carretera y que permite generar atractivos rendimientos a los trabajadores, dijo en Entrevista con Excélsior Tonatiuh Rodríguez, director general de la administradora.
Afore XXI Banorte administra recursos por 637 mil 400 millones de pesos, de los cuales un 3.3% lo tiene invertido en Certificados de Capital de Desarrollo (CKD).
La visión de nuestros comités de inversión y la visión de mediano plazo es que esta clase de activos podría llegar hasta alrededor de 7 o 9% del activo”, comentó el entrevistado.
DV